Capítulo Diecisiete

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¿Esto es lo que quería? Dejarlo libre. He dejado que el fantasma al que se me fue encargado matar salga de su prisión. Él camina suavemente a través de su porche, tocándose los pies en cada paso, mirando fijamente a la oscuridad. Él es como cualquier animal salvaje fuera de una jaula: cauteloso y observador. Las puntas de sus pies trazan la madera del torcido barandal como si fuese la cosa más maravillosa que alguna vez sintió. Y parte de mí está contento. Parte de mí sabe que él nunca mereció nada de lo que le ocurrió, y yo quiero darle más que este arruinado porche. Quiero darle toda una vida... regresarle toda su vida, empezando por esta noche.

Otra parte de mí sabe que hay cuerpos en su sótano, almas que él robó, y nada de esto fue su culpa tampoco. No le puedo devolver a Stiles su vida porque su vida ya se terminó. Tal vez he cometido un enorme error.

―Creo que deberíamos salir de aquí―dice Scott quedamente.

Miro a Lydia y ella asiente, así que camino hacia la puerta, tratando de mantenerme entre ellos y Stiles, aunque sin mi cuchillo no sé qué tan útil puedo ser. Cuando él nos escucha ir directo hacia la puerta, se da la vuelta y me aprecia con una ceja arqueada.

―Está bien― él dice. ―No los lastimaré ahora.

―¿Estás seguro?― Pregunto.

Sus ojos van hacia Lydia. Él asiente. ―Estoy seguro.― Detrás de mí, Lydia y Scott exhalan y torpemente se apartan de mi sombra.

―¿Estás bien?― Pregunto.

Él piensa por un momento, tratando de encontrar las palabras correctas. ―Me siento... cuerdo. ¿Es posible eso?

―Probablemente no por completo― Scott barbulla, y lo codeo en las costillas. Pero Stiles se ríe.

―Tú lo salvaste, la primera vez― él dice, mirando a Scott cuidadosamente. ―Te recuerdo. Tú lo sacaste.

―De cualquier manera no creo que lo hubieses matado― Scott contesta, pero un poco de color sube a sus mejillas. A él le gusta la idea de jugar al héroe. A él le gusta que la idea esté siendo señalada delante de Lydia.

―¿Por qué no lo hiciste?― Lydia pregunta. ―¿Por qué no ibas a matar a Derek? ¿Qué te hizo escoger a Jackson en vez de él?

―Jackson ― Stiles dice suavemente. ―No lo sé. Tal vez era porque ellos eran malvados. Sabía que ellos lo habían engañado. Sabía que fueron crueles. Tal vez sentí... lástima por él.

Bufo. ―¿Lástima por mí? Yo podía haber manejado a esos tipos.

―Te golpearon por detrás de la cabeza con un tablón de mi casa.― Stiles me vuelve a mirar con su ceja levantada.

―Sigues diciendo 'tal vez'― Scott suelta. ―¿No lo sabes con seguridad?

―No― Stiles responde.―No con seguridad. Pero me alegra― él agrega, y sonríe. A él le gustaría decir más, pero aparta la mirada, avergonzado o confundido, no puedo decir cuál.

―Deberíamos irnos― digo.―Ese hechizo sacó bastante de nosotros. Todos podríamos necesitar algo de sueño.

―¿Pero regresarás?― Stiles me pregunta, como si pensara que nunca me volverá a ver.

Asiento. Regresaré. Para hacer qué, no lo sé. Sé que no puedo dejar que Danny se quede con mi cuchillo, y no estoy seguro de si él está a salvo mientras él todavía lo tenga. Pero eso es estúpido, porque ¿quién dice que él está a salvo si yo también lo tengo? Necesito dormir un poco. Necesito recuperar, reagrupar, y repensar todo.

―Si no estoy en la casa― Stiles dice, ―llámame. No estaré lejos."

La idea de que él esté corriendo por Thunder Bay no me emociona. No sé de lo que es capaz, y los susurros desconfiados que me llegan de cada lado, dicen que sólo he sido embaucado. Pero no hay nada que pueda hacer sobre eso ahora mismo.

El Chico Vestido De Sangre - Sterek (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora