Ｌｉｒｉｏｓ Ｒｏｊｏｓ赤いユリ [ＢＯＲＲＡＤＯＲ]

Capítulo 5 "El rojo de nuestra sangre"

Me quede en esa posición, hasta que sentí como la claridad empezaba a molestar en mis ojos, abrí lentamente mis ojos, vi hacia arriba, la nieve no había parado de caer, se escucha el sonido de los pájaros cantando a lo lejos, la cabeza de Kiev reposa sobre mi hombro, me acorde del estado de su espalda y tome el abrigo que estaba cerca de ella en el suelo y la cubrí, me empecé a sentir acalambrada por estar tanto tiempo en esa posición, me levante y con cuidado hice que el cadáver de Kiev reposara en el suelo de nuevo.

Ya de pie, no sé cuánto tiempo ha pasado, pero por la intensidad de la luz deben ser pasadas las horas del mediodía así que ya han pasado muchas horas desde que la bengala fue activada y aún no ha llegado ningún tipo de refuerzos, es mejor que me apresure, tengo que salir de aquí, iré hacia arriba y buscare ayuda para poder sacar a mi hermana, no puedo ir a la base ni pedir ayuda a ningún colega.

Camino con calma hacia las paredes, inspecciono el lugar tratando de encontrar algún tipo de tramo que me ayuda para subir, pero no halle ninguno, me senté sobre una de las piedras para descansar un poco, toque mi pierna con mis manos, subo un poco mis pantalones, no encontré rastro de ninguna herida, para mi sorpresa mi pierna ya no estaba desarticulada ni atrofiada por la caída ,hasta la golpee para ver si percibía algún tipo de dolor pero no logre nada, moví mi pierna hacia todas las direcciones, se encontraba como siempre, me pareció extraño este comportamiento de mi cuerpo, ya mi pierna debería estarse pudriendo debido a la herida grave que sufrió, enrolle las orillas de mi polera para divisar si había alguna herida, y solo había una extraña cicatriz en mi hombro hacia mi cuello, debe ser la cicatriz que dejo aquella inyección.

Kiev me dio a entender que ya había sido inyectada, pues ya sabía que me pasaría, me dijo que la inyección me haría más fuerte ya que es un fuerte suero, pero...¿qué hace?, ¿acaso este suero fue el que hizo que no sintiera dolor y que mis heridas sanara de esa forma tan rápida?, si es así, ¿por qué mi hermana no se recuperó de sus heridas?, pensándolo bien aguanto mucho tiempo la caída, cualquier persona hubiera muerto al instante, pero ella, hasta dijo sus últimas palabras, aunque no me pude dar cuenta en realidad en que momento exacto murió ya que después de que dejo de respirar me dio la impresión de que hubiera resucitado...

-Maldita sea, siento mi cara inmóvil (no es que me impresione, siempre estoy así pero siempre se siente extraño).

Estiré mi espalda y moví mi cuello haciéndolo sonar varias veces, me levanté de la roca y camine al otro extremo de la pared, me quedé unos minutos viéndola y decidí escalar hasta arriba para poder pedir auxilio, cuando toque la pared recordé que obviamente no traía ningún instrumento para escalar.

-Si tan solo pudiera construir algo- digo esto con mi frente y mis manos pegadas a la pared-si pudiera conseguir algo que me ayude- un chispazo blanco que provenía a mi parecer del centro de mis manos me alerto, del susto me hice a un lado y revise mis manos-¿qué mierda?,¿p-pero qué?...-cerraba y abría ambas manos y veía la pared, parecía que la pared está hecha de algún material extraño- no me puedo perder tanto tiempo viendo esta pared.

Hinque mis manos en unas piedras que sobresalían de las paredes, me apoyo en ellas con ayuda de mi pie posicionado en una grieta y empiezo a escalar, cada vez subía más, ya estaba casi a la mitad del camino cuando comencé a sentir, o más bien a no sentir mi pierna y mi brazo, después de unos minutos en los que me intentaba sostener al máximo solo con mi brazo y mi pierna izquierda comenzó a doler como si la herida comenzara a abrirse, grite por el dolor, intente hacer que mi otra pierna la que estaba colgando hacia el vacío, por lo menos para que mi aguante a esta pared no sea tan inestable, entonces...en ese intento, parece que golpee con mucha fuerza y la piedra de donde me sostenía colapso y caí...

Grite de terror, como si fuese a morir, cerré mis ojos, intente sostenerme de lo que sea pero del aire no se puede sostener, caí y sentí un inmenso dolor en mi pierna y mi espalda, abrí los ojos, y no caí en el mismo lugar de mi hermana, si no sobre una de las piedras que se encuentra hacia las orillas, logre sentarme con dificultad sobre la roca y el dolor y la sangre que provenía de la parte inferior de mi cuerpo me altero...mi pierna había quedado atrapada en las grietas de aquella roca.

-!Agh¡-mascullé-¡MALDITA SEA¡ ¡ARRGH!-gritaba sin parar, mi tobillo parecía haberse doblado, golpeaba mi pierna como si eso ayudara- No puede ser...

No puedo dejar mi pierna así por mucho, si dejo que pase, me desangrare y moriré aquí como una imbécil. Busque entre mis bolsillos y tomé un cuchillo de guerra que la mayoría de las veces en lugar de usarlo en mi profesión lo uso para quitarle la cáscara a mis manzanas, desenvaine la hojilla de la empuñadura presione un interruptor que hará que el filo de la hojilla se caliente, no tardó mucho en calentar...

Kiev me decía que en emergencias, cuando se necesita mutilar una extremidad sin causar mayores daños y no se tienen las herramientas, existen ciertos tipos de sopletes con cuchillas que facilitan el trabajo y que al cortar se detiene la hemorragia.

-Entonces no queda otra alternativa, tendré que hacerlo- digo rasgando una prenda de mi pantalón con mi mano y la coloco en mi boca haciendo un tapón- maldita sea-digo entre dientes antes de acuchillar salvajemente mi pierna, sentía como las venas y los músculos se despegaban del hueso, después de cortar mi propia pierna, pude sacarla de esa grieta y vi como mi pierna desde un poco más debajo de mi rodilla hasta la punta de mis pies, ese pedazo de carne, descansaba en el fondo de la grieta - no puedo creer lo que acabo de hacer - las gotas de sudor bajaban por mi frente y mi respiración se volvía irregular...

Baje de la roca con ayuda de mis manos y descanse mi espalda de la piedra.

-Parece que...tendré que esperar a que me maten.

Paso mucho tiempo, el hambre había desaparecido porque me concentré en no pensar en eso, la tarde cayó y volvió a anochecer, el frío no me afectaba, intentaba no mirar a mi hermana, la culpa me carcomía por dentro, el dolor desapareció de nuevo y el sueño me gano.

Ya no siento las rocas ni la nieve debajo de mi cuerpo, siento que descanso en algo suave, escucho el bullicio de personas hablando y las alarmas de unas ambulancia, abrí los ojos y vi a mi alrededor, estaba sobre una camilla la cual estaban ingresando en una ambulancia, antes de se cerrasen las puertas de la ambulancia vi al fondo, donde se encontraba aquel abismo, como un helicóptero con unos rescatistas sacaban en una camilla, el cadáver de mi hermana en lo que parecía una típica bolsa de cuero negro, al menos su cuerpo descansara en paz hasta que encuentre la manera, una luz en mi ojo me hizo reaccionar, un rescatista estaba examinándome, vi hacia mis piernas era extraño pero la que había mutilado para poder salir de aquella roca estaba enyesada al igual que mi brazo, tal vez me colocaron una prótesis una vía salía de uno de mis brazos y al final había una enfermera que sostenía la botella, cuando cerraron las puertas de la ambulancia vi en el reflejo de los cristales que mi cara tenía vendas, mi rostro con ojeras profundas y ojos sin vida fue lo última que vi en ese momento antes de caer laxa sobre aquella camilla...