15-Retrato del momento

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-Yo regreso a la casa –dijo Summer-, necesito darme una buena ducha. Y prefiero alejarme de la parejita anormal.

-¿Cuál es la parejita anormal? –preguntó Nick aun recostado a mi lado.

-Nosotros somos la pareja anormal –le susurré, eso era lo que representábamos para ella, así era como nos veía, claro que lo mas probable es que fuera a causa de sus celos.

-Ah. ¿Por qué te quieres alejar de mí, Summer?

-Prefiero no contestar a esa pregunta –dijo ella-. Digo, para seguir manteniendo nuestra hermosa amistad junto con todas las promesas que te hice. Aunque si quieres saber mi opinión, no creo que estés actuando demasiado bien en todo este tema.

Sí, claramente eran los celos.

-Opino exactamente igual que tu, Summer –dijo Lucy-. Pero lamentablemente no escuchan nada de lo que les digo.

-Eso es porque no es de tu incumbencia –interrumpió Nick-. Ni tuya ni de nadie.

Al fijar mi atención en Lucy, ignorando todo comentario por su parte, recordé lo que había dicho que si yo me ponía de novia con su hermano, si me transformaba oficialmente en su cuñada, ella hablaría con Peter; eso era algo digno de ver.

-Lu –la llamé-. ¿Es verdad lo que dijiste? Eso de que hablaras, de lo que ya sabes, en cuanto yo me convierta en lo que tú quieres que sea, oficialmente.

Seguramente nadie entendería esa pregunta tan rebuscada, nadie que no hubiera estado escuchando nuestra anterior conversación, o bien, que no hubiera prestado la suficiente atención a su comentario.

-No si solo lo haces para que yo hable; si ese era tu plan, no va a funcionar. Sería muy feo de tu parte pensar en hacer una cosa así. Pero lo consideraría si no forma parte de una táctica maligna tuya.

-Nadie cree que lo estés diciendo de verdad, Lucy –dijo Angela, persona que sí había estado prestando atención-. Vamos a tener que esperar un poco mas para ver algo como eso. Aunque quién sabe... tal vez nunca lo veamos.

-Es verdad –comenté-, creo que ni siquiera lo considerarías aunque me lo hubieras prometido. Ya me has prometido cosas como esa y no has cumplido. Si no mal recuerdo, hasta te puse unas condiciones para perdonarte; yo te disculpé pero tu no cumpliste con tu parte; claramente no te merecías mi perdón.

-Eso ahora no tiene sentido, porque estás con Nick –dijo ella, por si quedaba alguna duda del por qué se tenía que disculpar-. No hay nada por lo que debas perdonarme; y no siento ninguna clase de culpa por estar diciendo esto.

-Traicionaste su confianza –dijo Sally, para que Lucy pensara mas en lo que hacía-, yo creo que esa es una muy buena excusa; sin importar silo que hiciste tuvo buenos o malos resultados. Algún día sabrás distinguir aquellas situaciones que se merecen tu silencio; o al menos eso es lo que yo espero.

-Quédate tranquila –agregué-, no eres la única que espera una cosa así.

Angela también asintió. No es que nosotras, sus mejores amigas, no hubiéramos intentado nunca el hacer que ella dejara de meter la pata con todo, de que de una vez por todas aprendiera mantener su oca cerrada. Pero la verdad es que nos habíamos resignado. Uno tiene que admitir cuando se encuentra frente a un caso perdido.

-Yo no entiendo nada de lo que están hablando –dijo Mark, regresándome al momento. La mayoría de los presentes nos miraban con cara de no entender mucho de lo que sucedía-, por lo que me voy a ir yendo para la casa. Nos vemos.

El último veranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora