IV. GRADUACIÓN

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Dí media vuelta y me diriji bastante desilucionada a mi aseinto, tenía un nudo en la garganta que no me permitía hablar, Larissa se giro y miro fijamente a mi rostro...

Estas bien? - dijo Larissa, movi la cabeza hacia ambos lados, pero no articule ni una sola palabra, tome todo el aire que pude y exale, necesitaba tranquilizarme y lo logre no del todo, pero debo tener una noche placentera ya que este día partía a lo que sería nuestro futuro, y decia nuestro futuro, por que si para contarle a mi hija la verdad tenía que contar con los medios suficientes para poder tenerla a mi lado, ya que eso implicaba que mi padre no desheredaría, aunque para mi era lo menos importante y esperaba que en su tiempo para mi hija tambien...

El anfittrion interrumpio mis pensamiento al dar inicio el evento, me tranquilice y estuve atenta a todo lo que estaba sucediendo en el estrado, hicieron la entrega de papeles y respectivamente mis diplomas, las palabras de agradeciemiento a mis padres por su apoyo incondicionesl, me sentía un poco hipócrita pero tenía que seguir el protocolo al pie de la letra...

La velada paso sin más aconteciemientos importantes, en una semana estaria fuera de ese internado, mis padres no sabía cuanto tiempo más permanecerían en suiza... creo que es lo menos importante ya que en estos tres años me han evitado lo más posible, así que mucho debía pensar que me dejarían ver a mi hija.

Así transcurrió la semana, ellos no estuvieron para nada conmigo, ni siquiera sabía si habían vuelto o no a México... Me hicieron la entrega correspondiente de mis papeles, firme todo lo concerniente a la beca, ya no necesitaba la autorización por que ya era mayor de edad, tendría un mes libre antes de entrar a la Universidad, tendría que hablar con mis padres si podría pasar ese mes con ellos...

Mis padres llegaron por mí... que raro, ni siquiera los esperaba, subí al automóvil que traían, sólo llevaba una maleta ya que en el internado siempre debía utilizar uniforme, llegamos al hotel...

Mañana regresamos a México, pasaras estos días en casa, pero no lo olvides debes cumplir tú promesa - dijo Mamá un poco nerviosa

No te equivoques, si hablas perderás absolutamente todo - dijo mi Padre en plan de amenaza...

No se preocupen, se cual es mi papel en esta familia no haré nada de lo cual me arrepienta - dije muy segura, claro que por dentro estaba feliz, era lo que más quería tenía que ganarme el cariño de mi hija a como diera lugar ya que de ese amor dependía nuestro futuro...

Llegamos a México, el chófer de mi padre ya nos esperaba con su auto en la entrada del Aeropuerto, salude a Gregorio al cual también quería mucho ya que el era el marido de mi nana y por lo tanto para mi era como de la familia...

Hola Gregorio - y me le fui de golpe a darle un fuerte abrazo, el no pudo resistir y me recibió en sus brazos - Hola niña, que bonita esta usted - dijo el chófer al momento que me guiño un ojo, lo cual me causo mucha gracia...

Como te gusta mezclarte con los sirvientes, ni aun en el mejor internado se te quita - dijo mi padre molesto, el nunca entendió por que tenía tantas atenciones con los sirvientes y los trataba por igual, el no entendía que ellos eran mi familia cuando ellos no estaban, con ellos pase navidades, vacaciones y algunos cumpleaños debido a tanto viaje, pero eso ya no importaba yo estaba feliz y no dejaría que nada lo empañara.

Ya estabamos muy cerca de la mansión así que empece a sentir un retorcijon en mi estomago, las manos empezaron a sudar, yo sentía que el corazón se me saldría del pecho... Subí las escaleras muy nerviosa me gire un segundo para ver el rostro de mis padres y habían cambiado de manera grástica estaban sonriendo y tomados de la mano, no entendía nada, así que abrí la puerta lo más despacio que pude...

¡Bienvenida! - se escucho el grito de una niña, era mi Danna que corrío a recibirme muy feliz, me abrazo con todas sus fuerzas y yo la tome no podía hablar solo la abrazaba llorando...

¡Hola! , bienvenida....- me incorpore lentamente con mi hija en mis brazos, ni siquiera note que había mucha gente en el salón todos amigos de mis padres, mi madre se acerco a llevarse a Danna, yo no quería soltarla...

Tienes que atender a los invitados- afirmo mi Madre, sin más empece a saludar a todos que repetían siempre lo mismo, así trascurrió la tarde hasta llegar a la noche, mis padres llenándose la boca de como había obtenido la beca, mis calificaciones, que era su orgullo, yo no podía creer hasta donde habían llegado por sus apariencias.

Por fin pude salir de ese tumulto, me dirijo a la planta de arriba quería ver a mi hija y a mi Nana que no la había visto desde que llegue, subí despacio y pude escucharla cantando, eso quería decir que estaba durmiendo a mi hija, entre a la habitación era muy bonita de verdad mis padres se habían esmerado, la tenían como una princesa, me senté en el borde de la cama observando el ritual del sueño de mi nana...

Hola mi niña - dijo mi nana en un susurro acompañado de una sonrisa... le devolví la sonrisa y espere a que tendiera a mi hija en su camita, estaba hermosa aun con los ojos cerrados... cuando por fin se incorporo me tendió los brazos, sin pensarlo me abalance de inmediato quería sentir su calor, estuvimos un largo rato abrazadas, no hacían falta las palabras... se incorporo me todo de la mano invitándome a salir de la habitación...

Tienes que descansar - dijo mi nana de una forma muy dulce que me convenció de inmediato...

Si Nana, ya mañana hablaremos - me guió a mi cuarto, me ayudo con mis cosas, me puse una pijama me arropo como cuando era pequeña me dio un beso en la frente - Descansa mi niña - apago la luz, salió al momento que cerraba la puerta, esta muy cansada así que no me costo nada dormirme.

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Esta un poco raro, espero que les guste, besos y votitos por favor...

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