Katniss
Paso aproximadamente dos horas cazando, tratando de no pensar en el evento de la mañana, me avergüenza un poco; ya tengo lo suficiente para la cena de hoy así que decido descansar, me quedo un rato sentada y meditando todo lo que ha cambiado mi vida, pienso en todas las personas que extraño y no regresarán, pienso en las que aún están vivas y las alejo de mi o simplemente me mantengo absorta de ella, sin apreciarlas ni valorarlas como lo hice con Peeta.
Una de esas personas es Gale y Peeta siempre insiste en que hable con él, que le responda a sus carta, pero yo sólo las arrojo al fuego sin leerlas, mi madre sigue siendo un misterio para mií sus sentimientos, de pronto sin darme cuenta escucho una voz conocida, es Gale, lo observo por un momento y sólo salgo lo más rápido que puedo a casa de Peeta.
Toco la puerta lo más fuerte que puedo me encuentro muy agitada y tiro las cosas al piso sin pensarlo, la sangre lo pavos que caza para cena empieza derramarse, Peeta mi mira desconcertado y me abraza de inmediato, no estoy llorando por lo que su rostro está más tranquilo, de hecho no siento deseos de llorar, solo no sé qué sentir ni pensar y mucho menos que hacer.
-¿Katniss te encuentras bien, dime que ha pasado? -me pregunta con sus ojos clavados en mí y una expresión preocupada.
-Estaba sentada sobre una roca y de pronto Gale se encontraba detrás de mí, no pude hablar sólo salí corriendo para acá, no sé qué debo hacer Peeta.
-Katniss hermosa, te parece que me ayudes con la cena, te tranquilices, dejes de pensar en tantas cosas por un momento y sólo pasar la tarde con tu novio, además tengo un obsequio para ti.
-¿No se supone que los obsequios son por la noche después de la cena?
-No este no, espero te guste.
Cuando abro la caja que venía forrada con sumo cuidado de un papel de color verde y una flor, simplemente no pude evitar sonreír, Peeta me había regalado un hermoso vestido negro sin mangas, unos zapatos negros al igual que el vestido y unos aretes de color plateado, todo era hermoso, me dijo que quería que usara en la cena de esta noche ya que para él era en momento muy especial.
La tarde paso muy rápido entre algunos pequeños y lindos besos, cocinamos una gran cena. Al terminar y dejar todo listo son aproximadamente la seis de la tarde, Peeta me abraza y me besa en cuello y luego en los labios, ya no es un secreto que mi corazón se desborda de emoción ante sus muestras de cariño, pero no cometeré el mismo error de hoy por la mañana, así me trato de controlar.
Peeta me mira de una forma muy extraña y me hala de la mano hacia su sala, me sienta y él conmigo, me mira por un momento y acto seguido me dice que tiene algo importante que decirme, que por favor lo escuche sin interrumpirlo y sin salir corriendo, yo sólo asiento con la cabeza.
-Mi amor, todo este tiempo que estuvimos separados... corrijo todo este tiempo que me encontré lejos de ti y después tenerte cerca pero sin poder acercarme, sin saber si te importaba o te era indiferente, después de los juegos, las muertes, las desgracias, el hambre, la injusticias, las perdidas y todo el sufrimiento que hemos tenido; no consideras que el estar juntos y créeme cuando te digo que me haces el hombre más feliz, por amarme, no crees es necesario que dejes tus odios y rencores, que perdones y te perdones a ti misma, para por fin poder salir adelante juntos y creo que parte importante para poder sir ser feliz o por lo menos estar mejor es perdonar y Gale... bueno dudo que haya querido lastimarte, no crees que deberías hablar con él. Sólo piénsalo, yo tengo la fortuna de tenerte él no.
Con esas palabras salgo a mi casa para comezar a arreglarme, ya que para Peeta es importante esta noche, lo hare por él, pero hablar con Gale no lo sé. Me meto a la bañera, me maquillo y uso los obsequios de Peeta, mi observo al espejo y verdaderamente luzco muy bien, él vendrá por mí a las ocho treinta y faltan casi cinco minutos, tomo mi abrigo y me lo pongo, he dejado mi cabello suelto y peinado de forma muy natural, escucho la puerta y se que es Peeta bajo inmediatamente pero me encuentro con Gale.
-Katniss por favor escúchame, nunca quizá lastimarte, de verdad lo siento y como te dije en mi carta, me cegó la ira de la guerra ahora lo entiendo y sé que no puedo pedir nada aún te quiero.
-Gale... pasa hace frio. -Le digo y cuando estoy por cerrar la puerta Peeta llega y da un fuerte abrazo y beso, al decirme que soy la mujer más hermosa que existe, de pronto su mirada se dirige a Gale y él se para a saludarlo de mano.
-Katniss sé que tiene cosas de que hablar los dejo solos y los espero en mi casa. -Me dice Peeta sin una señal de duda o enojo, no entiendo como puede ser tan controlado y bueno.
-Veo que ahora están juntos tú y el panadero, yo sabía que eso sucedería tarde o temprano.
-Gale por favor no es asunto tuyo-
-No Katniss no te enojes y si es asunto mío, porque te ha amado desde hace un tiempo pero no te preocupes, ahora he aprendido a verte como siempre debí hacerlo como mi familia. Quiero que sepas estoy muy y mal y no intento que me entiendas solo quiero que me des una oportunidad de ser amigos de nuevo y tratar de sanar la heridas entre nosotros, que me perdones por haber creado esa bomba, por Prim, por...
-Shuuu -Le digo para que guarde silencio, lo observo detenidamente a los ojos y veo sinceridad.
-Gale todos hemos cometido errores y hemos hecho cosas horribles, es momento de perdonarnos y no quiero seguir sintiendo rencor ni odio y menos por ti, no quiero sufrir no que mi seres queridos lo pocos que me quedan sufran, podemos dejar de hablar de cosas ya no quiero seguir así...-le doy un abrazo y me corresponde- mejor vamos con Peeta o nos perderemos la cena.
-Katniss no gracias, no puedo.
-Gale si quieres estar en mi vida, mi vida es Peeta, debes poder hablar conél, además te ha invitado y a tu familia tmebien aunque supongo que no lo sabes.
-¿Mi familia?
-Si ellos estarán en la cena y tú no puedes faltar, sabes es la primera cena de año nuevo sin juegos del hambre, lo recuerdas, anda vamos.
-Catnip, no sabré como actuar además luces muy bien, te felicito ni pareces tú y yo mírame no estoy muy presentable.
-Gale es como un año distinto no puede faltar.
-Gracias iré a cambiarme, regreso y Catnip gracias por ser mi familia.
Me quedo un momento viendo a mi amigo que hace el mayor esfuerzo por aceptar que ahora todo ha cambiado que yo he cambiado, salgo hacia la casa de Peeta y lo encuentro mirándome desde su puerta, no puedo evitar mi mayor sonrisa, lo amo y nada cambia eso.
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Peeta y Katniss ¡Amor Real!
Teen FictionHola a to@s! Es un verdadero placer escribir y leer nuestras historias. Esta es la primera historia que he escrito, son capítulos cortos y ya está terminada, la subiré lo más pronto posible, espero les guste. Después de terminar de leer los libros d...