Hidden letters (FINALIZADA)

Donde estes

No quería ser encontrado y gracias a las enseñanzas de su padre y tío, sabía cuál era la mejor manera de mantenerse oculto y lejos de todas las personas que necesitaba lejos, mantenerse cerca y a la vista. Le había pedido a su tío el viejo auto que no usaba, como consecuencia, obtuvo un interrogatorio mediante el cual le tuvo que contar todas las cosas que habían pasado y ahora él se movilizaba entre los estacionamientos subterráneos del edificio donde vivía con su amigo y ex, al del trabajo.

Sus padres no sabían nada de lo que había pasado y prefería que fuera así. Su tío estaba en contra de que huyera, pero él le dejó claro que ya no sabía que era lo que tenía que hacer.

Le había pedido a Minki que le dijera sus horarios de trabajo y jurara no saber de él y visitaba a la señora Lee, como había prometido, cuando sabía que no se encontraría ni con Jackson ni con Mark.

- Hola, Sra. Lee – dijo al entrar a la habitación.

- JinYoung, querido, ¿cómo estás? - le dijo la señora muy afectuosamente.

- Estoy bien. - mintió.

Estaba tan acostumbrado a mostrarse bien, que ya no le costaba forzar una sonrisa. Volvía a ser el chico con la vida perfecta que podía estar muriéndose por dentro.

- Hacía mucho que no venias.

- Si, la graduación, las fiestas, el trabajo... lo lamento. – le dijo mientras le entregaba el ramo de flores que le había comprado.

Leyeron por horas y tomaron algo de té mientras escuchaba las anécdotas de la señora y, aunque en algunos momentos sabía que dejaba de escuchar, siempre retomaba la conversación, hasta que se hizo su horario de ir a trabajar.

- Mañana vuelvo con un nuevo libro. – le prometió.

- Claro, cuando quieras. – la señora le sonrió. –

Tomó el ascensor que iba al estacionamiento y bajó mientras se sonaba el cuello varias veces y su cara triste volvía a hacer presencia mientras estaba solo.

Fumaba un cigarrillo ocultándose de las cámaras de seguridad del estacionamiento del hospital cuando vió a Junior salir por la puerta del ascensor. Lo observó caminar y prenderse un cigarrillo, tiró el suyo y lo siguió.

- ¡Junior! – lo llamó a los gritos, haciendo que este girara en el lugar para verlo. – al fin te encuentro.

- Nos vimos hace dos semanas, Jackson. – recibió como respuesta.

- Cuantas veces más te tengo que pedir perdón. No puedo permitir que nuestra amistad termine así.

- Solo necesito tiempo, necesito estar tranquilo.

- ¿Y Mark? Él... - Junior le puso la mano delante de la cara haciéndolo quedar mudo.

- No quiero saber, me gusta mi ignorancia. Así que no digas nada. Andá a trabajar. – se encaminó al ascensor y hasta que las puertas no se cerraron, Junior no se movió del lugar donde lo había dejado.

Cuando llego a su piso marcó su horario de entrada y fue a guardar su mochila en su casillero antes de ir a ver las habitaciones. Minki llegó después de él y se acostó en la litera.

- Hola, Jackson.

- ¿Tan cansada desde temprano? – le pregunto, mientras se sentaba al lado de ella. Todavía tenían tiempo para tomar su turno.

- Algo... ¿hablaste con Jin? – ya no le era una novedad que todos supieran lo que había pasado.

- Si, le dije que fue mi culpa, que Mark no quería, que por desgracia, a mí no me ama... - tragó un poco de saliva antes de seguir. - que lo extraña, que quiere verlo...