Capítulo 4: Bad boy

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Me aferré a la sábana al escuchar la puerta abrirse de nuevo, simulando estar dormido. Seguramente sería mi madre que pasaba a mirar si estaba bien.

Un cuerpo bastante más pesado que el de una mujer se sentó en la cama. Escuché algunas maldiciones por lo bajo, reconociendo la voz de Harry de inmediato. Crucé los dedos para que se fuese y seguí haciéndome el dormido.

-Eres tan insoportable. -Le escuché decir. Intenté no fruncir el ceño ante ese comentario. ¿A caso aprovechaba cuando me dormía para insultarme? -Lo eres, de verdad que sí. -Repitió en un tono que no conseguí descifrar. Tal vez molesto, aunque no lo parecía. -Me sacas de mis casillas. ¿"Chupa penes"? ¿En serio, Boo? -Se rió y me puse colorado. Habría escuchado a mi madre llamarme así. Menuda vergüenza. -Podrías decirme mil cosas peores. -Una gran mano se dejó caer en el contorno de mi cadera sobre las mantas. -Miles y miles de insultos peores. -Se quedó en silencio.- ¿Por qué me habrá dolido entonces? -Puso algo de peso en mi cintura, podría jurar que se había inclinado hacia mí. -¿Será por qué me lo has dicho tú? -Ronroneó sobre mi mejilla. Un escalofrío me recorrió el cuerpo entero. ¿Sabría que estaba despierto?

-Uhm... -Me estremecí al notar dos gruesos labios bordear mi mentón sin permiso.

-Así que estás despierto, eh. -Me dijo. Apreté los párpados y solté un suspiro.

-Supongo que sí. -Dije con la voz algo grave y ronca. Su mano recorrió por completo mi espalda dejándola reposar en mis costillas más tarde.

-Esa voz me pone mucho, Lou. -Me dijo. Sentí algo indescriptible en cuanto esa oración salió de sus labios.

Clavó sus dedos en mi piel y no pude evitar soltar un quejido de molestia. Pronto paró de apretar y dejó que me pusiese boca arriba sobre la cama.

-Se supone que estabas durmiendo. -Murmuró él.

-También se suponía que tú estabas enfadado conmigo. -Le dije.

-Si te pones así también se supone que te gustan las tías pero bien que te encanta que te toque. -Me dijo descaradamente posando su mano en mi trasero. Menudo cambio de tema. Entreabrí los labios y saqué una mano de las mantas para golpear la suya y que la apartase de mi nalga izquierda.

-No te pases. -Le advertí.

-Bonito trasero. -Soltó una risa grave y no pude evitar ponerme colorado.- Déjame espacio. Tu hermana Lottie es puro movimiento, estoy agotado. -Me dijo como si dejar que se tumbase en mi cama fuese lo más normal del mundo.

-¿Lottie? ¿Has estado con ella?

-Pues claro, idiota. Paso gran parte del tiempo en esta casa y las únicas que están aquí y no me insultan cada vez que abren la boca son Dori y tu hermana. -No me había parado a pensarlo. No pude evitar reír por sus últimas palabras.

-¿Y tú que haces con mi hermana?

-Me obliga a jugar a las muñecas o me pide que le explique sobre mis tatuajes. He de reconocer que tiene mucha imaginación y es muy cotilla. Me recuerda a ti, Boo. -Bromeó. No me molestó, es más, creo que ni siquiera le he prestado atención a la mitad de sus palabras.

-¿Tienes tatuajes? -Le pregunté curioseando como siempre mientras me apartaba y dejaba algo de espacio a mi derecha. Él se tumbó sobre las sábanas a mi lado, chocando su brazo con el mío, que ahora descansaba fuera de la colcha.

-Los tengo.

-¿Cuántos? -Levanté el mentón y giré mi cabeza hacia su dirección.

-¿No los quieres contar tú? -Me dijo provocativamente pegando su cuerpo al mío, tanto que pude notar algo despierto bajo sus pantalones. Sería verdad lo de que le ponía mi voz; es algo gracioso ya que es la que suelo tener cuando me acabo de despertar y luzco con las peores pintas de todo el barrio. Al menos me alegraba saber que mi voz es... ¿sexy? Algo así.

You look blurry [Larry Stylinson AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora