EL DESASTRE DE MI VIDA | Kai y tu | 🔞

Capitulo 5

Aquellos pasos se dirigían hacia donde estabamos nosotros y nos iba a encontrar en una situación bastante embarazosa. De repente se escuchaban las llaves de la persona que estaba atrás de la puerta y fue ahí cuando JongIn accionó y me agarró de la muñeca fuertemente. Acto seguido  abrió las puertas de un gran armario empotrado donde guardabamos todos los materiales de la clase y nos metimos dentro; era bastante estrecho.

Escuché que la puerta se abrió y una calor invadió mi cuerpo, estaba poniendome bastante nerviosa. Estaba tan sumerguida pensando que ni siquiera me había dado cuenta de que JongIn estaba demasiado pegado hacia mi, casi estabamos abrazados a causa de la falta de espacio.

-¿No te parece muy erótico estar así conmigo?- susurró.

-¡Cállate!- le contesté en voz muy baja.

JongIn logró inmovilizarme más de lo que ya estaba, pasó sus manos por mi espalda desde arriba hasta abajo pero paró antes de tocar mis gluteos. Si me movía causaría ruido por culpa de las cosas que estaban ahí dentro, y encima estaba totalmente oscuro. Se acercó a mi cuello y comenzó a besarlo, subió hasta llegar a mi oreja, mordiendola delicadamente antes de recibir suaves besos sobre la zona.

-Bien, todo está en orden en este aula, podemos irnos ya- dijo la persona que había entrado. Por lo visto estaba acompañado de otra persona.

-¡Espere! Se olvida de cerrar los armarios!- dijo la otra persona.

-¡Oh! Es cierto... gracias.

JongIn se detuvo cuando estaban cerrando el armario. Mientras aquellas personas se iban JongIn volvió a sus andadas y se atrevió a tocar mi culo, además de deslizar sus dedos por mi intimidad. Cerré todavía más mis piernas pero fue inútil. Se acercó a mis labios y susurró: "No será el último".
Acto seguido unió sus gruesos labios con los míos y comenzó a moverlos lentamente, dejó de tocarme pero subió mis piernas forzosamente y las colocó en su cintura, no tuve otro remedio que rodearlo porque si no caería al suelo y me haría mucho daño.

-¡Joder! ¡Estamos en un puto armario! ¿¡Por qué no calmas tus impulsos hormonales con otras chicas!? ¡Folla con ellas! ¡Se mueren por ti!

-Lo sé, pero tu no.

No pude decir nada más, volvió a besarme pero ésta vez era más descarado, me besaba con más intensidad y de nuevo comenzó a frotar sus dedos por mi intimidad. En el momento que mi cuerpo no estaba en tensión pude notar como me estaba excitando y él se dio cuenta perfectamente así que aprovechó para mover sus dedos con más velocidad y con movimientos circulares. Apreté mis piernas y no pude evitar soltar un suspiro en su boca.
Él sonrió. Minutos más tarde comenzé a notar una pequeña presión en el abdomen, acompañado de un cosquilleo. No pude aguantar más, sentí el puto deseo, las ansisas, el éxtasis; tanto fue así que gemí leve e inconscientemente. Necesitaba recapacitar de lo que acababa de ocurrir, acababa de ser masturbada en el armario de clases. El mayor, en cambio, paró de besarme y de tocarme, esperando alguna que otra respuesta.

JongIn me bajó una vez se me había pasado la sensación. De repente todo lo que acababa de pasar invadió mi mente de una forma muy rápida.

-¿Cómo planeas salir de aquí?- dije aquello sin mirarle y con la entonación más correcta posible.

-Tengo las llaves de esta aula, las cogí esta mañana.

Después de salir del armario y de la clase anduvimos por los pasillos, estaban a punto de cerrar la puerta principal pero los encargados de hacer aquello nos vió y nos dejó salir. Recibimos una regañina pero al menos conseguí salir. Ninguno hablabamos hasta que fue la hora de despedirse.

-Hasta pronto- dijo JongIn sonriente.

-Voy a dejar de ser la delegada, no me siento cómoda estando a tu lado después de todo.

Jongin no dijo nada. Si consiguió masturbarme en un puto armario, no quería saber lo que podría hacer en la dichosa excursión.