Flowers (Yaoi/Gay)

14: Claveles

—Yo sabía, lo sabía, por favor, era imposible ganar una nota por debajo del A— mencioné mientras Antonio me veía con una sonrisa y una ceja alzada.

—Llevas alardeando de nuestro perfecto A+ con el retrato que hicimos desde que salimos del la Universidad Tom, ya para—diji Antonio tratando de no reír.

—Perdón, es que merecía ese A+.

—¿Merecías?

—Es que merecíamos ese A+— volví a decir causando a Antonio reír otra vez.

Habiamos salido ya del recinto hace menos de cinco minutos, y nuestra ultima clase fue la del profesor Gunther quien, fascinado con nuestra obra, nos puso un A+ sin siquiera pensarlo y nos felicitó. En ese instante,como dicen, mi pecho se hinchó y no pude evitar alardear de ese A+ con Antonio desde que salimos.

Íbamos a mi casa ya que Antonio quería que le explicara la clase de Pintura italiana y de escultura, ya que no entendió la mitad de lo que el profesor explicó por estar en plena clase escribiéndole a su madre la cual se estaba quejando de que Antonio no había lavado su auto hace mas de un mes. Pero Antonio no lo usa mucho ya que le gusta caminar. Lo sé, Antonio es raro.

Llegando a la casa nos encontramos a la señora Poms, la tía de Antonio, quien estaba peseando a su gato... Sí, paseando a su gato...

—¡Tia Lili!—exclamó con felicidad el hombre al ver a si tía.

—Antonio, Tom, que alegría verlos ¿Llegando de la universidad?—la señora sonrió con felicidad.

—Sí, vine con Antonio a que me explicara una clase. Ya sabes, como Tom es el mejor—me dio unos codazos leves causándo una pequeña carcajada de mi parte.

—Me alegro tanto de que estudien, si siguen así les irá muy bien en la vida—La señora Poms acarició su gato sonriendo — y Tom, no te he visto, mis tartas están esperando una barriga a la cual alimentar.

—Me verá mañana a primera hora con un plato en mano Señora Poms—dije emocionado.

—Espera...¿ A él le das de tu tartas y a mi no? Yo soy tu sobrino—Antonio hizo un puchero gracioso haciéndonos reír.

—Le mando tartas a tu madre, pero pienso que Camilo se las come a tus espaldas.

—Maldito Camilo, sabía que debía ser hijo único, pero mi madre y padre se abstienen cuando se calientan, Dios...

—¿Camilo es tu hermano?—pregunté curioso.

Antonio asintió afirmando mi pregunta.

Después de un rato de estar fuera del edificio nos despedimos y entramos al lobby. Saludamos al conserje quien limpiaba las baldosas y agarramos el ascensor.

—Tengo hambre—mencionó Antonio después de unos segundos de haber entrado.

—¿Cuando no?— me reí al momento que las puertas se abrían.—Busca en la nevera algo.

Salimos del ascensor volteando, como.siempre, a la derecha. Vi una flor rosa y me emoción salió a flote. Caminé rápidamente, dejando atras a Antonio, y agarre la flore con un nota.

—Wow, que reacción tan rápida...—mencionó Antonio llegando a mi lado.

—Shhh...—le callé, saqué mis llaves y abrió la puerta entrando.

Antonio entro detras mío y cerro la puerta. Yo ajeno a todo, me senté y abrí la carta emocionado.

"Para Tom L."

"Eres esa persona que reina mis pensamientos,
cada día llenas ese vacío en mi mente, pero es que este amor que siento,
me tiene esclavo a ti y eso es lo que mi corazón siente,
el amor como calidad brisa latente y la pasión como llama ardiente y creciente..."

Con cariño
Un anónimo enamorado

-Aww... Que Lindo—Antonio es situado alado mio mirando también la carta. Lo miré mal.— ¿Qué? Solo dije algo bonito de la carta y el clavel...Últimamente me estas mirando así cada ve que comento algo de tus cartas. Calmate— se paró y se fue a la cocina.

Rodé los ojos y volví a mirar la flor.

“Un día te descubriré..."

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Clavel: "Soy tu esclavo". En el lenguaje de las flores, el clavel simboliza el descaro y significa: "cuidado, puedo desenamorarme de ti". El blanco, "mi amistad es fuerte y sincera, tu me inspiras sentimientos puros", el amarillo es desprecio, el rojo, "me provocas sentimientos pasionales", el rosa, "te amo de manera ardiente", el violeta, "me pareces antipática". el beige, "necesito reflexionar".