BLACK ━ YOONSEOK

› epílogo

—¡ya voy! —gritó el pelirosa mientras bajaba las escaleras, dirigiéndose a la puerta.

una vez que la abrió, se encontró con un gran ramo de orquídeas, y unas manos de tez blanca sujetándolas—. ¡sorpresa! —gritó yoongi mientras dejaba al descubierto su rostro.

—¡hyung! —hoseok lo abrazó, intentando no aplastar el ramo que estaba en el medio de sus cuerpos.

—flores para una preciosa flor —dijo yoongi mientras le entregaba el ramo luego de tomar distancia.

—¿una frase más cliché no podías elegir, yoongi? —rió el pelirosa—. es irónico que me hayas escrito tantas notas poéticas pero no puedas inventar algo para esto —el menor le arrebató una sonrisa al pelinegro, dejando al descubierto sus encías—. me encantan, yoongi —hoseok suspiró el aroma que las flores tenían.

—buenos días, yoongi —la voz de la madre de hoseok se hizo presente.

—buenos días, señora —yoongi hizo una reverencia.

claramente ella —y todos— estaban enterados de lo que había entre yoongi y hoseok.
namjoon se lo tomó bien, sólo amenazó a su mejor amigo con castrarlo si dañaba a su medio hermano.
la señora kim se lo tomó de maravilla al igual que su esposo, solamente que éste último era más sobre protector. no confiaba en yoongi plenamente, ya que aun él y su hijastro no poseían una relación formal.

no hasta ahora.

—hobi, necesito hablarte de algo importante.

—¿quieres ir al patio trasero? espérame ahí, dejaré las flores en el agua —respondió con una sonrisa.

el pelinegro asintió, y mientras el menor iba a la cocina, él se dirigió hacia donde le dijo. una vez que llegó se sentó en una gruesa madera, estaba a los costados del pequeño arenal.

—¡listo! —apreció el pelirosa sonriendo. fue directamente a sentarse en el regazo de yoongi—. ¿de qué querías hablarme?

—bueno... estuve pensando y... no lo sé... tal vez... uhm...

—¡yoongi ya dilo! —regañó el menor.

—eres tan lindo cuando te enojas —el pelinegro le robó un pequeño beso.

hoseok sonrió, dejando a la vista los lindos pósitos en sus mejillas—. ya... dime...

—¿recuerdas hace cuánto volvimos del viaje por vacaciones?

—uhm... uh... casi tres meses, creo.

—me di cuenta de algo, hoseok. espero no poder herirte con esto —el semblante del mayor se puso serio—. pero encontré a alguien, con la que me gustaría pasar el resto de mis días.

—¿qué? —el menor sintió su vista nublarse.

—tú, hoseok.

la felicidad volvió instantáneamente al menor—. ¿qué quieres decir con eso, hyung? —preguntó mientras estaba cabizbaja con una sonrisa, una de sus manos jugaba con su camiseta, levantándola.

—hobi, ¿te gustaría ser mi novio? con etiqueta y todo incluido.

los brazos de hoseok rápidamente lo estrujaron contra su cuerpo. comenzó a soltar chillidos en forma de "¡sí!" mientras besaba el rostro del mayor.
tanto así que ambos terminaron cayendo en la arena.

—estoy tan feliz, yoongi hyung —dijo hoseok, mientras suspiraba, casi arriba del cuerpo del mayor.

—quiero comer pastel —musitó de la nada el pelinegro.

—soy un pastel —chilló el pelirosa.

—¿quieres que te coma, preciosa delicia? —susurró yoongi, contra el oído del menor.