Codigo Rojo 2

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Mire el reloj en mi muñeca una vez más y baje acompañado de mis hombres de la camioneta que abordábamos.
Era una zona rocosa y boscosa donde nos encontrábamos, caminamos unos metros más hasta colocarnos sobre la cima de una pequeña montaña.

- Binoculares - extendí mi mano hacia uno de mis acompañantes.
- Aquí tiene - los dejo sobre la palma de mi mano.

Los coloque frente a mis ojos logrando ver mucho más allá.
Tenia frente a mí una avioneta blanca en un almacén abandonado de la ciudad, hombres entraban y salían del almacén pero no era lo que me importaba. Si no la mujer en medio de todo eso.

- La encontré - le informe a mis hombres.

Llevaba un vestido rojo que le llegaba a la mitad del muslo, se veía hermosa. Ella sabía que yo estaría aquí, por eso vestía ese color.
Se burlaba de mi, ya que no había mas Código Rojo, nos había orillado a llamarlo Código Marshall. Ella tenía ojos en todos lados, había acabado con más de la mitad de mis planes y negocios desde el día que nos presentamos.

- ¿Colocaron las bombas en su lugar? - le pregunte al hombre calvo a mi lado.

La vi reír por algo que un chico que cargaba la avioneta había dicho, sentí los celos hervir en mi interior. Quien se cree esa mujer.

- Señor - la voz de uno de mis acompañantes me llamo.

Despegue mi rostro de los binoculares y me di la vuelta para encararlo pero no solo estaban mis hombres.
Un grupo de extraños, no tan extraños ya que la bandana roja delataba para quien trabajaban, nos rodeaban con el cañón de sus armas apuntando en nuestra dirección.

- ¿Código Marshall? - sonreí.
- De rodillas - dijo un hombre calvo con la bandana roja en su cabeza.
- ¿Saben cuánto pague por estos pantalones? - levante una ceja. Yo no me arrodillaba ante nadie.
- De rodillas y pon las malditas manos detrás de la cabeza - avanzo hacia mí con expresión molesta.

Por el rabillo del ojo pude ver a mis hombres sometidos por los hombres de ___. Que cobardes.

- Haz lo que te digo - grito y un poco de su saliva callo en mi rostro.
- Bill, recuerda las instrucciones - hablo alguien detrás del calvo.

Bill y yo sostuvimos miradas mientras yo sonreía arrogante.
Bajo lentamente el arma en mi dirección y soltó un gruñido.

- atenlo y súbanlo a la camioneta - me dirigió una mirada furiosa antes de subir a una camioneta junto a nosotros.

Camine hacia la camioneta rodeado de hombres de bandana roja mientras uno ataba mis manos, antes de subir cubrió mis ojos con un trozo de tela y me empujaron dentro.
No tenía ni un gramo de miedo por lo que pudiera pasar, al contrario.

- Vamos - la voz de Bill me tomo por sorpresa cuando la camioneta se detuvo.

De un empujón me bajo de la camioneta y me guio con la misma violencia hacia algún lugar.

- No creas que lo de hace rato se quedara así - murmuro detrás de mi antes de que el ruido de una puerta al ser abierta sonara.
- Tenlo por seguro - sonreí - ¿Muerte lenta o rápida? - le pregunte sonriendo más ampliamente.

Como respuesta obtuve un gruñido y un empujón que me hizo caer al suelo. Sentí mi mejilla arder al golpearme contra el suelo

- Lenta será - gruñí perdiendo la paciencia

Me tomo del brazo y de un tirón me puso de pie.

- Vuelve a ponerme una mano encima y vas a lamentarlo - gruñí cuando me obligo a sentarme en lo que supongo era una silla.

Una pequeña risita se escucho en algún lugar de la habitación seguida del taconeo de unos zapatos.

- Bill, ya puedes dejarnos solos - con un movimiento violento retiro lo que me cubría los ojos - Que gusto volver a verte, Styles - sonrió
- No es divertido este jueguito, ___ - le dije molesto.

Ella volvió a reír y se inclino un poco para que nuestros ojos quedaran a la misma altura.

- Mira lo que el idiota de Bill te hizo - llevo su mano a mi mejilla y paso su pulgar sobre el rasguño en esta.
- Suéltame - gire la cara alejándome de su tacto.

Tomo mi barbilla clavando sus uñas en mi piel y obligándome a mirarla. Batió esas pobladas pestañas que poseía y sonrió.

- No recuerdo que fuera tan cobarde en nuestro último encuentro, Sr Styles - su cálido aliento golpeaba mis labios.
- No tener el control hace que me ponga irritante - respondí con los ojos clavados en sus labios.

Esta mujer sabía muy bien que podía conseguir lo que quisiera de mí. Me volvía loco su simple forma de caminar y ella se aprovechaba de ser mi punto débil

- En eso nos parecemos - se enderezo y comenzó a caminar sin rumbo por el almacén - Y estos días he estado muy irritable, ¿Sabes por qué? - dijo dándome la espalda.
- ¿Por qué me deseas tanto como yo a ti? - levante una ceja

___ Marshall se giro de golpe en mi dirección y soltó una gran carcajada.

- Ese es tu problema, Styles - camino hacia mi moviendo sus caderas haciéndome babear - Mezclas el placer con el trabajo - negó y me acorralo en la silla donde yo estaba sentado - Pero yo no soy tu - susurro a solo centímetros de mis labios. - Por eso voy a matarme - sonrió con una pizca de malicia.

Una vez más se alejo de mi y camino hasta una pequeña mesa de metal donde tenía algunas armas.

- Contigo fuera de mi camino - paseo su mano sobre la mesa pensando, eligiendo - Voy a tener todo el control y dejare de estar irritable - detuvo su mano y tomo el arma.

Me había visto en esta situación muchas veces en todos mis años dentro de este negocio así que no temía ni un poco.

- ¿Matarme y perder la oportunidad de tener todo lo que deseas? Todo lo que deseas y algo extra. - camino en mi dirección y cruzo los brazos sobre su pecho.
- ¿A qué te refieres? - me miro con curiosidad
- tu y yo juntos podríamos hacer cosas mucho mas grandes - humedecí mis labios y sonreí.

No dijo ni una palabra, solo me miraba pensativa. Sonreí sabiendo que una vez más había burlado a la muerte.

- Bien - dijo unos segundos después - ¿Qué es eso extra de lo que hablas? - acomodo un mechón detrás de su oreja.
- A mi - le sonreí y me puse de pie.
- El placer y el trabajo no se mezclan - inclino un poco su cabeza hacia atrás para poder verme a los ojos.
- No estés tan segura - di un paso más hacia ella pero de un empujón me regreso a la silla.

Nos sonreímos mutuamente sabiendo lo que pasaría, se sentó en mi regazo y enredo sus finos dedos en los cortos rizos de mi cabello.

- Ya no mas códigos rojos - susurre sintiendo nuestras respiraciones mezclarse
- No estés tan seguro de eso - respondió y luego me beso.

Hola! Una vez más soy yo, ¿Como han estado? Yo muy bien. Les tengo una noticia...

Chicas, he decidido terminar con este libro de imaginas, ya no me siento yo y no creo estarles dando la calidad de antes y odio dejar pasar los sábados sin subir nada, siento que les fallo así que hoy decidí dar por terminado este libro y despedirme de ustedes (temporalmente) se que volveré, siempre vuelvo jajaja. Tal vez haga un segundo libro de imaginas o un fanfic, aun estoy trabajando en eso :)
En fin, muchas gracias por sus votos, comentarios, y claro, por leer mis tonterías.
Si algún día necesitan hablar con alguien, un consejo, lo que sea, pueden mandarme un mensaje. Ahí estaré.

Muchos muchos besos!!!

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⏰ Última actualización: Jun 04, 2017 ⏰

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