Viaje al pasado.

Capítulo 6

Esmeralda

Tengo un muy mal presentimiento sobre esta guerra y sobre el fruto del eden, me sentiría más tranquila si estuviera enterado y no es manos de Malik.

Me encaminó decidida a hablar con Jazmín y tratat de convencerle de que me deje hacarme cargo de enterar el fruto pero no logré nada solo disputas.

¡Escucha vieja mugrosa! ¡Sabes bien que cada vez qué tengo un mal presentimiento pasa algo! ¡quieras o no voy a buscar esa porquería!

¡No! ¡Te prohíbo salir de la ciudad! ¡y alejate de Altaïr!

¡No y no! ¡Qué a ti te halla ido mal con ese viejo no significa que me pasé a mi!

¡Esmeralda!

Sali de su despacho y cerré la puerta de un portazo, me encontré a Altaïr con una sonrisa y una cara de enamorado, solo lo ignore esa mirada y tomé su mano llevándolo en donde guardamos los vehículos.

Tenemos que ir a recuperar el fruto.

¿Dime tus razones para desobedecer?

¿Me vas a ayudar si o no?

Si fueras otra persona me hubiera negado pero vamos antes que cambié de parecer pero quiero saber tus razones.

Tengo un mal presentimiento...siento que en cualquier momento los templarios nos atacan y moriremos todos...tal vez no deba decirte esto pero tu Altaïr puedes controlar el fruto, iba a esconderlo pero en tus manos sera mucho mejor.

¿Realmente estas segura de eso?

Si, Altaïr quédate con el fruto. Eres el único capaz de no enloquecer por su poder.

Si ése es tu deseó lo haré dispuesto.

Sentí un gran alivió al oírlo, sonreí apenas pues sentí sus labios en los míos y le correspondi.

Nos preparamos y comenzamos un largo viaje a caballo a la casa de Malik. A mitad de camino comenzó una tormenta de arena y no teníamos donde refugiarnos, nos bajamos de los caballos y nos abrazamos protegiendo nuestros cuerpos como podíamos.

Éso nos llevó mucho tiempo perdido a penas terminó nos pusimos en caminó,  al llegar era de noche y estábamos sumamente cansados.

Altaïr

Al llegar le ordene a Esmeralda que se fuera a descansar y yo le pedi a Malik el fruto y me lo entregó, guarde el fruto entré mis cosas y fui a verla, estaba tomando un baño en las aguas termales. Me quito la ropa y entró acordándome a su lado, sabía que no estaba cómoda.

Me gusta verte así.

Cállate Altaïr.

Se té pasará cuándo hagamos el amor pero es muy pronto para éso, ahora relajate que no pasará nada de éso.

Lo se, confío en ti.

Sonreí y cerré los ojos poniéndome cómodo, al pasar los minutos salimos y nos pusimos a cenar y luego directamente ir a dormir. Esmeralda se acostó primero y luego yo, la abracé por la espalda y lentamente me caí en los brazos de Morfeo.

Al día siguiente al despertar la observe dormir y descansar hasta que era hora de partir, el viajé se me hizo muy rápido y agradable, me contó muchas cosas más de su época, tantas que me sorprende todo lo que tienen.

Al llegar al cuartel escondimos el fruto en mi cuarto, nadie se atreve a entrar y dudo que lo hagan justo a ahora.