Capitulo 5:

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Cuando despertó aquella mañana el clima afuera no era muy bueno, pero a él no le importaba, estaba feliz. Aún creía que todo lo que había pasado el día anterior era una terrible broma de su subconsciente enamorado, pero había sido real para su buena suerte.

Después de tomar una ducha rápida debido a que su cuerpo no soportaba el agua que estaba en exceso fría, se abrigó bien para salir a la calle donde el viento era demasiado fuerte. El cielo nublado anunciaba que podría llover o simplemente habría demasiado frío durante todo el día.

Se encontraba a una considerable distancia entre su casa y la escuela cuando empezó a sentir que sus manos se entumían congeladas, se miró extrañado para después darse cuenta de que había dejado los guantes en casa. Miró el reloj y se pateó mentalmente puesto que su tiempo estaba realmente contado y si regresaba a casa se le haría tarde para la escuela. Soltó un suspiro resignado y siguió caminando mientras se frotaba las manos en un esfuerzo inútil por mantenerlas alejadas del frío.

Aparte del frío aterrador que sentía, su mente no se quedaba tranquila, no dejaba de preguntarse a si mismo como era que debía actuar con Harry después de haberse casi besado. Qué ironía que después de haber ido por un helado, al día siguiente hubiera un frío tan terrible de la nada.

- Creo que debiste de usar guantes – la voz ronca de Harry sonó a un lado de él.

Louis se sobresaltó y miró sorprendido al rizado que había aparecido de la nada vistiendo con una gabardina negra a juego con los guantes y la bufanda que llevaba puestos.

- Fui a buscarte a tu casa – dijo sin mirarlo a lo que el de ojos azules se sorprendió aún más – tu madre me dijo que ya habías salido.

- No sabía que irías – se defendió temblando por el frío.

Louis iba a seguir caminando pero se detuvo al sentir como el rizado sostenía su brazo. Lo miró atentamente mientras Harry se quitaba el guante de la mano izquierda para después extendérselo.

- Póntelo – dijo en un tono de orden a lo que Louis obedeció.

El de ojos verdes, con la mano que no tenía guante, tomo la mano igual desnuda de Louis entrelazándolas para después meterlas en el bolsillo de su gabardina haciendo así que tampoco esas manos antes descubiertas sintieran frío.

- Gra- gracias – dijo Louis nervioso ante ese gesto tan tierno que el rizado había tenido hacia él.

Caminaron así por las calles que faltaban para llegar a la escuela y cuando estuvieron frente a esta se soltaron para separarse. Louis tuvo la intención de quitarse el guante que Harry le había proporcionado pero este lo detuvo.

- Quédatelo para que no sientas tanto frío – dijo el rizado tranquilamente – me lo regresas cuando te lleve a casa.

Harry empezó a caminar para alejarse mientras el corazón de Louis latía a gran velocidad por aquello.

- ¡Harry! – gritó Louis haciendo que el rizado volteara a verlo al instante - ¿Qué somos? – soltó esa pregunta que había estado dando vueltas en su cabeza desde el día anterior.

Harry le regaló una de esas enormes sonrisas que marcaban marcaban sus encantadores hoyuelos y siguió caminando sin responder a si pregunta. Louis sonrió tontamente ante toda respuesta y decidió que lo mejor sería que hablaran en otra ocasión, emprendiendo así el camino hacia su salón de clases. Caminó detenidamente hacia su lugar común y se dio cuenta de que sus amigos ya se encontraban ahí, algo no muy normal, principalmente por parte de Zayn.

- Hola – les saludo con una sonrisa mientras se sentaba en su respectivo lugar a lado del de cabello negro.

- Cuéntanos cada detalle – dijo Zayn más despierto que nunca con una sonrisa picara dibujada en su rostro.

A primera vista - Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora