___ jamás olvido que sus padres eran estupendos, y durante ese fin de semana, se mimo con el complaciente amor que ellos le brindaban. En los últimos siete meses no los visito con frecuencia porque el ambiente familiar le recordaba todo lo que intento borrar de su memoria cuando se mudo a Argentina, para alejarse de todo recuerdo de Lilly... y de Andrew.
Pero al volver sola de Canadá, necesitaba descansar y la calidez del hogar la atrajo como jamás. ¡Que diferente era la silenciosa tranquilidad de su familia comparada con los bulliciosos Bieber Mallete; ninguna era preferible, aunque eran distintas!
Ella también se sentía extraña en comparación con la última vez que vino. La estancia en Canadá, en compañía de Justin, la había cambiado. No entendía por qué, pero ya no sentía el impulso de huir de las cosas desagradables. Incluso aprendió a soportar más de una pena a la vez, más de un trauma al mismo tiempo.
Un día que salió de compras con su madre, cuando todavía ignoraba que futuro tendría con Justin, se topo con Andrew.
Noto la angustia en el rostro de su madre, que quiso disculparse, la chica, por propia iniciativa, invito a Andrew a que la acompañara a tomar un café. El titubeo un momento, antes de aceptar.
Era la primera ocasión que ___ veía a Andrew después de un año, pero luego de la torpeza inicial, hablaron abiertamente. Al terminar, ___ sintió como si uno de los fantasmas de su pasado por fin quedara enterrado y se reunió con su madre.
Regreso a Argentina decidida a aceptar la propuesta de Justin.
El se quedo con su familia el fin de semana; ___ había insistido en que sería mejor que volviera sola porque se sentía como intrusa en un asunto privado de familia.
Estaba segura de que Justin le informaría su decisión y planes futuros cuando estuviera listo para decírselo.
El lunes por la mañana, cuando ella llego a la oficina, el no estaba y ella no sabía si ya había vuelto. Comenzó a clasificar la correspondencia y supuso que Justin se presentaría mas tarde.
-¿Cómo te bronceaste tanto si fuiste a trabajar?
Ella le sonrió a Nicholas cuando el entro en la oficina, vestido como siempre de pantalón vaquero desteñido y camisa abierta.
-No fue únicamente trabajo –explico al recordar las escasas obligaciones que realizo en Canadá.
-¿No?-Nicholas se sentó en el borde del escritorio y le examino los ojos-No es posible que Justin haya cometido lo imperdonable y me robara a mi chica-hablo muy serio.
Ella no hubiera dicho "robado" porque siempre le perteneció a Justin. Pero se ruborizo antes de desviar la mirada.
-¿A cuántas modelos invitaste a salir en mi ausencia?-pregunto.
-Una o dos-confirmo-Pero no cambies el tema.
-No me di cuenta-siguió atenta a las cartas acumuladas.
-Te diste cuenta-respondió despacio-___, ¿Qué sucedió en?...-le levanto la cabeza tomándola por la barbilla de ella-¿Qué sucedió allá?
-¡Cuando terminen de mirarse a los ojos, quizá podamos realizar un poco de trabajo!-exclamo la conocida voz de Justin. ___ no lo imaginaba como amante cuando usaba ese tono de voz.
Preocupada, ella se volvió hacia Justin porque se imagino el cuadro que él vio al entrar. Estaba furioso, tenía las líneas de tensión más marcadas y parecía que el encontrarlos así sería el acabose después de todo lo que tuvo que soportar.
Pero, como de costumbre, Nicholas permaneció imperturbable.
-¿Me creerías si te digo que verificaba que ___ llevara los lentes de contacto puestos?-pregunto en tono burlón.
ESTÁS LEYENDO
~Who Said I Dont Love You? [Justin Bieber & ___]~
Fanfiction___ Amaba a Justin Drew Bieber Mallete, su dinámico jefe, pero el parecía no advertir la presencia de ella. Mas llego el día en que el necesito la ayuda de ___ en una situación un poco extraña, que iba más allá del cumplimiento de las obligaciones...