Mamá- NamJin

C*16

Narra Jin:

Me dolió ver que enserio ver que enserio pensaba que yo lo había hecho con otra persona. ¿Acaso era yo el que le había engañado para tener sexo?

-Maldito idiota, no he follado desde que estuve contigo- dije haciendome el indiferente y mirando a otra parte.

Vi al idiota de NamJoon sonreír como un estúpido y no sé si tuve ganas de pegarle o de abrazarle. Ugh, las hormonas ya comenzaban a hacer de las suyas.

Las hormonas, el crcimiento de barriga, los mareos, los vómitos, el parto... Comencé a marearme de camino a casa, hasta sentí que se paraba el coche.

-Jin... Pequeño, ¿estás bien?- NamJoon acababa de volar hacia mi puerta y estaba dándome aire con un cartón mientras yo trataba de recuperar la consciencia.

-Tengo mucho miedo, NamJoonnie- hablé bajo mientras varias lágrimas se escurrían bajo mis ojos. No quería que le pasase nada a mi bebé.

NamJoon no tardó ni dos segundos en sacarme del coche y cogerme en un abrazo de oso. Comenzó a besar mi cabeza y segundos después me sentó a un lado algo alejado de la carretera y pasó su brazo por mis hombros.

-No voy a dejar que os pase nada, ni a ti ni a nuestro hijo, o hija- sonrió al final de la frase y pidió permiso para acariciar mi barriga.

Asentí avergonzado y miré hacia al suelo sintiendo mis mejillas enrojecer por su tacto sobre mi tripa. Lo había extrañado tanto... Varios cosquilleos se posaron en mi barriga y sentí ganas de besarlo, pero quité esa idea de mi cabeza rápidamente

-Quiero tenerlo- dijo decisivo NamJoon levantando mi mirada y mirándome fijo a los ojos.

Yo también quería tenerlo, cuidarlo juntos, que tenga sus ojos rasgados y su gruesa voz...

-Es fruto de una apuesta.

La mirada de NamJoon se endureció.

-Es fruto del amor que siento por ti- me corrigió e hizo dar saltitos de alegría a mi corazón.

-Volvamos a casa, NamJoon- asintió rendido y cogió de mis brazos ayudándome a levantarme.

-Jin Hyung, hace mucho que no como comida decente de casera, la echo mucho de menos...- explicó tirándome indirectas desde el sofá.

-Seguro que estas últimas semanas estuviste comiendo cosas precocinadas y comida basura- eso le hizo reír, dándome la razón- Ven para la cocina, caprichoso, te mostraré como se cocina el arte del buen Hyung.

-Sí, omma...- respondió divertido y cogió a Young Mi en brazos y acercarme con él a la cocina.

-No me hagas como Youn...- antes de terminar la frase la pequeñaja me interrumpió.

-Mamá, mamá- abrió sus brazos y la cogí con una mirada de reproche.

-No soy tu madre... En todo caso tu padre- miré a NamJoon de reojo y pude ver su sonrisa de oreja a oreja y sus ojos llorosos.

-PinkPrincess...

-Hablaremos en la cena- hablé con voz autoritaria y él puso su mano en la cabeza como un general.

-Sí, mi capitán- cogió a Young Mi y yo comencé a hacer la cena.

- NamJoon a la cena le quedan...- antes de terminar la frase recibí una nalgada de su parte y un fuerte calor en mis mejillas- ¿de dónde sacaste esa confianza, Kim NamJoon?

-¿Aún con formalidades, Kim SeokJin?

-Sigues igual de irritante, como siempre- gruñí y comencé a emplatar la cena en dos platos rosas que compré al mudarme aquí- Por hoy, nada de cerveza- saqué un Nestea y un Aquarius y los deposité en la mesa.