Nacida de los Ángeles

Cosas de familia

Unos golpazos desde el pasillo hicieron despertar de golpe a Kaily, se levantó con Heosphoros en la mano y salió con el top y los shorts grises del pijama. Isabelle estaba dando golpes a una olla vacía con un cazo, Sam y Max salieron también, en calzoncillos.
-¿Se puede saber qué haces?-preguntó Kaily finalmente.
-La encanta despertar a la gente así-dijo Max.
-Hay un mecanismo más sencillo. Se llama llamar a la puerta-dijo la morena pequeña en tono sarcástico.
-¿ Y perderme veros así?- dijo Isabelle riendo- ni hablar.
-¿Por qué nos has despertado?-intervino Sam.
-Pronto llegará la Clave, tenéis que prepararos.Además, te traía tu vestido- lo cogió de una mesa del pasillo donde estaba- toma.
-Gracias.
-Ejem- interrumpió Sam mirando a la Morgenstern.
-¡Venga! No creo que os quieran ver en calzoncillos o bragas.- dijo Isabelle.
-Son shorts- la contradijo Kaily.
- Pues te quedan como bragas- y se fue. Kaily se volvió a meter a su cuarto, dejó el vestido en el armario y se duchó. Al salir se secó el pelo, dejando su cabello castaño ondulado, se puso el vestido y sacó del armario unos tacones rojos

La chica alucinaba con los zapatos que la dejó Isabelle, ninguno era de menos de 15 cm. Se echó un poco de rímel y salió, cuando salió ella, la puerta de Sam se abrió y salieron él y Max, ambos con trajes rojos, camisa blanca, Sam con corbata negra y Max con pajarita negra. Se la quedaron mirando.
- Hola- dijo finalmente ella.Una especie de timbre sonó.
- Ya han llegado- dijo Max.
-Desde mi ventana se ve. Vamos- dijo Sam, él y Max se volvieron a meter y Kaily los siguió andando por detrás. En el jardín de la entrada del Instituto iban apareciendo cazadores vestidos de rojo mediante un portal verdoso. Entre ellos Kaily distinguió,a pesar de la distancia, a una mujer de pelo castaño con camisa y falda rojas. Sabía quien era perfectamente.
- Mamá- susurró sorprendida.Los chicos la miraron confusos, entonces ella salió corriendo lo más rápido que pudo con los tacones, Sam y Max la siguieron. Se metieron rápidamente en el ascensor para bajar.
-¿Estás segura de que era tu madre?- preguntó Max.
- La sé distinguir perfectamente, Max.- El ascensor se abrió y los tres salieron, se quedaron un momento parados, los mayores los miraban curiosos. De entre la multitud aparecieron Jace y Clary.
- ¿ Y mamá? La he visto- dijo inmediatamente la morena.
- Con el resto de padres en la biblioteca- al oír eso Kaily se volvió y se metió al ascensor, los otros cuatro la siguieron.
- ¿Por qué no me dijistes que ella también venía? - preguntó enfadada.
- Se me olvidó.
- Es mi madre, podrías haberte acordado.- el ascensor se fue abriendo , Kaily salió entre el pequeño hueco que se había abierto y se fue andando a paso rápido. El resto la siguió más por atrás, llegó a la puerta de la biblioteca y entró sin llamar, mientras bajaba las escaleras para llegar junto a los adultos, la llamó.
- Mamá- Charlotte se giró y corrió para fundirse en un abrazo con su hija.
-Mi niña- la susurró al oído.-¿Estás bien?- la pequeña asintió.
-¿Dónde has estado?
-En Idris, con la Clave.
-¿Por qué? Me dejaste sola aquí.
-Lo sé, pero tenía que hablar con ellos, además, aquí estaba Jace..
-Esa es otra. Un hermano mayor. Me has ocultado demasiadas cosas, mamá.
-Ha sido por tu bien.- Jace se acercó a ellas.
-Oye, Kaily, te ocultamos todos del mundo de las sombras por tu bien, si no lo hubiéramos hecho, probablemente estuvieras con Valentine en vez de aquí.
Antes de poder reprocharle nada Kaily, la puerta se abrió y apareció por ella una mujer asiática. Bajó y se puso frente a todo el mundo.
-¿Cómo estás, Jia?- se acercaron Maryse y Robert a saludarla.
-¿Quién es?- le preguntó Kaily a Jace.
- La Cónsul.- la asiática se acercó a Kaily, que estaba junto a Jace y Charlotte.
-Kaily Rose Morgenstern- dijo ella- por fin aquí. Nos hiciste una buena a los cazadores.
- Ella no hizo nada.- la defendió Michael Wayland.
-Por su culpa estamos como estamos.- volvió a decir Jia.
-No te equivoques, Jia- dijo Jocelyn- fue su padre, no la tomes con la muchacha.
-Quizás si no hubiera nacido, ahora cada uno estuviera viviendo su vida tranquilamente.-a Kaily se le hizo un nudo en la garganta, iba a aguantar, no iba a llorar.
-No te permito que hables así de mi hija- dijo inmediatamente Charlotte.
-Es la verdad.Te hubiera ahorrado muchos problemas no haberla tenido- a Kaily se le escapó una lágrima y salió corriendo de la biblioteca bajo la mirada de todos.
-¡Kaily!- la llamó Max. El joven Lightwood salió corriendo de allí en su busca.
-¿Cómo eres capaz de decir eso delante de ella?- preguntó furioso Jace.
-Debería ser más fuerte, es una cazadora de sombras.
-Desde hace tres días- intervino Alec.
-No la puedes hablar así- le apoyó Isabelle.
-Soy la Cónsul, os aseguro que puedo. Y ahora necesito que vuelva, tiene que testificar ante la Espada Mortal.
-Estás loca si crees que ahora volverá- dijo Clary saliendo, la siguieron los hijos de los Lightwood, Sam y Jace.

Mientras en el pasillo

-¡Kaily, espera!
-¡ Ahora no, Max!- dijo llorando. Max la alcanzó y la giró para que lo mirara.
- No la hagas caso, esta flipada desde que consiguió el cargo.
-Pero es verdad, todo. Si no hubiera nacido no estaríais en guerra.
- Quizás la hubiera habido igualmente.
-Yo no valgo para esto, Max.-volvió a llorar, Max la rodeó con los brazos y la abrazó.Kaily apoyó su cabeza en el pecho del muchacho, quedándose así un rato.
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Hey! Noveno cap. Hasta la próxima mundis➰