4-XIV

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Luego seguimos abanzando
Mi guía me advirtió.
Sigueme ahora, y cuida que tus pies no pisen esta arena, tan ardiente
Mas, caminemos pegado, a ese bosque

Y brotando de la selva oscura, un arroyuelo de agua color rojo, color que se te pega a las manos, y un olor despreciable, era un arroyuelo que cuya vista estremecía

Cual Bulicano, de aguas vaporosas
Que comparte entre si la prostituta
Cruzaba aquellas aguas arenosas

El fondo de este arroyo, y habían dos paredes de piedra, igual que las orillas
Vid que ese sendero estaba libre de las ardientes arenas
Y por eso pensé que era el paso
Por ahí seguiríamos nuestra ruta

"De todo que te eh enseñado
Desde que atravesamos esa puerta
cuyos umbrales a nadie se les niega

Ninguna cosa has visto mas notable
Y nada mas veras que tanto pensar te haga, como las aguas del presente río
En que su corriente, todo fuego apaga

Todo eso me dijo mi guía
Y le rogué que me explicara con detalle.

La Divina Comedia El Infierno Según DanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora