❝Encontré al demonio. Le encontré en un amante.❞
Jimin es un chico de 17 años con ansiedad social, de aspecto pálido y enfermo, que nunca ha creído en lo sobrenatural. Los días pasan sobre él sin relevancia alguna, hasta que una mañana escucha sobre...
❝El ritual Huinsagma es peligroso, y nunca ha de hacerse estando en soledad. Para invocar al demonio blanco, sólo se necesitan una ouija y una gota de sangre de aquél que desea invocar al mal ❞
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Juego con el lápiz sobre mi libreta. Hago líneas de un lado al otro de la hoja; no estoy prestando atención a nada de lo que el profesor nos dice. Hoy es un día gris, como todos los días en esta pequeña ciudad. Hoseok, mi único amigo de verdad, apoya la mano en mi hombro y le miro con desgana.
—¿Estás bien? ...No me digas que has vuelto a pasarte toda la noche leyendo.
Asiento. Mi voz suena rota cuando le respondo.
—...No he dormido, estoy sobreviviendo a base de cafés.
Él pone los ojos en blanco y luego sonríe, como si se apiadase de mí. Nunca me gustó dar lástima. Y menos a él.
—Anoche intenté hacer el ritual ese que es tan famoso últimamente, el Huinsagma . Lo intenté con Yoongi pero no pasó nada... —Me susurra para que no nos escuchen. Alzo las cejas, incrédulo.
—Claro que no pasó nada ¿Qué te esperabas?...Esas cosas no son reales.
Él se me queda mirando, como si analizase mis palabras.
—Eres un chico estrellado, Jimin, sólo hay que mirarte las ojeras y tu piel sin color —Me responde él, ignorando lo que acabo de decirle mientras me aprieta una mejilla, probablemente mi parte del cuerpo con más carne— Si lo intentas, quizás tengas suerte.
No tengo cara de muerto... es sólo que no duermo mucho ¡Eso es todo! Me molesta que Hoseok se regocije de mi ansiedad social. Dejo caer el lápiz sobre la libreta tras apartar su mano de mi rostro.
—Tonterías.
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Appa y omma siempre están peleando. Me encierro en mi habitación, cansado de escucharlos gritarse, las cenas así me sientan mal. Sé que aunque intente ayudar a omma, sólo me llevaré una bofetada. Por suerte, ahora ambos duermen.
Aseguro mi puerta, poniendo mi mochila delante. Me visto con mi gran camiseta blanca, me pongo unos bóxers cualquiera y dejo caer mi cuerpo sobre la cama. Cierro los ojos, pensando en las horas de sueño que voy a regalarme, cuando lo que Hoseok me dijo hace escasas horas vuelve a mi mente. Sí, he leído sobre el ritual... Una vez, cuando éramos niños, Taehyung y yo hicimos una ouija juntos, y él estuvo sin dormir un mes entero. Me pidió de rodillas que yo me quedase... el tablero... Abro los ojos y miro hacia la estantería delante mía. Efectivamente, el tablero sigue allí. Pero yo no creo en esas cosas...
Me quedo en silencio, mirándola allí arriba.
..."A la mierda"
Tomo una silla, la pongo sobre el estante y me subo a ella. No soy tan alto como para llegar a la cima, así que me apoyo sobre las puntas de mis pies y estiro las manos. La tomo, y busco con mi otra mano unas velas viejas. Cuando consigo atraparlas, me tambaleo sobre la silla y caigo al suelo con un golpe seco.
—O-Ouch... V-Vale... Necesito velas y...-
Me paso las manos por el cabello rubio; luego miro hacia mi mesita de noche. Sin dudarlo, gateo hasta ella, arrastrando las rodillas por el suelo, y del pequeño cajón saco una cuchilla que guardaba entre dos libros; (también un mechero). Me siento sobre mis muslos y compruebo que está afilada. Sí.
Lo pongo todo en el suelo, acomodando el tablón, las velas en las esquinas y tras apagar las luces, corto la yema de mi dedo índice con un suspiro dolorido. "Quizás me he pasado" pienso, mordiéndome el labio cuando veo un hilo de sangre resbalar por el mismo.
Enciendo las velas con mi mano sana, apoyo el dedo herido sobre el tablón y me preparo para hablar con un hilo de voz, intentando no despertar a mis padres.
—...Huinsagma, te pido que bajes a la tierra y te doblegues ante mi presencia humana.
Mi respiración se corta, expectante de qué va a ocurrir. Pasan los minutos, o quizás toda una hora. Entonces, cuando pienso que es hora de rendirse, una brisa fría recorre mi nuca y me giro asustado, separando mi dedo de la ouija. Tras ver que no hay nada, las velas se apagan solas y yo suelto un grito ahogado sumiéndome en la oscuridad, arrastrándome hacia la pared. Mierda, mierda mierda...
Choco contra algo duro, pero la habitación apenas es iluminada por la luz de luna que asoma en mi ventana. No veo casi nada.
—¡A-AH!
Una mano grande ahoga mis gritos, cubriéndome los labios y yo la rodeo con mi mano herida, manchándonos a ambos de sangre.
Está extremadamente fría.
Respiro asustado contra su mano; quiero gritar, correr, esconderme. Siento que me ahogo, que quizás es un delirio por mis horas de insomnio; cuando escucho una risa rota en mi nuca, que hace que la piel se me erice y mi corazón duela.
—...Tranquilo, corderito.
P R Ó X I M A M E N T E
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Hi♡ He aquí el primer y corto episodio de Young God, como prueba para ver qué opináis.
También, este es mi primer fanfic principalmente lemon así que disculpad si no es "la gran cosa" ㅠㅠ de todos modos, nos vemos pronto♡
Gracias por leer
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