-mmm...no sé si estoy preparada.
-Como quieras, pero si quieres aclarar cualquier cosa, no te quedes con nada dentro, suéltalo sin miedo, no pasa nada. ¿Vale?-me da tanta seguridad.
-Me lo he pasado bien contigo, y me gustas -y eso que no he bebido- pero tengo pánico que todo sea un sueño, que mañana no me mires y pases de mí, o que te aburras de esto, ni siquiera sé que es esto que tenemos, ¿qué somos Iker? Porque yo veo que es más que amistad, pero tampoco somos novios....¿entonces?
-ufff...para el carro...no hace falta ponerle nombre, ni etiqueta...somos lo que nos apetece ser en el momento en el que estamos...
-¿Cómo?
-Pues que si me apetece besarte te beso, y me encantaría poder hacerlo delante de todos, pero te conozco y sé que te morirías de la verguenza y pensando en qué explicaciones tienes que darles. En realidad, no tienes que dar explicaciones, tendrías que hacer lo que realmente sientes y no lo que esperan que hagas. A mi también me gustas, me atraes mucho y me encanta tu forma de ser, pero no me gusta que te resistas a lo que sientes por lo que piensan los demás. No lo entiendo.
-No es eso, bueno en parte sí, pero es que para arriesgarme a luchar por algo tengo que saber cual es el premio ¿no?
-Pues eso no lo sabemos ni tú, ni yo, ni nadie, aunque estuvieramos casados y con tres hijos no sabríamos si uno de los dos se puede enamorar de otra persona o si alguno dejará de sentirse atraido por el otro. Eso nada, ni nadie te lo va a asegurar, pero si sabemos que en este momento lo tenemos, nos gustamos, nos atraemos y queremos estar juntos, pues lo hacemos, y no hace falta decidir si estamos saliendo ahora.
-Pero ni siquiera nos conocemos, yo no sé si tu quieres tener hijos, qué quieres hacer con tu vida, ni estudias, ni trabajas, si eres de montaña o de playa...yo no sé que carrera estudiaré pero sé que quiero seguir estudiando.
-Bueno...yo sí que sé que tu eres más de playa, que quieres estudiar, casarte, hijos...pero es que no todos tenemos un plan de nuestras vidas, yo me dejo llevar y si me sale algún trabajo que me guste lo cogeré, y a lo mejor, dentro de un tiempo retomo los estudios, pero ahora mismo, me apetece vivir el momento, disfrutar de lo bonita que es la vida y sobretodo, conseguir convencerte de que lo probemos.
-¿Pero probar el qué?-subo el tono de voz sin querer. Y me da un beso en los labios, y luego en el cuello, mientras dice:
-No lo sé...-otro beso en el cuello- pero...-dos besos más en el cuello-¿quieres que siga?-un beso en la boca- ¿o paro?-me suelta y se separa, le agarro de la camiseta y lo acerco a mí y le beso yo en la boca, con ansía, con ganas, no puedo dejarlo ir, no quiero que pare. Seguimos besándonos un rato mientras vamos acercándonos a casa y cuando tengo los labios hinchados de tanto beso por fin me decido hablar:
-Bien, probemos, lo que sea que quieras probar. Que todavía no lo tengo claro, pero tienes razón quiero seguir con esto.
-Genial, no te arrepentiras, nena, ya lo verás, va a ser divertido.
-Lo que pasa que tengo una duda...
-Dime guapísima.
-¿Es exclusivo? No te lo estoy exigiendo-mentira quiero exclusividad más que respirar pero no puedo pedir nada más, al menos de momento- vamos, no puedo exigírtelo, pero no tengo claro los términos de esta amistad especial y eso nos puede ahorrar malentendidos.
-Si quieres firmamos un contrato y los vamos poniendo por puntos.-A mi no me hace gracía, me preocupa, no sé como reaccionaría si me entero de que ha estado con otra, y encima alguien de su edad que le dará cosas que yo todavía no estoy preparada...-Perdona, no sabía que te preocupada tanto el tema. Esto depende de nosotros, somos nosotros los que marcamos los limites, tanto entre nosotros, como con los demás. Nosotros decidimos como queremos que nos vean los demás como amigos, como algo más, si lo hacemos exclusivo o no...
-mmm...vale dime lo que tú quieres y yo te digo si estoy de acuerdo o no.
-Mira qué lista es mi niña...pero está bien...lo veo justo...Creo que deberíamos parecer solo amigos, de momento, sobretodo por tí, todavía no te ha dado tiempo a conocernos bien y estás saturada de información nueva, si Vane o Davinia saben que hay algo más entre nosotros te van a hacer la vida imposible. ¿Que te parece, amiga?
-Bien, bien, lo último que necesito es oir otro sermón de Davinia diciéndome lo golfo que eres.
- Era. Ahora quiero exlusividad.
-Eso todavía lo tienes que demostrar. ¿Entonces somos exlusivos?
-sí, si queremos que esto funcione, es lo mejor, ya se te está haciendo bastante complicado, así que te lo quiero poner fácil, nada de problemas, ni otras personas, solos tú, yo y un montón de diversión.
Y me lanzo a abrazarle, suena tan bien. Nos damos un beso tierno y me voy a casa muy feliz, pensando en el día siguiente cuando nos volvamos a ver y qué habrá pensado hacer.
Cuando estoy ya en la cama, mi móvil suena, un mensaje:
Buenas noches princesa, soy de playa, me gusta caminar por la arena descalzo, espero algún día ir contigo. Un morreo, que duermas bien
Yo también soy de playa, me encanta el ruido del agua, me relaja.
ESTÁS LEYENDO
PARECE QUE VA A LLOVER
RomanceSoy Nayara, una estudiante normal, una chica del montón que, sin comerlo ni beberlo he acabado estando en el centro del huracán. He crecido con mi mejor amigo y vecino, Igor nuestras familias también están muy unidas y dan por hecho que acabaremos s...