Everythings Gonna Be Alright

Capítulo 11.- Nunca te dejaria.

Estaba cogiendo el móvil para ver que hora era cuando sonó el timbre sobresaltandome.

Tras agarrarlo bajé las escaleras corriendo para no hacerle esperar, llegué al recibidor y me recoloqué delante de un espejo que había en la entrada. Aunque ya había estado varias veces con Justin no podía impedir que algunas mariposas rebolotearan en mi estomago.

Dando un profundo suspiro, que ni yo misma sabía que tenía guardado, abrí la puerta y al hacerlo me encontré con el.

Con su sonrisa.

"Buenos dias guapa" dijo Justin antes de acercarse y darme un beso en una de mis mejillas.

"Ey Justin, que tal?"dije al devolver su beso encantada.

"Ahora perfecto" Justin hoy estaba guapísimo.  Llevaba unos vaqueros oscuros muy bajos, una camiseta blanca y una camisa de cuadros roja y negra abierta encima de la otra.

Sin saber que decir note como el calor subía por mis mejillas y me limité a sonreír tímidamente "entro a por las llaves y nos vamos"

"Esta bien" dijo haciendo con el brazo un gesto hacía dentro de mi casa para que hiciera lo que acababa de decir.

En cuestión de segundos ya estaba lista cerrando la puerta. 

"¿Has desayunado? " dijo Justin a la vez que ambos estabamos andando a su coche.

"Nop" respondí haciendo fuerza en pronunciar la p.

"¿Y tienes hambre?"

"Pues ahora que lo dices... si, mucha" no me había dado cuenta de la verdadera hambre que tenía.

"Ya somos dos, vamos, montate y vamos a tomar algo" dijo refiriendose al coche.

El abrió su puerta y a continuación hize lo mismo. Cuando los dos estabamos listos y nos habíamos puesto el cinturón de seguridad Justin metió la llave en la ranura y al girarla despertó al frio motor.

Ya estaba el coche andando y no surgía ningún tema de conversación,  así que la cosa empezaba a ser un poco incomoda.

"Que callada vas" Justin al fin habló tras unos minutos de completo silencio por las dos partes.

"Nose" yo estaba mirando el paisaje que corría al lado mía.

"Ey, __ te pasa algo?" El tono de voz de Justin era de preocupación tan solo quitó la mirada de la carretera un par de segundos para mirarme.

"No, estoy bien" y una pequeña sonrisa salió de mi por lo lindo que me había parecido que el me preguntara.

Nos quedamos callados unos minutos.

"Tengo una sorpresa para ti" dijo sonriendo.

"Enserio? cual?!"  dije emocionada y casi gritando, las sorpresas me mataban de ilusión.

"Tendrás que esperar un poco" hablo entre risas.

"No puedo aguantar,  dame pistas" estaba impaciente.

Justin paro el coche en un lado de la carretera.

"Si tienes hambre te gustará" me guiño un ojo. "Y ponte esto en los ojos"

Justin me enseñó un pañuelo como de seda o algo parecido morado.

"Esta bien, pero intenta no tardar en llegar, la intriga me mata" dije riendome.

"Lo intentare princesa, ahora girate que te ayudo a ponértelo"

Yo le hice caso. Y cuando me terminó de hacer atrás el lazo no podía ver absolutamente nada.

"¿Ves algo?" Era la voz de Justin.

"No nada" dije tras ponerme otra vez bien sobre el respaldo del coche.

"Segura?" habló sin terminarselo de creer.

"No te fias de mi o que?"

"No me confío ni en mi sombra"

"Valla que malote" dije con ironía arrepintiendome a continuación de lo que había dicho. Aunque ya tubiera mas confianza con Justin,  no dejaba de ser Justin Bieber y yo no dejaba de estar en su coche con los ojos tapados.

Tras unos segundos de silencio escuché su risa, quedandome aliviada por si iba a tomar represalias.

"Bien, cuantos dedos tengo?" suponiendo que había puesto su mano delante mia, dije lo primero que se me vino a la cabeza.

"Cinco?" pregunte.

Y los dos nos empezamos a reir, por que habría dicho un disparate.

Sentí como el coche empezó a andar y ninguno de los dos volvimos a hablar hasta que Justin volvió a parar el coche de nuevo unos minutos depués.

"Ya hemos llegado" lo escuche decir "Espera que te ayude, pero no te quites la venda"

Lo escuche bajar del coche, cerrar la puerta y a los pocos segundos note como abrian la puerta de mi lado y me agarraban por el brazo ayudandome a bajar del coche ( por el tacto y el olor supe que era Justin).

"Donde estamos?" dije sin tener ni idea.

"Pronto lo verás" Respondió y cerró el coche.

Los dos empezamos a andar mientras el me agarraba, una mano rodeaba mi cintura y la otra me cogía del brazo para que no me cayera.

Al cabo de unos cinco minutos andando Justin me soltó y me dejo sola por un segundo.

"Justin, donde vas?" dije preocupada "no me dejes sola"

"No te preocupes, nunca te dejaría sola"

"Eso espero" suspiré.

"Bueno pss creo que esto ya esta" escuché la voz satisfecha de Justin.

"¿Puedo quitarme la venda ya?" dije dudosa.

"mmmm... espera espera... ahora si" hablo "Puedes quitartela".

Yo tras obedecerle pude contemplar un prado lleno de flores, al que Justin ya me trajo antes para ayudarme, y en medio de este un picnic, teniendo de fondo las vistas de toda la ciudad.

"Guau Justin" me dejo boquiabierta con el detalle de prepararme todo esto.

"Te gusta el plan que tengo para hoy?" dijo mirandome de forma inocente.

"Me encanta, no deberías de haberte molestado de verdad...."

"No es molestia" dijo guiñandome un ojo "y nose tu pero yo tengo hambre y mucha comida, me acompañas?" se refería a que si quería desayunar con el.

"Y quien no lo haría" dije encogiendome de hombros y dandole la mano para acercarnos al mantel.

Hoy pensaba pasar todo el día con Justin, como si no existiera el tiempo.