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Compruebo la hora por última vez. Quedan 7 minutos para que sean las 6 de la tarde y por fin pueda marcharme a casa. Omma y appa me ha inscrito en esta academia privada, pero yo detesto tener que venir.

De vez en cuándo, en días como hoy, me encierro en el baño las últimas horas para poder descansar de los chicos de clase, que por lo visto, disfrutan de meterse conmigo.
Desde dentro de estas cuatro paredes en las que estoy encerrado, puedo escuchar la lluvia en el exterior.

Eso sólo me hace sentir más pequeño.

Omma dice que me faltan nutrientes y he de que comer más, así que me llevo el sándwich a los labios y me lo tomo, uniendo mis rodillas. "El suelo de este sitio está un poco frío..." pienso.

Desde que me desperté esta mañana sólo en mi habitación, he estado pensando qué fué exactamente lo que pasó ayer. Se sintió extremadamente real, pero no había rastro de velas, cuchillas o ouijas. Todo apunta a que fué un sueño, pero algo en mi interior me dice que quizás, y sólo quizás,
pasó de verdad.

De pronto, el estruendo de la puerta principal abriéndose hace que ahoge un grito y salte en mi propio sitio. Escucho pasos distribuyéndose en todo el servicio. Son varios.

一¡Oye, Park! ¡Sabemos que te encierras aquí!

Mierda, mierda, mierda... Me han pillado... Pensaba que encerrándome en el baño de mujeres pasaría desapercibido toda la hora...

Uno de los matones golpea la puerta de la cápsula a mi lado, haciendo que mis ganas de huir aumenten. Si descubren en qué compartimento estoy metido, van a darme una paliza entre los seis, como la última vez. Trago el sándwich.

Cuelgo mi mochila blanca al hombro, acomodando mi pie en el dispensador, escalo levemente y asomo la cabeza para ver dónde están.

一¡No puedes huir, niñato!

-...Con esa complexión no llegará muy lejos.

Creo que puedo escuchar mi propio corazón nervioso. Cerrado los ojos con fuerza, me decido y salto desde arriba del compartimento. Caigo sobre mis tobillos, y como si mi vida dependiese de ello, corro a toda velocidad hacia la salida.

¡E-Eh! ¡Atrapadle, que no escape!

Corro con todas mis fuerzas, saliendo al pasillo. He elegido un bloque de academia que está completamente vacío, así que pedir ayuda no es una opción. Empiezan a seguirme como si fuesen perros de caza, pero no son lo suficientemente rápidos y me cuelo por el hueco de la valla principal, saliendo a la calle.

Nunca he sido muy fuerte, pero mi elasticidad está bastante desarollada.

Recupero la respiración, sintiendo cómo la lluvia me humedece el pelo rubio. Entonces, una lata de metal golpea mi tobillo y asustado, empiezo a acelerar el paso. Me la han tirado ellos.

一¡Eso, eso! ¡Huye cobarde! ¡Es lo único que sabes hacer bien!

۞ ۞ ۞

¡Nada, no hay rastro de nada! Es como si Jungkook, la ouija, las velas y la cuchilla hubiesen desaparecido. ¿Fué un sueño? No puedo creérmelo del todo. He mirado bajo de mi cama, en mi armario, entre las cortinas de mi ventana, y nada. No hay rastro de nada.

Young God ↠KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora