Fusión increíble (haruka nanase y tú )

Cap. 45 Regalo de amor

Habían pasado dos días después del día de san Valentín y estaba muy emocionada, como era una fecha muy especial todos los de el conservatorio tendríamos una semana para ir a donde quisiéramos y estar con las personas más importantes para nosotros, en mi caso y en el de Hoshi íbamos a ir de vuelta a Japón para ver a nuestros queridos novios, ya estábamos por llegar al aeropuerto de Tokio donde no sabíamos si íbamos a ser recibidas o no, estaba pensando en que cuando volviera a ver a Haru le tocaría una nueva canción que e estado practicando, cuando el avión ya había aterrizado las dos nos miramos un poco nerviosa de que ha pasado casi un año sin verlos, y no sabíamos si estarían felices de vernos o si querían vernos de nuevo. Bajamos de aquel avión y fuimos a la entrada de el aeropuerto para ver si había o no había alguien, pero antes de eso fuimos a la fuente de sodas para tomar algo, ya que como el viaje fue medio cansado y largo nos había dado sed.

Hoshi- ¿tú que quieres?- me pregunto observando las bebidas de la nevera

- un jugo de manzana está bien

Hoshi- ok yo voy escoger uno de naranja- nos dieron nuestra bebidas y pagamos, luego nos sentamos en una banca para descansar un poco- el viaje fue muy largo no crees?

- si que lo fue- iba a darle un sorbo a mi jugo pero alguien me había tapado los ojos- oye qué pasó?-

No escuche nada, ya que Hoshi hacía ruidos como si no pudiera hablar, me empecé a preocupar y trate de levantarme pero alguien había puesto todo su peso encima de mí y me tomo del torso con mis manos juntas para no escapar, la persona que me tenía atrapada se acercó a mi nuca para plantar un beso en ella y después de eso plantó otro en mi cuello para después poner su cabeza sobre uno de mis hombros. "Adivina quien soy" me dijo aquella persona al oído, en ese momento supe quien era así que moví mi cabeza para poder besar su mejilla.

- hola Haru- al destaparme los ojos me dio un dulce beso, que para ser sincera había extrañado sus labios

Haru- bienvenida a casa amor- me aferré a su brazo para abrazarlo, pues lo había extrañado mucho, aunque también me di cuenta de porque Hoshi no podía a hablar, Mako le había tapado la boca.

Hoshi- no hagas eso de nuevo, casi me matas de un infa- no pudo terminar porque su novio la había callado con un beso, dejándola toda sonrojada

Makoto- te ves tan linda sonrojada Hoshi- Chan

Hoshi- no es verdad- se sonrojó más de lo q estaba

- bueno, ¿ya nos vamos?- Haru me asintió y me ayudó con mi maleta para así irnos los cuatro juntos, pero tuvimos que tomar caminos distintos porque Mako quería mostrarle a Hoshi su universidad y dijo que nos veríamos después, así que fui con Haru a conocer Tokio, una ciudad que jamás e conocido pero si e escuchado- a dónde vamos?- lo mire un poco confundida

Haru- te mostraré un poco este lugar

Fuimos a la estación de la línea de tren, cuando subimos me asomé por la ventana y podía ver edificios enormes, varios colores, dibujos de anime y carteles muy llamativos, para ser una ciudad tan viva y con tanta energía Haru es lo único tranquilo y callado de aquí, fuimos a un parque llamado shinjuku gyoen que era uno de los parques y jardines más bellos de todo Tokio, me asombre al ver árboles de distintos colores, en el agua se veían como un tapete de flores que quería caminar encima de el, mientras caminábamos por esos árboles de flores el viento sopló con un poco de fuerza que desprendió unas flores, cayeron al piso y a la laguna lentamente formando un paisaje muy hermoso en aquel parque, una flor de cerezo caía al lado de Haru hasta que el la tomo con delicadeza para luego acomodar unos mechones detrás de mi oreja y ponerme la flor en mi cabello, esa me parecía una escena de película que toda chica quisiera vivir, mire a Haru a los ojos y pude leer lo que me quería decir, lo que él sentía por mí y como lo decía. Lo abracé lentamente y el correspondió al instante, mientras lo abrazaba podía oír el latido de su corazón, que de todos los ritmos que e escuchado en mi vida ese era el mejor, con una de mis manos toque su mejilla, haciendo que pusiera su mano encima de la mía y la acariciara suavemente, se acercó hasta mis labios y depósito un dulce beso en ellos, pero como era muy desesperada que lo bese tomándolo por sorpresa pero él accedió a ese beso y me apego más a el, aunque haya pasado solo un año en Francia no podía dejar de pensar en el, porque el amor que sentía por él jamás desaparecido y nunca desaparecerá.