LISÉRGIDA ➬ KrisTao┃EXO

Capítulo 12 - KRIS

Camino por una carretera solitaria,
la única que alguna vez he conocido,
no sé a dónde va,
pero para mí es mi casa y camino solo.

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Abrí los ojos con pesadez.

Lo peor de cada día era levantarse. Ya había dormido lo suficiente, pero aún así me sentía cansado.

Anoche tuve que tomar un par de pastillas de LSD, para no escuchar los golpes que recibía Baekhyun. Ni los gritos que este daba.

No sé que ha hecho ahora. Pero debe ser lo suficientemente malo, como para que el mismo JongDae lo golpee hasta el cansancio.

Aún creía que se merecía esa golpiza, en venganza por lo que me habían hecho antes a mí  por su causa. Pero a pesar de eso, me dolía escuchar sus gritos de dolor. Causa de las delgadas paredes.

"¡¡Ya... Ya Basta por favor!!" Fue lo último que escuché antes de caer en las alucinaciones.

Esta vez, yo estaba en un lugar, blanco por completo. A excepción del piso. El cual estaba con mosaicos de fotografías. Muchas eran mías. De hecho todas lo eran, a excepción de unas cuantas que eran de otro hombre. Uno de cabellos rubios y mirada inexpresiva.

Recuerdo que me trepé algo que parecía una montaña de muchos peluches de dragones y pandas, peluches los cuales eran duros como una roca, lo suficientemente solidos para que me trepe en la pila acumulada de estos, y así poder apreciar lo que aquellas fotografías formaban. Una fotografía gigante de ese chico. Del dueño de la cámara. De ZiTao.

¿Porque había alucinado eso? Normalmente era algo como, cebras flotando en mi techo, arcoiris de dulces que atravesaban mi dormitorio, yo en la galaxia o quiza uno que otro duendesillo, con un par de copas de vino dulce.

Fue algo extraño.

Me levanté de la cama, sacudiendo la cabeza para asegurarme de que no caería por falta de equilibrio. Al dar fé de mi lucidez, salí de la habitación.

Caminé hasta la cocina por unos emparedados que preparaban las criadas del lugar y regresé por donde había venido. Pero me detuve en el dormitorio de BaekHyun.

Eran las 5 de la mañana. Todos dormían hasta las 6 aproximadamente, así que no se oía nada mas que el viento correr por los pasillos.

—¿Baekhyun? Soy Kris —dije contra la puerta. Rogué que me escuchara, para así no despertar a nadie.

— K...Kris...

Moví la perilla y estaba cerrada con llave.

¡Mierda!

Fui hasta mi habitación de nuevo y busqué alguna llave para forzar el seguro. Pero recordé que una vez JongDae, me había dado la llave de la puerta de Baekhyun. Cuando él se encerraba dispuesto a hacer una huelga de hambre, si no recibía dinero para comprar ropa.

Regresé y con mucha suerte la logré abrir. Aunque me arrepentí de haberlo hecho. No quería ver así a Baekhyun.

—Ta...¿Tan mal me... Veo? —Dijo en un susurro. Yo me acerqué y me senté en la orilla de su cama.

— Estas lindo como siempre. —Mentí. Su rostro estaba hinchado. Con su labio partido y rojizo, su piel fina brillaba por los golpes y moretones en el. En sus brazos había sangre. Al igual que su almohada.

—Te conozco como 5 años... Nunca has sabido mentir bien, Kris. —Dijo bajando a mirada con tristeza.

—Lo lamento. Debí cuidarte mejor...— Acaricié su cabeza. Y junto con mi mano, se deslizo mechones de cabellos suyos. Entendí que también habían atacado su cuero cabelludo, hasta dejar puntos calvos— ¿Que hiciste?...

Baekhyun era un completo imbécil. Pero no era mala persona. Me hacía pensar en un niño que mi madre cuidaba a veces. El era como un hermano para mí. Después de todo. Lo conozco desde que tenia 16 años y yo 18.

—Fui al sótano...

—Te acostaste...

—¡No! —Baek me corto, como yo lo había hecho antes de él— Fui a darle de comer y... Comenzamos a hablar. El me contó que hacía fotografía, que es coreano. Hablamos en nuestro idioma, yo estaba un poco ebrio... —Se detuvo un momento analizando si debía contármelo o no— ... Le pedí que me tomará fotos desnudo. El no se negó. Entonces llegó JongDae y...

— Lo mató.

— ¿Me creerías si te digo que, no lo hizo? —Abrí los ojos como un búho. Mirándolo con completa incredulidad. JongDae ya lo habría asesinado. El coreano castaño, ya estaría metros bajo tierra o quizá bajo el agua. No entendía el interés que Kim tenía en el castaño.

—No puede ser... ¿Porque?

—Debe servirle de algo. Pero no lo entiendo porque ChanYeol, parece inofensivo.

Mire a Baekhyun extrañado. Que lo haya nombrado con su nombre de pila, solo significaba que ya le había tomado confianza.

—Mira... Baek no quiero que te maten, así que no te metas con ese chico ¿Entendiste?

—¿Te preocupas por mi? —El labio partido del pequeño, elaboró una sonrisa ladina— ¿Porque aparentar ser tan rudo? En el fondo solo eres miel dulce.

—Sí, y tu eres una flor delicada Baekhyun... —rode los ojos, levantando mi trasero del colchón. Los emparedados que había dejado en el piso de la entrada, se los alcance para que comiera algo.

—Gracias Kris.—el sonrió. Pero me pareció que esta vez lo había hecho con cariño y sinceridad. Después de todo solo Lay y yo le hablábamos. No podía culparlo si quería conocer mas personas— Eres una buena persona.

— No se lo digas a nadie... —Dije cerrando la puerta con llave. Tal como la había encontrado.

Salí directo a la sala donde ya estaban Suho y Lay.  Ellos me vieron con sorpresa. Era muy temprano como para que yo me levante. Pero como mencione antes, o era escuchar los gritos de dolor de Baekhyun, o  dormirme a las ocho de la noche. Con ayuda de pastillas, claro.

—¿A donde van?

— A cobrar una suma al casino Feng. ¿Vienes? —Dijo el coreano de la pareja. Suho tenía una sonrisa la cual aveces me daba escalofríos.

—Yo tengo otro trabajo para YiFan... —Voltee al notar que JongDae... Esperen... Un momento, ¿Me llamo YiFan?

—Buenos ...

— ¿Porque no vigilaste a Baekhyun? —Noté que la pareja se había ido, por el sonido de la puerta cerrarse.

—Lo hice... Pero....

— Ahorratelo —Dijo un poco fuerte— Necesito que vayas a casa de los Xiao. Y me traigas a Huang ZiTao... —Sacó de su bolsillo una cámara fotográfica. La misma que yo le había quitado al chico. ¿La saco de mi mesa de noche? El corazón comenzó a latirme y el sudor frío recorrió mis cienes— Es del bastardo en el sótano. Muestrale las ultimas cuatro fotografías. Y traelo de inmediato.

— S... Sí.

—Y que los Xiao no te vean. Busca la forma de sacarlo. Vivo o muerto. —Dijo sin ninguna pizca de duda en su tono de voz. De hecho era mas odio que otra cosa— Si te ven... Es problema tuyo ... YiFan.

Me limité a asentir con la cabeza. ¿Que quería con aquel chico? ¿Vivo o muerto? De todas formas lo mataría. Y... ¿Que diablos hacia en la casa de los Xiao?

Las preguntas daban vueltas en mi mente, mientras JongDae se alejaba.

Debía llevar a ZiTao. Lo tomaría como una oportunidad para devolverle su cámara.

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Baekhyun herido. ¡Sorry!
Ahora sí comienza nuestro KrisTao.

Al final agradeceré a las personas que le dan apoyo constante a la historia. Ya tengo a dos bien anotadas para esa parte ¡yei!

Espero aún sus pedidos y sugerencias.
¡Voten y  gracias por leer!