10. Él hace lo que yo digo.

13.3K 1.1K 2.2K
                                    

Todavía no podía creer lo que estaba pasando, mi hermano mayor me estaba besando y yo no tenía ni voluntad de seguirle ese beso, era como si mi cuerpo estuviera dormido e inútil, sin siquiera recordar como se respira.

--No puedo hacer esto. --Murmuró apartandose de mi y yo lo sujete del cuello de su camisa para retenerlo junto a mí. --Harry, tu tienes novia y la quieres, por eso no puedes ni corresponder un beso.

Con la respiración acelerada desbloqueé la pantalla de mi celular para llamar a Taylor que respondió en seguida.

--¿Harry? ¿a donde te llevo ese wei? ¿que pasa?

Mis pupilas no perdían contacto con las de Louis, entonces hablé.

--Taylor, terminamos. No te quiero ni te quise nunca. Solo te estaba utilizando para olvidarme de alguien más, pero luego de un mes me di cuenta que es inutil y lo nuestro nunca va a funcionar.

--¡Pero Harry..!

Colgué y bajé la mirada, guardé mi celular y juré que para ese entonces ya estaba ridículamente ruborizado, la mano de Louis acarició mi mejilla y yo lo miré a través de mis pestañas.

--Eres un encanto, Harry. --Sonrió pero no tanto como para arrugar sus bonitos ojos, no sonrió de verdad.

--Creo que toda mi vida me haz gustado. --Murmuré y el negó en silencio.

--Pero soy mucho, muy, muy, mayor para ti. --Asentí en mi contra y lo dejé continuar. --Además somos... nuestros padres no lo van aceptar.

--¿Desde cuándo te gusto yo a ti? --Pregunté tratando de desviar el tema.

--Desde que cumpliste 16. --Suspiró y supuse que pudo leer el "¿Porque?" En mis ojos. --Se que siempre haz sido el mismo, pero fue a penas este año que me fijé en ti, en tus labios, en tu voz, en el shampoo que usas y empecé a soñarte diario.

--¿Eres gay?

--Lo soy, si. --Me miró y yo sólo espere que no dijera que... --Liam era mi novio. --Y lo dijo.

--Pero aún se hablan.

--Si, hace poco más de un año terminamos. Pero nos llevamos tan bien que decidimos ser amigos y... le he dicho que me gustas. --Se encogió de hombros culpable, yo nunca tuve valor de confesarle a nadie que él me gustaba. --Prácticamente me obligó porque en éste mes que no me hablaste, yo me puse muy mal y él es mi mejor amigo, no puedo ocultarle algo por mucho tiempo.

--Diablos, Louis. Dime si vamos a ser novios o no, de una vez.

Rió quedo y yo me senté sobre sus piernas en un movimiento rapido, sentia el volante tocando mi espalda y sus manos me acercaron más a él tomándome de las caderas.

Me incliné y besé su boca como nunca besé ninguna otra, como no bese jamás a Taylor, a la chica de los trece años o a Louis, en mis sueños.

--Harry, mi consciencia no me permite ir mas aya. --Fruncí el ceño con las manos apoyadas en sus hombros.

--Louis, tu ya cruzaste el limite de los hermanos, no salgas ahora con que no puedes hacerlo. --Me froté sobre su regazo y cerró los ojos en un gemido.

--Harry...

--Será nuestro secreto.

--Solo tienes 16 años. --Susurró y yo asentí inocente, sorprendiendome a mi mismo por esa faceta atravida que no conocía de mi.

--¿Cuántas veces te a coqueteado un chico de 16 años siendo ya un adulto?

--Harry, no puedo.

Sin esperar más, volví a mi asiento y me puse el cinturón para verme más dramático. Louis volvió a encender el auto y condujo en silencio, no me dijo nada ni yo pregunté más.

...

--Si, mamá, mañana yo lo llevaré a casa, está noche dormira en mi departamento. Hasta luego. Te quiero.

Colgó y salimos juntos del elevador hasta la puerta de su depa, entré antes que él y corrí hasta su habitación, estaba tan desesperado por que me volviera a besar, por que me volviera a tocar.

Me saqué la camisa y las converse antes de que él me alcanzara y luego dejé mis pantalones en el suelo.

--¡Harry ¿que haces? Vístete cabron!

Él tenía razón ¡¿Que estaba haciendo?!

--¡Louiiiis! --Gimoteé con los puños a mis costados en calzoncillos y rojo como un tomate. --Si no me haz traído aqui para follar toda la noche ¿entonces porque no me llevaste a casa?

--¡No puedo follarte toda la noche!

--¡Bueno, follame un ratito!

Corrí a alcanzarlo y lo atrape contra la pared de su habitación junto a la puerta, llené de besos su boca y su cuello y mis manos nerviosas le abrieron el pantalón a ciegas hasta tomar su creciente erección deseosa.de mi, ¡claro que era de mi!

--Harry... --Susurró y yo sonreí entre mis besos y sus jadeos, esto me recordaba a cuándo él me tocó a mi a mis 13 años. Maldito pervertido.

--Te regalo mi virginidad, Lou. --Pestañe otra vez coqueteando y sus ardientes ojos me vieron sin responder nada.

Me arrodille frente a él y bajé sus pantalones al suelo junto con la ropa interior, él se quito la chaqueta y después la camiseta por su cuenta, acarició mi cabello y yo deslizaba mi temblorosa mano en su mienbro, mirandolo a él y él mirandome a mí.

--No, esto no está bien. Vístete.

Quiso apartarse de mi, pero yo lo sostuve con fuerza de su palpitante pene, chilló con las manos en mi muñeca y yo me levante sin soltarlo.

--Tu haces lo que yo digo. --Mostré una media sonrisa y lo guíe hasta la cama, él respiraba con la boca entreabierta y yo disfrutaba de ese repentino cambio de papeles.

Ahora las cosas serían diferentes.

Menso - LarryStylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora