Capítulo 10

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De haber dependido únicamente de mí, me habría marchado incluso desde esa misma noche. Pero, siendo realistas, tanto Eva como yo requeríamos un tiempo para poner en orden nuestra mente, para entender lo que habíamos hecho y, de algún modo, intentar superar algo que nos perseguiría por el resto de nuestras vidas. De no ser así la fuga sería más bien corta, y ambos nos convertiríamos en solo uno más de los cientos de cadáveres desconocidos que el proyecto había dejado a su paso.

Hablamos durante toda la noche , cada quien en su respectiva habitación usando nuestra conexión mental. Y aunque lo que había ocurrido horas atrás aún ocupaba prácticamente la totalidad de nuestros pensamientos, decidimos concentrarnos en cosas más importantes para nuestro futuro inmediato.

Tras largas pláticas elaboramos algo similar a un plan. Como primer paso encontraríamos a Caín, usaría mi habilidad e intentaría obtener de su mente cualquier información que pudiera ser de ayuda en nuestro escape, en esa parte del plan tenía unas cuantas ideas acerca de cosas que pensaba hacer una vez en su mente pero que preferí no comentar con Eva. Posteriormente tendríamos que encargarnos de los guardias, preferiblemente de una distancia segura pues, a pesar de nuestras múltiples habilidades, ninguno de los dos estaba hecho a prueba de balas.

Todo comenzó cuando aún no amanecía completamente, luego de una larga noche en que mi sueño había sido intermitente y que por lo tanto no había servido de mucho para mi descanso. Fue muy sencillo localizar a Caín, su mente era muy distinta a las demás incluso cuando dormía.

Un par de guardias, armados con rifles, custodiaban la entrada a su habitación. Después de todo una persona como él, en su camino a la sima, se fabricaba cientos de enemigos deseosos de aprovechar la más mínima oportunidad para obtener un rápido ascenso usando el viejo método de asesinar a quien estuviera por encima suyo, por lo que nunca podría estar realmente seguro, ni siquiera entre los suyos.

Valiéndome un poco de la suerte y aprovechando las vulnerabilidades del cerebro a esa hora de la mañana, pude usar su miedo a Caín y mis habilidades de implantar recuerdos de hechos inexistentes, para convencerlos de que él, Caín, había dado ordenes precisas acerca de lo que deberían hacer en caso de que nos presentáramos. Así que tras una breve presentación, y una gran cantidad de persuasión de mi parte, decidieron que lo más conveniente para todos era hacerse a un lado y permitirnos el paso.

Al entrar en la habitación encontramos a Caín en la cama podía percibir su mente pero tenía el presentimiento de que algo no marchaba del todo bien. Eva se acercó en silencio y ,usando sus habilidades, retiró la manta que lo cubría. «Oh, seguramente era eso lo que me incomodaba», me dije al observar más detenidamente.

Lo que se encontraba bajo la manta no se parecía en absoluto a Caín, a menos que claro que fuera un montón de trapos desde el principio. Era sin duda una trampa, y habíamos caído tontamente.

Sentí el cañón de un arma en la parte posterior de mi cabeza justo antes de escucha la voz de Caín a mi espalda.

-¿Realmente creían que confiaría mi seguridad a un par de ineptos como esos?. Supe que venían a asesinarme justo en el momento que abandonaron sus habitaciones, supongo que la prueba fue demasiado para ustedes, lástima tenía esperanzas. Tal vez los siguientes prototipos sean mejores. Nos llevará algo de tiempo, pero al final lo conseguiremos -dijo con un deje de fastidio en la voz-. No son los únicos con una mente privilegiada, desde niño he sabido que soy diferente a ellos, esos patéticos homo sapiens con sus emociones y su moral. Su corazón los hace ciegos, siempre estuve un paso adelante de ellos y siempre supe como manipularlos para que hicieran lo que yo deseaba. Ni siquiera necesite de habilidades como las suyas, solo simple persuasión y capacidad de observación.

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