Imperio (Camren)

Dulce reconciliación

Un nuevo día las sorprendió unidas piel con piel, Lauren fue la primera en abrir los ojos, aun no creía lo afortunada que era de tener en su cama a esa maravillosa mujer, la beso muy suavemente para no despertarla, mientras la contemplaba embelesada.

"Lauren mi amor" dijo la morena en voz muy baja, "Aquí estoy contigo mi vida" respondió amorosamente mientras le besaba cariñosamente el hombro, entonces la mujer de bellos ojos color marrón sonrío convencida de que eso no era un sueño sino una hermosa realidad, estaba en la guarida del dragón, en su cama; abrió lentamente los ojos para encontrarse con dos esmeraldas viéndola fijamente, aun adormilada dijo: "Mi bello dragón", Lauren se sorprendió: "¿Dragón?", Camila le acaricio el rostro: "Tu eres mi bello dragón de ojos verdes".

Lauren rió por la comparación: "Pues supongo que eso de ser un dragón ha de tener sus ventajas"

Camila asintió con la cabeza y dijo pícaramente: "Así es, y una de estas ventajas es que siempre habrá fuego en nuestra cama".

Y tenía razón el fuego de la pasión no tardo en encenderse, en pocos instantes ambas estaban devorándose a besos.

"Me vuelves absolutamente loca" dijo Lauren hundida en el cuello de Camila, al tiempo que aspiraba el aroma de su cabello.

"Hazme tuya de nuevo" le pidió Camila colocándose de espaldas a Lauren, quien la rodeo con un brazo, esta no tardo en dibujar con sus dedos las curvas de la mujer de piel morena, se tomo su tiempo para delinear ese hermoso trasero merecedor de un monumento, para acariciar sus pequeños pero bellos pechos, y ahogar con un apasionado beso un gemido que quería escapar de su boca, mordiendo de tal forma el labio inferior de Camila que esta se estremeció de pies a cabeza, Lauren puso dos de su dedos en la boca de su amada, esta los chupo de arriba a abajo, impregnándolos con su saliva, la ojiverde sintió palpitar su intimidad, esa mujer esa demasiado ardiente.

Sin más preámbulos dejándose llevar por esa pasión desbordante, los hundió en el interior de la mujer, Camila estaba preparada para recibirlos, su humedad la delataba, así que fácilmente ingreso y se deslizo primero delicadamente para después empezar un vaivén frenético, "Te quiero muy dentro de mi" dijo Camila entre gemidos de placer, Lauren sentía que su entrepierna se humedecía cada vez que penetraba a la latina, busco acomodarse de tal manera que esto le permitiera un mejor ángulo y llegar mas adentro de ella,

"Más, dame más" pedía casi a gritos la morena.

Lauren le complació, ahora no solo llegaba más adentro sino que cada embestida era más fuerte, Camila se agarro desesperada de las sabanas, ese ritmo la estaba llevando a la cumbre, lanzo un grito agónico que casi con seguridad se escuchó en más de un lugar de la mansión, su cuerpo se sacudió abruptamente presa de un delirio total, la ojiverde la tomo entre sus brazos, se fundió con el calor de su piel y fue así como Lauren sintió que su cuerpo se liberaba lentamente en un suave orgasmo, ambas se colocaron frente a frente aun temblaban, sus cuerpos estaban cubiertos por una leve capa de sudor, unieron sus labios y entrelazaron sus manos."Lauren, eres lo máximo".

Lauren desgraciadamente en el momento menos apropiado saco a flote sus inseguridades: "¿Mejor que Shara?"

Camila se puso bastante seria: "No te voy a negar que Shara es muy buena en la cama y si goce con ella, pero tú, me pones como loca, me llevas a otro nivel, nunca me había corrido así, espero haber satisfecho tu mal sana curiosidad".

Lauren se mostró contrariada ante tanta sinceridad: "Perdóname, es solo que...", Camila intento comprenderla: "Si mi amor, te entiendo, pero créeme, no hay punto de comparación, si quieres escucharlo de mis labios, si, eres mucho mejor que ella, y no solo en la cama", Lauren se quito un peso de encima, las palabras de Camila le daban la seguridad de que esa mujer le pertenecía en cuerpo y alma, ahora sabia que no había nada ni nadie que la pudiera separar de su lado.