El despertador sonó a las 6:30 am. Abrí lentamente los ojos, no quería ir a la escuela pero tenía que hacerlo, no les iba a mostrar que era débil. Me levante, me dirigí hacia el baño y me tome una ducha con agua tibia. Al salir, me dirigí a la habitación de mi madre, busque su base y volví hacia mi habitación, me dirigí hacia el espejo y me coloque la base en el ojo, el moretón morado ya ni se notaba. Me cambie con unos vaqueros azules, una musculosa negra, un suéter holgado negro y al final tenía rayas blancas y mis zapatillas negras. Me fije la hora, eran las 7:00 am. Agarre mi mochila y camine hacia el colegio. Al llegar, me encontré con Sue, Mishelle y Jessica en la puerta y al verme rieron, yo solamente las ignore y me fui hacia el salón, no quería ver a nadie, solamente me senté en mi banco y del bolsillo de la mochila tenía mi celular y me puse a jugar a los juegos de este. Al tocar el timbre, lo guarde y saque el cuaderno, la cartuchera y el libro de la materia que teníamos. De apoco fueron entrando todos, los únicos que faltaban en el curso eran Cook y Justin. A los minutos entro Justin con la mirada baja, llevaba puesto una musculosa blanca y unos vaqueros negros. Él levanto la vista y me miro fijamente, yo solo le esquive la mirada. Las horas pasaron rápido, cuando toco el timbre de receso baje y me iba a dirigir al patio y allí estaba sentado Justin mirándome fijamente, lo mire de mala gana y me dirigí al bufet. Me senté en unas de las mesas y me quede los quince minutos jugando con uno de los papeles que había allí, cuando sonó de nuevo del timbre, subí y me senté en mi banco, las horas volvieron a pasar tranquilas hasta que sonó el timbre del segundo receso, estaba por bajar, cuando Mishelle cerró la puerta y Sue me miro con una sonrisa, Justin miro para abajo.
-¿No vas a ver Bieber? Caíste en su juego ¿Verdad? Pobre infeliz- ella rio
Justin no contesto y Cook lo miro con cara de odio. Sue me volvió a tirar al piso y me volvió a pegar, más fuerte que ayer, abrió las heridas ya marcadas, incluyendo las que yo me hice, ella al ver la sangre no paro, se rio con más fuerza y me siguió pegando. El dolor era inmenso, sentía miles de cuchillazos entrando y saliendo de mi cuerpo a la vez, deseo que ya termine con mi vida para acabar todo este dolor pero el destino quiere que siga sufriendo. Sue agarro una tijera de una cartuchera, me marco la cara y el cuello con ella. Solo escuchaba las risas de Cook y Sue y sentía recorrer la sangre por mi piel, unos minutos después ya no vi más nada, ya no escuche más nada… ya no sentí más nada.
-Eff- dijo una voz- Eff, despierta por favor
Abrí los ojos o eso pensaba y no veía donde estaba, solo veía nublado.
-Eff, al fin despiertas- dijo otra vez- ¿Puedes verme?-
-No- dije en un susurro -Ya se te va a aclarar la vista, tranquila-
-¿Dónde… dónde estoy?- dije con dificultad
-En el hospital-
-¿Por qué?- Dije confusa
No me acordaba mucho de lo que paso, solamente de los golpes y de Sue riendo.
-Perdiste mucha sangre- dijo en una voz aguda- y es toda mi culpa, no debí hacerle caso y creo que ya es tarde, lo siento Eff-
¿Justin? ¿Qué hacia él acá? Es un hipócrita. Pestañe varias veces, cuando pude verlo todo con claridad. Era una habitación blanca, con cortinas blancas que no te dejaban ver hacia afuera. Tenía una bata blanca y en el brazo tenía conectado un tubo. Quise girar hacia donde se dirigía pero un ardor en la cabeza no me lo permitió. Me acorde de la primera vez que estuve en una habitación así, mi padre estaba sentado al lado de la silla y lloraba mucho. Gire despacio la cabeza para donde se encontraba la voz de Justin y el ardor en la cabeza volvió.
-No te muevas-
No le hice caso y a pesar del dolor, gire la cabeza y lo vi. Tenía los ojos rojos y con ojeras, su cabello estaba desarmado y su rostro era como si se le hubiera muerto algún familiar.
-Dije que no lo hagas-
-Y yo ayer te dije que me dejaras tranquila-
-¿Enserio me estás diciendo eso cuando te traje hasta acá? -
-¿Te pedí que lo hicieras?- lo mire
-No, pero estabas desmayada y perdías mucha sangre-
-No es la primera vez que me pasa eso, tranquilo-
- Te hace mal-
-Como si importara- lo mire- Y no digas “A mi si me importas Eff”- Trate de imitar su voz- Porque los dos sabemos que no es así, si no, no me hubieras hecho todo lo que me hiciste en toda mi visa, incluyendo lo de estos cinco días- lo volví a mirar- Si me haces el favor de retirarte, perfecto, no necesito tu ayuda y nunca la necesite- El me miro triste, asintió, se levanto del asiento y se fue.
Yo volví a cerrar los ojos y me dormí.
-¿Señorita Stonem?- Dijo una voz femenina
Yo abrí los ojos lentamente
-Oh perfecto, estaba durmiendo- me miro- Ya se puede ir, pero tiene que hacer reposo por tres días y si para el jueves a la noche esta mejor, puede ir el viernes perfectamente a la escuela- sonrió- Ahora, recoja sus cosas y puede volver a casa jovencita y cuidase de la gente que la rodea-
-Sí, claro- dije
Apenas se retiro, me levante y agarre mi ropa y me cambie. No sabía dónde estaba. Me dirigí a la salida y vi que era el mismo hospital siempre, estaba a tres cuadras de mi casa. Al llegar a mi casa, subí a mi habitación, me desvestí, me acosté en la cama, abrase a la jirafa y me dormí de nuevo.
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Nunca me dejes {Fan Ficción Justin Bieber} (Libro #1)
Storie d'amoreElizabeth Stonem sufrió toda su vida pero tenía a Tony, que la ayudaba a superar los maltratos. El 12 de Marzo del 2013, Tony tuvo un accidente lo cual no sobrevivió y Effy estaba con él. Ella cayó en depresión absoluta y cada día su vida empeoraba...