Acorralados || 2da Temporada || J. V. & B. M.

11.

-Leyva dijo que querías verme.

-¿No que no, Freddy? -murmure por lo bajo. Asentí, haciendo un ademán para que pasara y se sentara frente a mi. Hayley era mi mano derecha, así que la mayoría de las decisiones que tomaba se las mencionaba, si no es que las negociaba también.

Todo mundo la quería como líder, aunque, sin ser arrogante, me preferían a mi, así que no dude mucho en tenerla como mano derecha. Alessia y Matt eran los mejores agentes que tenía, las cosas eran más o menos así.

-Sabes lo de Jos ¿No? -pregunte. Cuando asintió, le conté lo que sabía y por lo que él debía quedarse para mantenerlo a salvo.

-¿Y ahora quieres rescatarlo? -pregunto.

-Es lo mínimo que puedo hacer. Mira, solo quiero averiguar si alguien quiere hacerle daño, en cuanto termine su riesgo, se irá.

-¿Y tú estas bien con eso?

-¿A que te refieres?

Vacilo un poco, pero después negó, simplemente debía decirlo.

-Creemos que aún lo amas. Ya sabes, Matt, Alessia y yo -dijo, mirándome cautelosamente. Reí un poco, negando suavemente. Claro que lo amaba y me preocupaba que se notara tanto, por lo que debía hacer todo lo posible por evitarlo.

-A algo así voy -dije. Me cruce de brazos y me recargue en la silla. Traía una camisa blanca y un chaleco negro junto a un pantalón de vestir del mismo color. Hayley asintió, dejandome hablar-. Hace unas horas tuve una conversación con Park Jian. Su organización tuvo una redada apenas.

-Lo escuche -dijo, asintiendo. Frunci el ceño, inclinandome hacia adelante.

-¿Lo sabias? ¿Y no me lo dijiste? -pregunte, anonadado. Ella se mostró sorprendida ante mis palabras.

-Creí que no había importancia.

-Jian es nuestro aliado y lo aprecio bastante. Lo sabes Hayley.

Se encogió de hombros, restandole importancia. Era claro que no tenía ni una idea de lo que pasaría.

-Bien, bien, la próxima vez te diré todo lo que sepa ¿Contento? No es como si nos afectará directamente.

-En realidad, si nos afecta.

Me miro con el ceño fruncido, su cabello azul eléctrico estaba recogido en una trenza que le caía de lado, su edad ya se notaba de 25 años, ya le era más difícil cubrirla.

-Su organización está en crisis. Y no creo muy justo que todo se acabe. Así que tome una decisión -asintió, dejandome continuar, suspire y, sorprendentemente, en lo único que pude pensar fue en la sonrisa de Jos, diciendo que me quería-. Voy a unir a nuestras organizaciones... Y me voy a comprometer con él.

Me miró como si me hubiese vuelto loco, levantándose de golpe de la silla. Esperaba cualquier reacción, así que no me exalte cuando eso sucedió.

-¡No puedes! -casi grito. Me levante, alzando levemente la barbilla.

-Hayley, eso no significa que tu lugar va a cambiar ni que...

-¡No es eso! La organización nunca ha tenido nada como esto, pero significa un cambio total en la administración, un cambio total en la rutina ¡En todo! -parecía más preocupada que molesta, lo que me tranquilizó, alguien toco la puerta y sin esperar respuesta, se abrió esta. Freddy se asomo con una sonrisa incomoda.

-Lo siento, volveré más tarde...

-¡No! ¡Ven aquí!

Hayley lo tomo del brazo y prácticamente lo arrastro dentro de la oficina, dejándolo a su lado.