-Alonso, ¿Jos sigue siendo bienvenido aquí?
-Claro que si. Yo ayude a comprar esta maldita casa, por lo tanto es mi derecho el poder venir aquí.
Sentí pequeñas pataditas y el dolor se volvió mas intenso. Ya era hora.
-Freddy.
Susurre y me voltee a verlo.
Ambos me miraron, Jos abrió mas sus ojos al verme con mi vientre muy grande y mi mano sobre el.
-Es hora.
Freddy abrió los ojos al tope y corrió a ayudarme, tomando la pañelera y me ayudo a caminar.
-BRYAN, PREPARA EL AUTO. YA VAN A NACER.
Me debilitaba poco a poco. Bryan subió en mi ayuda.
-Vamos al hospital.