Capítulo #22. Recuerdos & misterios.

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Gracias a mí, desde ahora Catalinita tendría que ir al hospital cada siete días para que le hicieran transfusiones de sangre provenientes de nuestra madre al ser su vínculo más cercano dada la gravedad de mi hermana, pues ella no quería que otra p...

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Gracias a mí, desde ahora Catalinita tendría que ir al hospital cada siete días para que le hicieran transfusiones de sangre provenientes de nuestra madre al ser su vínculo más cercano dada la gravedad de mi hermana, pues ella no quería que otra persona le diera de su sangre y mamá estuvo de acuerdo cuando se enteró sobre su enfermedad al despertar luego del incendio, además, los médicos lo aprobaron justo para evitar rechazos o infecciones futuras que pusieran su vida en aún más riesgo porque la mutante hemofilia que tenía seguía siendo muy fuerte y bastante delicada para su edad.

—¡Ohhhh! ¿Dónde estoy? —preguntó mi madre una vez que volvió en sí en su helada cama de hospital.

—¡Ohhhh! ¿Dónde estoy? —preguntó mi madre una vez que volvió en sí en su helada cama de hospital

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—¡Ma! —grité aliviada y con lágrimas en los ojos al verla regresar a mí.

—Gloriana, hija, ¿Qué rayos pasó? ¿Por qué estamos aquí? -volvió a cuestionar.

—Eh... —exclamé. —¿No te acuerdas?

—No, no recuerdo nada.

—Tuvimos un incidente en casa.

—¿Ah sí? ¿Y cuál fue? Sabes que soy médico desde hace muchos años y sé sobre estas cosas, Gloriana.

"Trenzando el Destino"© (TED #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora