Capítulo narrado 1.

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Helen comenzaba a preocuparse.

De hecho, hacía tiempo había comenzado a hacerlo.

Y el que le escribiese sobre su tono de llamada de la canción de Floricienta solo hizo todo aún más extaño.

Tanto que tuvo que comentárselo a un gran amigo de la infancia que iba en otro grado y con el que no se hablaba mucho.

Eso al parecer solo había hecho enfurecer a la extraña anónima de las cartas "espeluznantes" -como las había descrito su amigo-.

Helen se preguntaba: ¿Hasta qué punto sería capaz de llegar su... acosadora? Como la había llamado su amigo.

Pero lo más importante era: ¿Ella la consideraba como tal?

La respuesta era sencilla.

Déjame amarte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora