8: Azalea

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Y... ¿Cómo es tu hermano?— miré a Antonio atentamente mientras se comía un sándwich de atún.

Antonio me miró con un ceja alzada mientras masticaba y negó con la cabeza al tragar.

—Es...una persona— respondió con simpleza dando otro mordisco a su sándwich.

Wow, gracias por aclarmelo, juro que pensaba que era un gato— dije sarcástico haciendo un mueca de seriedad.

¿Para qué quieres saber de mi hermano...?...Espera... ¿No estarás...? Tom, no seas idiota— me miró serio y mi cara se tornó en la total confusión — Mi hermano no es ese supuesto anónimo tuyo, es un vago, y le da mas cuidado a las flores que a su vida, además, nunca lo he visto salir de casa, ese hombre es raro, no te hagas ilusiones, que su letra sea parecida no es que sea él.

Y así, señores, es como se destruyen las esperanzas.

Sorry, solo pensé que...— miré el suelo. Sentí que me acariciaban la espalda.

Si, si, tranquilo, pero cuando llegue el momento esa persona saldrá a la luz.— trató de darme ánimos.

— ¿Y si nunca llega el momento?

—Por favor, si tanto dice que te ama como me dices no tiene que estar escondido para siempre, si lo hace es un idiota. Bueno, idiota no, sería muy corto, pero tu me entiendes.

Sonreí un poco asintiendo. Antonio tenia razón, cuando llegara el momento esa persona aparecería, pero creo que mi desesperación es mas grande que mi paciencia... Si es que la tengo...

El timbre sonó dando la salida y el profesor Ludwood se despertó de disparo mirando a todos lados.

Eh... Chicos... Yo nunca me dormí y yo les di la clase de degradados profesionales de segundo nivel— cuando terminó de hablar agarró sus cosas y salió como alma que lleva el diablo del salón.

¿Ok?...— Antonio se termino su sándwich y yo me paré colocando mi mochila en el hombro.— Tom, tu ten paciencia, y repito, mi hermano es un vago de mierda, así que te lo digo ahora para no te hagas ideas raras.

Asentí y le sonreí ante de salir del salón casi igual que el profesor.

¿Que habrá hoy? En verdad, a este paso mi desesperación aumentará tanto que contrataré a un detective.

Llegué a mi edificio y saludé al conserje. Entré al elevador y esperé a que subiera con mi típico tic en el pie derecho.

Las puertas se abrieron y corrí hasta estar frente a mi puerta.

Sonreí y me agache agarrando la flor con la nota. La flor era una azalea, es una de mis favoritas gracias a que me causa tranquilidad verla...

Abrí la nota.

“Para Tom”

“La templanza que tienes hacia mucha cosas me fascina y me atraviesa el alma con una lanza.
Tu rostro me da tanta tranquilidad
que siento que cada vez que la veo
mis problemas se me olvidan con facilidad.
Mi hermoso Tom, eres la luz de mis días oscuros, ya que cada vez que te veo
mi corazón se llena de sentimientos tan puros...”

Con cariño
Un anónimo enamorado

Definitivamente siento que mi desesperación me controlará en estos momentos...

Azalea:  Templanza, alegría de amar.

⭐❤

Flowers (Yaoi/Gay) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora