Mi famoso amante

El hombre que amo y el hombre que amé

Cuando desperté, Ji Yong aún me tenía abrazada protectoramente contra su pecho. Regresé a ver su rostro. Era tierno y muy sensual a la vez. Sin duda Ji Yong podría ser un actor, idol o modelo si lo quisiera <preguntar en qué trabaja> anoté mentalmente. Ji Yong sabía mucho más de mi vida, que yo de la suya y mentiría si dijera que no quiero conocer todo de él.

Sus labios eran perfectos y no dudé ni un segundo en besarlos. Sus brazos se envolvieron aún más alrededor de mi cintura y profundizó el beso. Lo había despertado.

-¡Me gustaría despertar siempre así! – dijo él cuando el beso terminó <Yo igual> pensé pero no se lo dije solo le sonreí.

-¿Tienes algo que hacer hoy? – pregunté. No quería irme pero si él tenía planes tendría que encontrar algo que hacer para no regresar pronto a mi casa. Aún no quería ver a Phil.

-Mmm S...sí – dudó – pero nada que no se resuelva con una llamada telefónica – sonrió de vuelta.

-No quiero que canceles tus planes...

-Liz ya te dije que no es nada – golpeó levemente mi nariz – ya lo soluciono – se levantó de la cama y lo aprecié mientras caminaba al baño con su celular en la oreja.

Había dejado la puerta abierta y la curiosidad me ganó así que me cubrí con una sábana y fui hasta el baño muy silenciosamente para escuchar lo que decía.

-Cúbreme Tae por favor... lo sé – pegué mi oído a la puerta – no sé... di que estoy enfermo... no... no puedo ir... sí, es por ella... ayer pasó algo que... bueno... no quiero dejarla sola por ahora... no quiero que me molesten por hoy – hubo un silencio – lo sé... no, no se lo he dicho aún... pronto... lo prometo... entiéndeme Tae no es fácil para mí tampoco – me pegué un poco más a la puerta y en mi descuido hice que esta se abriera e hiciera ruido. El me regresó a ver rápidamente y se puso nervioso – Tae hablamos luego... gracias – y cortó la llamada.

-Lo siento. Quería ocupar el baño – dije muy bajito en modo de disculpa.

-No hay problema – dijo permitiéndome la entrada.

-¿Está todo bien? – me aventuré a preguntarle.

-Sí, nada de qué preocuparse – me dio un beso en la frente y salió cerrando la puerta.

Me quedé sola dándole vuelta a lo que había escuchado. Obviamente con quien hablaba sabía de mí pero ¿Qué tanto sabía? ¿Quién era Tae? Además también era obvio que Ji Yong me ocultaba algo ¿Qué estaba ocultándome?

Mi mente venían una y mil posibilidades. Tal vez él tenía a alguien más y de alguna manera eso me ponía triste. Me miré al espejo y era un caos. Mis golpes se veían mal, estaba despeinada, en una palabra, estaba completamente horrenda. Y si JI Yong tenía a alguien más, seguramente sería mucho más hermosa que yo. Traté de arreglarme un poco pero todo fue en vano. Sin maquillaje no podía hacer nada. Resignada salí del baño para encontrarme con un alegre Ji Yong.

-¿Qué pasa Liz? – dijo apenas salí del baño.

-Nada – dije suspirando. De pronto ya no tenía ganas de estar ahí. Agaché mi cabeza.

-Hey – caminó hasta mí para sujetar mi mentón – entonces porque esa carita – me miró a los ojos.

-Ji...Ji Yong ¿tienes a alguien más? – Solté de golpe esa pregunta pero él me miró sin comprender – ¿Tienes novia, esposa o algo así? – mi voz era muy apagada y juraba que en cualquier momento empezaría a sollozar.

-¿Eso es lo que te preocupa? – dijo riendo. Yo al borde del llanto y el riendo. Yo asentí pero ahora un poco molesta – Tu eres la única – me mostró una sonrisa que detuvo mi corazón pero aún no estaba del todo convencida aunque podía respirar con mayor tranquilidad.