Seducción Homicida **Jinkook**

Hoseok

Ya habían transcurrido dos horas desde que Hoseok hubiera contado su historia a Jungkook, y éste había pasado una de ésas horas llorando casi sin parar. Hobi había salido para ir a comprar algo de comer, dejando a Jungkook desahogarse solo. Ahora, había vuelto con comida china y ambos hombres se habían sentado a comer en la cama.

Para Jungkook ahora resultaba completamente normal el sentimiento de familiaridad y confort que estar cerca de Hobi le provocaba, y el nombrado sonreía constantemente, sintiéndose feliz por haber recuperado a su mejor amigo.

El ambiente se había relajado en sumo grado, por lo que ninguno de los dos tuvo problema en entablar una conversación seria, una vez que Jungkook hubiera esclarecido sus ideas y se hiciera muchas preguntas inconclusas.

-Hobi... -musitó de forma lenta, como si estuviera recordando aquél terrible detalle apenas unos segundos antes de mencionarlo-. ¿Dónde está Taehyung...?

Sus ojos se clavaron instantáneamente en el hombre, deseando no encontrar una mirada de furia o terrible tristeza; lo que halló, sin embargo, fue un rostro ensombrecido y surcado por el dolor.

Jungkook temió lo peor.

-Está vivo –le tranquilizó con voz seca, revolviendo un poco de su comida con el tenedor con aire desolado; Jungkook se llevó una mano al pecho y suspiró aliviado-. Al menos eso es lo que Monster me dijo.

El temor de Jungkook regresó. Si Monster solo 'le había dicho' aquello, era posible que estuviera mintiendo o que ya no fuera cierto. No sabiendo qué decir o hacer para que Hobi no se angustiara al respecto, a pesar de que él mismo se sintió muy angustiado, se sentó un poco más cerca de él.

- ¿Qué le ha ocurrido? ¿Qué pasó esa noche en el callejón? –cuestionó un poco alterado, sintiendo su corazón oprimido por el temor.

Hoseok continuó comiendo, como si prefiriera hablar de aquél tema con el estómago lleno. Jungkook trató de imitarle, pero al poco tiempo acabó dejando la comida, sintiéndose incapaz de comer un bocado más sin vomitar a causa de todos los nervios que sentía. Así que se quedó con las piernas cruzadas sobre la cama, mirando a su compañero y esperando que éste le contara al respecto.

Cuando finalmente terminara de comer, dejó los cubiertos y los platos desechables a un lado de la cama y se recostó en ésta con las manos cruzadas sobre su vientre, mirando el techo con ojos fijos y brillantes. Jungkook vaciló, pero lentamente se recostó a su lado, sin perder de vista su rostro.

-Todo fue mi culpa –dijo Hobi con evidente angustia distorsionando su habla en forma de un nudo en su garganta-. Monster me envió a que terminara el trabajo de The Kid y sus hombres una vez que supo que habían fallado y que seguías con vida. Yo estaba furioso, porque es obvio que aprovechó para intentarlo cuando salí de la ciudad para que no pudiera hacer nada por ti –giró ligeramente su cabeza sobre la almohada, mirando a Jungkook; su mano se posó en su mejilla-. Pero decidí pretender que le era fiel, y acepté su misión. Sin duda estaba esperando que me negara, para así tener un pretexto para matarme a mí también...

-Ése hijo de...

Jungkook guardó sus palabras, apretando los dientes y tomando el dorso de la mano de Hobi para apretarla con fuerza. Éste trató de tranquilizarle, dándole una pequeña caricia en la mejilla con su pulgar.

-Te hice la promesa de que seguiría con él –retomó con más calma, para evitar que Jungkook se tensara de más-. Así que acepté la misión con la intención de continuar en su nómina y poder acercarme a ti de alguna manera –entonces un brillo de tremendo arrepentimiento se reflejó en sus ojos-. Me sorprendí al darme cuenta de que... SeokJin era quien te había rescatado –al escuchar aquél nombre, Jungkook no pudo evitar bajar su mirada hasta el mentón de Hoseok con rapidez-. Pero me sorprendió más el que Taehyung fuera su vecino.