Capítulo Veintiséis

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-          Para Eiden...- Dije excitada al ver que me acariciaba los pechos.

-          Shhstt... solo disfruta nena. -Dijo a la vez que me empezaba a torturar y mordisquear un pezón con su boca.

Yo solo gemía me arqueaba de placer cada vez que chupaba con fuerza mis pechos, en su mano izquierda tiene agarrado i pecho mientras que con la otra iba acariciándome el trasero.

Después hizo que enrollara mis piernas alrededor de su cintura mientras me sacaba de la bañera, me sentó encima del lavamanos, fue dejando besos húmedos en mi cuello, en el vientre hasta llegar a mis piernas, me las abrió un poco y metió su cara entre mis piernas, acción que hizo que cerrara mis piernas involuntariamente. Quizás porque nunca me han hecho un "cunnilingus".

-          Abre las piernas bebé, te prometo que te hare sentir en el cielo. - Dijo mientras me miraba con deseo y lujuria.

Sentía su respiración en mi clítoris, cosa que hizo que me excitara aun más.

Sin esperar más empezó a lamer mi clítoris de arriba  abajo, mientras clavaba su mano en mi trasero para tener más accesibilidad.

Le agarré del pelo fuertemente para tenerlo lo más cerca posible. Me sentía en las nubes, no podía parar de gemir y eso al parecer le excitaba ya que soltaba gruñidos y lamía de manera ruda y salvaje. Notaba como mis entrañas se contraían de placer y supe que estaba a punto de llegar al orgasmo, él lo notó y substituyó su lengua por dos dedos que metió de golpe haciéndome soltar un grito de sorpresa.

Para callar mis gemidos, estampó su boca con fiereza y pude notar el sabor salado de mi propio cuerpo. Me penetraba con sus dedos salvajemente, mientras exploraba toda mi cavidad bucal, me sentía a punto de explotar y eso hizo que acelerara los movimientos de sus dedos y añadió otro más.

Empujó unas cuantas veces más sus dedos y me corrí en su mano con un largo gemido que no pude evitar. Sentía mis piernas temblar y estaba cansada, como si hubiera corrido una maratón entera.

-          Que te ha parecido mi nena? - Me preguntó Eid a la vez que metió sus dedos en la boca, chupándolos. Acción que me hizo sonrojar.

-          Mmuy b-ieen ggr-aci-ass. -Dije tartamudeando y nerviosa, nunca me he sentido de esta manera y le agradezco muchísimo lo que me ha hecho sentir solo con su boca y mano.

-          No agradezca belleza, ahora vamos a limpiarte que debemos salir antes que aporreen la puerta. - Dijo divertido a la vez que me alzaba en brazos y nos metió en la ducha.

15 minutos después estábamos ya secándonos y dándonos uno que otro piquito inocente. Me ha tratado como una princesa, me ha enjabonado el cabello, el cuerpo y mimado, más no puedo pedir.

-          Vaya, dicen que las mujeres son las que más tardan en el baño, pero naciste tu Eid e hicieron una excepción contigo. - Niega divertido Chris mientras se burla de Eiden, al parecer no me ha visto porque estoy detrás de Eid.

-          Callate maricón, ha valido la pena 45 minutos de baño. - Sonríe travieso Eid mientras me guiña un ojo, mi cara debe de tener el mismo color que un volcán en erupción. Chris y Steph rompen a carcajadas aunque un poco sorprendidos al verme también recién duchada.

-          Chicos teníais que ser...-Murmuro mientras me dirijo a la cocina, donde se escucha la vocecita de la pequeña Emma y su madre. Al entrar a la cocina Emma viene a darme un abrazo mientras que su madre nos observa con ternura.

-          Que es lo que prepara las más guapa del mundo? -Digo mientras le reparto besitos por toda su redondita cara mientras ella sonríe.

-          Mami dice que en espaya se llama "Arroz con leche". Está muy rico, siempre lo hace cuando viene el tete porque le gusta mucho. -Me explica la pequeña entusiasmada.

-          Es en España cariño, no espaya. -Le corrige su madre mientras le da un besito en la punta de su nariz.

-          Oh, nunca he probado ningún plato de España, pero tiene buena pinta, necesitas ayuda? - Digo amable. Ella niega con la cabeza con una sonrisa.

-          Gracias cariño, pero ya está hecho, solo estoy esperando que se enfríe un poquito. - Dice con una sonrisa, que hace que me dan ganas de espachurrarla.

Justo en ese momento se escuchan las carcajadas de los chicos y me pica la curiosidad de saber a qué viene tanto jaleo, agarro a Emma de la manita y nos vamos al salón donde vemos a los chicos jugando a la Play. Están tan concentrados que ni se percatan de nuestra presencia, y se me ocurre una idea traviesa, por lo que sin hacer ruido me tiro encima de ellos causando la risita de Emma y los gritos de los chicos.

-          Iba ganando, eres una maldita! -Grita Chris mientras hace un puchero.

-          Creo que se me ha caído una vaca encima. - Se queja de dolor Steph

-          Ay dios, creo que no podré tener hijos nunca. - Gime de dolor Eid.

Si señores, mi culo ha aterrizado encima del miembro de Eid, mientras que mi cara está en la rodilla de Steph.

-          Sois unos quejicas, tampoco es para tanto.

-          ¿QUE NO ES PARA TANTO? PERO TU CUANTO PESAS CHICA! - Me grita Steph, mientras intenta liberarse de mí, yo me estoy riendo como una idiota y escucho un clic, todos giramos nuestras cabezas en dirección al ruido y vemos a la madre de Eid haciendo fotos mientras se ríe a carcajadas con su hija alado.

-          No lo he podido evitar. - Se sonroja su madre y acto seguido entra a la cocina.

-          Comidaaa!! Ñumyy! -Grita de felicidad la pequeña, haciendo que todos se levanten de golpe y se sienten en las mesas, y a mí me dejan tirada en el suelo.

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Hola mis bellos! Omy ha vuelto con muchas energías y ganas de seguir la historia! Espero que no os hayáis olvidado de mi, porque yo de mis niños no. Espero que este capítulo os guste muchísimo, es la primera vez que hago algo así...

Os quiere, Omy

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