Severus Snape y la magia astral (Lecciones de vida 1)

Quince años después...

Ya han pasado 15 años y Hogwarts sigue creciendo en alumnado....contra todo pronóstico el joven Potter pasó todas sus materias...inclusive la mía (a pesar de mi desconcierto), ya que a pesar de haber revelado mi historia con mis memorias, eso no lo excluyó que le siguiera dando el mismo trato de siempre...aunque debo admitir que lo humillé menos y al menos ya no recibía tanto odio de su parte, ahora son sus hijos con los que tengo que lidiar, sobre todo ese insoportable James Sirius Potter ¡Tan igualito a James en su manera de burlarse y a Sirius en su manera de insultar! Al menos su hijo Albus Severus logra poner atención a mis clases y es más modesto en su forma de ser y hablar...tiene futuro...lo sé. Aún recuerdo mi sorpresa cuando vi esos ojos esmeralda en el Gran Comedor viendo todo con miedo y asombro, se colocó el Gran Sombrero y este lo colocó en Slytherin contra todo pronóstico...Pero ha demostrado ser un alumno dotado y capaz como yo lo era a su edad...además es uno de los pocos que me trata con sabiduría y respeto...y por mi parte siempre que veo sus ojos...veo a Lilly Potter otra vez.

En estos quince años no hay un solo día que no piense aún en ella...su cabello pelirrojo ondeando al viento del atardecer...esa piel blanca de luna..esos ojos esmeralda que podía ver belleza en todas partes e inclusive en la persona que no se sentía digna de amor...como yo. Tristemente tampoco he podido dejar de pensar en ella en ese suelo duro, muerta, con la expresión de la muerte en su rostro, aún puedo sentir como la abracé aquella noche y el sabor de las lágrimas corriendo por mis mejillas mientras le decía: ¡Lo siento....Perdóname....lo siento tanto...Siempre te he amado y nunca dejaré de amarte!

Traté de cumplir con lo que Eileen me había dicho de perdonar y dejar ir, pero sencillamente no había progresado mucho, aún sentía tanto dolor y resentimiento por mi pasado, pero me parecía imposible que se marchara. Para tratar de aminorarlo, me concentré todos estos años en dar bien mis clases y vigilar cada poción que se realizaba, Slughorn ha obtenido frutos pero yo no he dejado de recriminarle a Albus Dumbledore que los "consciente demasiado", pero me dice que virtud, amor, ciencia y prudencia hacen al maestro y a mi me falta la prudencia...¡Exagera! Aunque debo admitir que el tener una "ayuda" me ha beneficiado al poder dar paseos cerca del lago o el Bosque Prohibido que me permiten aclarar mi mente o ir a la biblioteca a mejorar cada vez más mi conocimiento en Pociones y Hechizos...aunque a veces odio tener a Albus como ladilla detrás de mí cada vez que abro un libro de la Sección Prohibida, tal vez teme que las Artes Oscuras me seduzcan otra vez, ¡Pero yo ya no estoy para eso...después de Lilly y el chico Potter!

Todo estaría bien de no ser por un detalle que aún me inquieta....

No he recibido ninguna otra carta ni otro sueño....