Entre dos mundos

18. Capítulo Dieciocho

La mirada de Trinity pasó de el enojo a la compasión, y me abrazó.

Lo cierto es que no quiero su compasión, quiero su apoyo, pero aún así le correspondi el abrazo y me dejé llevar por él.

Hasta este momento no sabía cuánto necesitaba un abrazo.

-Trinity, yo no soy la persona que todos quieren que sea- dije al borde del llanto.

-Claro que no, tú eres tú, y nadie va a cambiar eso- me reprochó -. Debes recordar eso siempre, tú eres tú. Punto. Y si alguien se atreve a querer cambiarte tienes que enviarlo al demonio y dejarle bien claro que a Serena nadie la cambia.

Suspiré. Ojalá fuera tan fácil.

-Estoy perdida; siento que estoy dando pasos a ciegas, apenas se de este mundo y ya quieren que lo salve.

-Hey, que eso no te angustie, tu amiga aquí presente puede ayudarte a saber lo que quieras- sonrió, orgullosa de si misma.

Nos separamos de nuestro reconfortante abrazo.

-Hablando de eso, estuve revisando los libros que tienen en la biblioteca y he encontrado algo bastante interesante- la miré con intriga -. Es sobre nuestra conexión.

Al fin.

En estos últimos tres meses se nos a echo imposible ignorar la conexión que tenemos con Trinity, Aiden y yo, al principio pensé que eran simples coincidencias, hasta que empecé a sentir cuando Aiden o Trinity sufrían algún tipo de dolor físico, y ellos podían sentir el mío, incluso alguna que otra vez pude sentir sus emociones (sólo cuando eran muy fuertes), pero lo más extraño es que entre Trinity y Aiden no sentían nada, su única conexión era yo.

Desde que nos dimos cuenta que algo raro pasaba entre nosotros tres, Tri se largó de cabeza a la biblioteca, y se pasa ahí la mayor parte del día, sólo sale de ahí para mis entrenamientos.

-Para eso te estaba buscando cuando te encontré atacando a esa chica- mis mejillas se sonrojaron levemente al escuchar su comentario, si lo decía de esa forma sonaba horrible.

-Ella empezó- dije en mi defensa.

Tri sólo sonrió y negó con la cabeza, mientras proseguía a continuar.

-Encontré un libro de magia sagrada, en el que describía una antigua conexión entre seres mágicos. Observa- sacó un pequeño libro de entre sus ropas y me lo tendió.

Lo abrí en una página que estaba marcada; todo estaba escrito en latín, pero extrañamente yo lo entendía.

-Tri, esto está en latín y por alguna extraña razón puedo...

-... entenderlo- terminó Trinity por mi -tranquila, es normal, está en nuestro ADN poder entender la lengua que practicaban nuestros ancestros.

Asentí lentamente y me dispuse a leer.

"Desde tiempos inmemorables la magia a sido solo una, más allá de que en las distintas razas se manifieste de diferentes maneras, es solo una. Por lo que generalmente es la misma magia la que busca unirse, sustentarse mutuamente, llenar el vacío que dejó cuando se separó en las distintas especies de criaturas, busca una mitad.

En el exacto momento en el que un ser mágico viene al mundo, está naciendo otro que está destinado a ser su mitad"

Suspiré.

La verdad era bueno haber encontrado algo, pero esto no me decía absolutamente nada.

-En cerio creo que es genial haber encontrado una pista, pero no resuelve mucho- la miré con una mueca.