Capítulo 2

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Normal

Al despertar Esmeralda se encontró en una cama, sé quedó quieta por un momento recordando lo que había pasado. Al llegar a maysalf junto a Altaïr cayo desmayada y no le sorprendió pues al ir tras el fruto del Edén, sufrió una apuñalada en su abdomen y no le dio importancia hasta llegar ése momento en qué el fruto cayó en el posó de las heces.

Sus pensamientos fueron interrumpidos al sentir esa sensación de vacío en su estómago, estaba hambrienta. Se puso de pié y caminó con mucho cuidado y dolor hasta llegar a las largas escaleras que daban al patio de la guardia.

Hija mía, no debés estar fuera del cuarto. Perdiste mucha sangre.

Sólo quiero comer maestra.

Le pediré a alguien que te llevé la cena pero regresa a tu cuarto y descansa.

¿Y él fruto?

Lo tiene Al mualin en su poder, lo escondera en las catacumbas de la guardia. Ahora que me acuerdo, Altaïr curó y suturo tú herida, cuándo le veas dales las gracias por hacer un buen trabajo.

Claro, entonces volveré al cuarto.
Esmeralda

Regrese a la habitación dónde estaba antes y al poco tiempo llegó ése hombre con semblante serio y ojos claros. En sus manos había un plató con comida, no me dijo ni usa sola palabra. Se sentó y puso la comida en mis manos.

Gracias por todo Altaïr.

No debés agradecer, tenías que a verme dicho que estabas herida.

No creí que fuera tan grave.

Fue grave, perdiste mucha sangre. Ahora come y duerme, ahora en adelante te prohibimos ir a cualquiera misión hasta que té cures por completo.

¿Prohibimos?.

Los maestros y yo más que nada, una mujer no tiene derecho a permanecer aquí, tú lugar es en una casa cuidando a tus hijos.

Dos cosas. La primera eres un maldito cerdo machista y la segunda no pienso tener hijos.

Pues entonces morirás.

Me da igual, no le temo a la muerte. Pueden matarme cuándo quieran ya viví mucho y todo fueron desgracias.

¿A que té refieres con desgracia?

No té lo contaré, no eres de mí confianza. Lo único que puedes saber qué gran parte dé mí sufrimiento fue por los templarios.

Altaïr

Está mujer es una boba ¿cómo es posible que piense cosas así? y las dice cómo si nada. Ella es muy misteriosa quiero saberlo y no me detendre hasta averiguar todo lo que vivió.

La observe en silencio mientras comía, su cabello es largó y liso dé un color negro igual que el cielo nocturno pero ése cabello cubría la mitad de su cara y no le queda lindo, me tomé la libertad de acomodar él cabello que cubría su cara detrás de su oreja. Ella me miró unos segundos y noté unos ojos verdes intensos fue que comprendí que su nombre hace referencia a ésos ojos verdes. Lo admito era una mujer muy hermosa, tenía una piel blanca cómo las nubes, labios finos con un color carmesí igual que la sangre, ojos iguales a ésa piedra valiosa y un cabello suave e igual de oscuro y hermoso que la noche.

No me di cuenta en que momento ella se durmió pero lo hizo, sólo me quedé ahí observando sus facciones hasta dormirme.

(Un mes más tardé)

Había transcurrido un mes desde el incidente, poco a poco se fueron eliminando a los templarios y en todo ésos ataques permanecía cerca dé ella cuidando que no pasé nada malo. Ella y yo estábamos mucho tiempo juntos, tanto que era raro él momento en qué nos separamos.

Una tardé nos encontramos caminando y ella se detuvo a ver ésa mujer rubia, la que era un peso muerto además dé zorra, ella sé estaba quitando la ropa frente algunos dé mis hermanos parada sobre el cañón del tanque.

Está loca, sacándose la ropa en el cañón del tanque.

Se va a mover el cañón y saldrá volando.

Y cómo dijo Esmeralda el cañón sé movió haciendo que ella cayera al suelo, el cañón se desprendió y cayó sobre ella. La ignoramos y seguimos caminando hasta encontrarnos con Al mualin y la maestra de Esmeralda.

Ellos nos dieron la importante misión dé llevar el fruto del Edén a Jerusalén a la casa dé Malik. Había que partir dé inmediato, había que aprovechar la luz del día. Monte mí caballo y la miré serio al escuchar sus quejas.

No iremos cabalgando, en una moto es más rápido.

Sí puede que sea más rápido pero son ruidosos y llamarían mucho la atención en Jerusalén no sólo por él ruido también por el aspecto que tienen.

Pero Altaïr...

Además tienen qué ahorrar combustible.

Está bien iré por otro caballo.

No hay tiempo Esmeralda.

Antes dé qué se vaya la tomé del brazo y la subí al mío de tal manera que ella estuviera adelante dé mí, sentía qué mi pene crecía y era normal estaba siendo rosado...sólo esperó que no lo note. Tomé las riendas del animal y empezamos a andar.

Viaje al pasado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora