Capítulo 9

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Los pasillos estaban en un silencio total, la música de la fiesta ya no se oía, solo nuestros pasos.
Cuando llegamos Draco se apresuró a entrar, yo me quedé vigilando por si a alguien aparecía, aunque al parecer sólo nosotros deambulabamos en lugar de dormir o estar en la fiesta.

-Aquí está.- dijo finalmente y salio de entre las estanterías con una sonrisa triunfal.

Salimos deseando no encontrarnos con nadie mientras volvíamos al pasillo en el cual nos habíamos encontrado.

-Tenemos que devolverlo al finalizar el año...-

Asentí, era algo obvio pero estaba demasiado cansada como para decírselo.

-Hasta mañana y gracias.- dije.

Esa noche, me quede pensando en cómo todo había cambiado.
Malfoy, hace 8 años que lo conozco y, ni él ni yo nos habíamos esforzado en entablar una amistad. De hecho, todo lo contrario. Solíamos insultarnos, herirnos y... es extraño que ahora esté ayudándome. ¿y si Ron tiene razón? ¿y si sólo quiere acercarse a nosotros para obtener algo?
No pude seguir pensando ya que el sueño me había ganado.

A la mañana siguiente me levante aún cansada ya que los profesores habían aceptado dar lugar a la fiesta pero con la condición de que no cambien los horarios de clases.
Comprobé que no era la única a quien le faltaban horas de sueño.
A Ginny se le notaban unas ojeras muy marcadas y la mayoría ni se había preocupado en peinarse.

Por alguna razón, Draco había faltado a la clase de encantamientos. Supuse que se había quedado dormido.
Tampoco apareció en lo que quedaba del día, ni de la semana.
No me atrevía a preguntarle a alguien de Slytherin porque... ¿Qué dirían? Además, podría no estar pasando nada importante.

Le comenté a Harry, con quien volvimos a hablar (siempre y cuando el tema de conversación no sea Ron).

-¿Malfoy?- me miró extrañado.- ¿Porqué te preocupa?

-No me preocupa, solo que al ser mi compañero de banco no pude evitar notar su ausencia.- dije algo... ¿nerviosa?

-Te informaré si se algo de él.- era evidente que no creía lo que acababa de decirle.

En el fondo sabía que estaba preocupada por la desaparición repentina de Draco, algo que jamás creí que sucedería.
Pero no era nada por lo cual alarmarse, él me había estado ayudando y de cierta forma se mostró amable. Cualquier persona que estuviera en mi lugar se sentiría de la misma manera... ¿no?

Quédate a Mi Lado- DramioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora