Capítulo 2 "Nieve Roja"

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Narra Kiev...

Un sujeto golpea la cabeza de mi hermana con una especie de martillo, cayo e intento defenderse pero una fuerte patada en su mandíbula la dejo inerte en el suelo.

- ¡SUÉLTALA! - grito desesperada al ver que el sujeto la cargaba y la llevo a su espalda como si se tratara de un costal - ¡VÍCTOR ME DIJO QUE YA NO LA NECESITAN¡, !DEJENLA EN PAZ¡ sostengo con mis manos temblorosas mi armamento y sigo apuntando.

- El Doctor nos ordenó algo completamente diferente - dice con voz lúgubre un hombre del grupo de los sujetos enmascarados.

Me levante e intente disparar, uno de los sujetos se acercó rápidamente y con un golpe hizo que mi arma saliera volando por los aires y se enterrara en la nieve, luego puso ambas manos alrededor de mi cuello, empezó a ahorcarme, puse mis manos sobre sus muñecas mientras me quedaba sin aire, las rodee y al hacer presión sobre sus muñecas estas se despegaron de sus manos y cayeron al suelo junto con sus manos y de sus brazos mutilados salía sangre a borbotones y caiga al suelo manchando su uniforme azul celeste en el trayecto al piso.

- Tuviste suerte, si ella hubiera querido ya tu cabeza estuviera rodando en el suelo-dice uno de sus compañeros al ver que este se hinca de rodillas en el suelo del dolor como si no le importáse su estado.

Me acerque al ver que los demás pareciera no importarles el estado de su compañero, me arrodille y ya cuando estuve cerca de él, posicione ambas manos en el cuello del mutilado y lo doble como hacían con los renos agonizantes para acabar con su dolor, después de un ruido desagradable producido por su cuello rompiéndose, este cayó al suelo sin aliento alguno.

- Nos hiciste un favor, el ya no nos servía para nada, era un animal, ¿cierto?- dice el mismo sujeto y luego coméntalo último mencionado a otro sujeto con risas.

- Si, además ella hizo el trabajo sucio por nosotros - responde una voz femenina medianamente aguda, después de reírse sin parar de su compañero muerto y que ahora su cuerpo yace desangrándose poco a poco en el suelo, la fémina avanza hacia mí con un rifle y escucho que otros se acercan detrás de mi.

- Parece que no hablas mucho, pero por si acaso te pondré esto - la chica arrodillada frente a mi deja descansar su rifle y toma una venda de sus bolsillos y rodea desde mi nuca hasta mis labio.

Siento también unos grilletes en mis tobillos y unas esposas que obligan a mis manos a estar pegadas a mi espalda, siento como me arrastraron hasta el tronco de un árbol, veo como el sujeto que sostiene a Anna en su espalda la toma por los tobillos y la agita como los maleantes de los colegios antiguos cuando intentaban sacar cosas de valor de los bolsillos de su víctima.

- Miren - risas - se está desangrando-dice el sujeto viendo como las gotas de la herida de la cabeza de mi hermana caían sobre el suelo.

- Si sigues así la matara y necesitamos a estas dos vivas - informa con voz sombría uno de los integrantes del escuadrón que se encuentra sentado sobre una roca, el único que no ha hablado hasta ahora.

Noto como los párpados de mi hermana se mueve, ya despertó pero se hace la que todavía esta inconsciente, estoy orgullosa de ella y siempre lo estaré, aunque ya no pueda estar más con ella. El tipo que sostiene de los tobillos a mi hermana vuelve a ponerla en su hombro, pero esta vez de manera de que su cabeza quede al nivel de a suya, como un padre que carga a su hijo sobre su espalda, Anna deja caer su cabeza hacia atrás para tomar impulso pero lo hace con tanta cautela que los demás piensan que el sujeto la está sosteniendo mal.

- Si no la vas a sostener bien mejor átala como hicimos con ella - me señala el sujeto que está sentado sobre la roca y yo intento hacer el más grande esfuerzo porque no noten que me estoy riendo de la estrategia de mi hermana.

Lirios Rojos赤いユリ [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora