Mi famoso amante

Concierto

Sentía pequeñas cosquillas en mi nariz. Fruncí mi ceño y traté de quitar lo que sea que estaba produciendo esa sensación con mi mano y nada. No quería abrir mis ojos, me encontraba tan a gusto. Otra vez un leve roce en mi nariz pero esto estuvo acompañado de una pequeña risita. Abrí mis ojos para encontrarme con aquellos pozos avellana que me contemplaban y esa endemoniada sonrisa que tanto me fascinaba.

-Buenos días nena – dijo Ji Yong dándome un dulce beso en mi nariz – lo siento si te desperté pero quería despedirme antes de irme.

-¿Te vas? – mi voz aun sonaba más grave de lo que era por mi despertar y sin querer bostecé.

-Lo siento nena pero hoy es el concierto y por más que quisiera quedarme en esta cama contigo sin dudas medio mundo vendría a sacarme de aquí...

-Entiendo – interrumpí – todo va ir genial – dije dándole un beso – hazlo que mejor sabes hacer – Ji Yong alzó una ceja como manera interrogativa sobre lo que había dicho – deslumbrar a la gente. Hoy noche vas a deslumbrar a todos – el rió y me abrazó fuertemente.

-Tienes que venir – yo me separé rápidamente de él – No veas así, ya estuviste una vez en nuestro concierto.

-Lo sé pero supongo que las entradas están agotadas... - hubiera querido ir pero con la fama que tenía el grupo de Ji supongo que sería casi imposible conseguir una entrada.

-Nena, irás conmigo

-Ji tengo que trabajar y...

-Mandaré a un carro por ti y de tu trabajo iras directamente al lugar del concierto. Ya estuviste antes en primera fila ahora estarás tras bambalinas - no sabía cómo reaccionar. Seguramente si Mina estuviera aquí gritaría como loca y saltaría de lado a lado por la felicidad, yo simplemente abracé a Ji Yong.

-No crees que causaré problemas – dije susurrando.

-Créeme los chicos estarán encantados de tenerte ahí, quieren conocerte – no sé pero rió.

-Y supongo que no di una buena impresión ayer – escondí mi rostro aún más en el pecho de Ji. Ahora que lo veía de otra manera, estaba muy avergonzada por mi actitud.

-Pues tendrás la oportunidad de redimirte

-¡YA! – Grité golpeando mi mano con su pecho pero a manera de juego.

El celular de Ji Yong sonaba como loco en donde estuviera. La ha itación era todo un caos. Ji Yong desnudo se levantó en busca de su ropa y no pude deleitarme con la vista de su redondo y jugoso trasero al aire que se paseaba de un lugar a otro. Además esos tatuajes hacían que mi cuerpo estallara en llamas.

-Ya voy para allá – le escuche decir antes de colgar la llamada – Mmm nena si sigues viéndome de esa manera no voy a poder salir de aquí.

-¿Cómo? – pregunte inocentemente.

-Me miras como si fuera un trozo de carne en exhibición, un rico lomo de ternera. Te estas lamiendo los labios y tu mirada esta obscura por el deseo – gruño – y no sabes lo mucho que me excita – aquello era evidente porque su miembro estaba empezando a ponerse duro.

-¿Tienes que irte ya? – me mordí el labio.

-¡DIABLOS! No creo que no puedan esperarme 10 minutos más. Al fin y acabo soy su líder – se arrojó en la cama para empezar a besarme de una manera demencial.

Veinte minutos después estábamos saliendo por la puerta de mi habitación. En el ascensor aprovechamos un poco más para besarnos y finalmente en el lobby nos despedimos. Lo vi correr hasta subirse en la gran camioneta negra.