13° "Olvide que usted y yo...-suspire- nos conocimos. "

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Me levante después de horas de estar acostada triste. Fui hacia el armario y me puse Unos jeans, mis vans negros y una blusa color roja de mangas largas. Me arregle el cabello y me maquille un poco.

Me veía bien, pero en cambio no me sentía bien. Me lave la boca, tome una chaqueta por si hacia frío y salgo de mi cuarto. Salí de la casa.

La verdad que no tenía rumbo por donde ir, solo quería olvidarme de mis problemas y no este triste toda la tarde. Aunque era inevitable no estar mal, si toda la tarde me pasaba por la cabeza lo que Ethan y yo pudimos haber hecho si estuviéramos juntos, Grayson vaya Grayson me traía también muy loca.

Camine hasta un parque frente del colegio donde vamos, y me senté en una banca frente de él. Toda la tarde me la pase ahí, vomitando todo mi alrededor, mirando todo aquello. Las hojas, los árboles, la calle, las bancas, y no podía dejar de pensar en eso, no podía echar de pensar en el.

Me sentía muy mal, muy mal, tenía ganas de ir a contárselo a alguien, cuando un carro se para frente mío. Carro lujoso, bonito, nuevo.

De él se bajó Jacqueline, vino hacia mí en ese momento pensé "No puede estar pasando" ella solo se sentó y me observó.

Jacqueline: ¿HAZ LLORADO? –Dice burlona.

Katherine: ...–No me salían las palabras.

Jacqueline: No me digas que te dolió lo de Ethan, no. Si solo era un juego. Donde tú eras la víctima. –Dijo en mi oído.

Katherine: Jacqueline...–Dije cabizbaja.

Jacqueline: Si, ese es mi nombre. ¿Qué sucede querida? –Sonrío hipócrita.

Katherine: No me molestes. –Dije algo enojada.

Jacqueline: Te voy a molestar lo que se me pegue la gana, Ethan es mío perra. –Dijo entre dientes y corrió hasta su auto. Minutos después baja Ethan y se sienta a un lado mío.

Cerré los ojos, no quería escuchar nada de él.

Ethan me observó de pues a cabeza y suspiro.

Ethan: Kat...–Lo interrumpí.

Katherine: No me llames así. –Dije enojada, pero seguía sin mirarlo a los ojos.

Ethan: Katherine, no quiero hacer esto. –Me toma de la mano. A lo que lo miró mal y quito mi mano.

Katherine: No quiero verlo en mi vida, me ha quebrado por completo y no se da cuenta, no me hable, no me llame, no quiero saber nada de usted, haré como que jamás lo conocí y que jamás pudimos ser algo. Porque todo fue una maldita apuesta, en al cual yo iba de víctima, y que te burlaste de mi. –Dije entre dientes y lo mire a los ojos, estaba muy enojada– Olvide que usted y yo...–suspire– nos conocimos.

La apuesta » Dolan Twins. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora