Capitulo 15.

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Cuando salí de clases busque por todos lados a Ale pero no la ví, así que empecé a caminar rumbo a la casa antes que saliera Matias del instituto ya que me obligaría a irme con el, y quería estar un momento sola porque pensar en todo lo que me estaba pasando y las dudas que tenía sobre Matias, primero el comentario del hombre en el bosque ¿Que era lo que yo no sabia? después el comentario de Ale " tu también estas en negación", y por último cuando Abby dijo que Matias se veía diferente gracias a que no estaba aquí.

Estaba tan perdida con todas mis dudas hasta que escuche unos golpes, gruñidos y unas risas que venias del bosque y como siempre me gano la curiosidad me deje guiar por esos sonidos y ví como unos hombres tenían atado a un gran perro mientras se reían y le decían que cambiara como si el perro de entendiera, el gran perro gruñía y trataba de soltarse pero eran cuanto hombres llenos de tatuajes y armas iguales al hombre que me encontré en el bosque me fije en el perro y pude ver en sus ojos todo el dolor y odio, y eso hizo que mi sangre hirviera estaba a punto de salir de mi escondite para tratar de ayudarlo cuando le dispararon un dardo me imagino que era un tranquilizante y el perro cayo al suelo y empezó a retorcerse y ví alto que me dejo paralizada el gran perro se convirtió en un chico ¡una persona!, retrocedí y pise  una rama los hombres voltearon a ver en mi dirección y el chico también, el me vio con temor en sus ojos.

-Corre- dijo el chico que antes era una gran perro.

Y eso hice, empecé a correr con todas mis fuerzas y escuche las voces de los hombres que me seguían y corrí mas rápido no conocía el bosque, no sabía donde estaba pero algo en mi interior decía que me dirigía al lugar correcto a lo lejos pude ver una casa y corrí en su dirección y escuche las maldiciones de los hombres que se habían detenido ya no me seguían.

Llegue a la puerta de la casa y empecé a golpear fuerte para que me abrieran, tenia mucho miedo, no sabia quien vivía aquí pero quería con todas mis fuerzas entrar sentía que adentro podía estar segura.

La puerta se abrió y apareció Tobi con los ojos como platos.

-¡¿ Que rayo....!?-

-Ayuda- lo dije antes de que terminara.

-¡Matias!- grito Tobi antes de que todo se volviera negro ví a Matias con cara de preocupación correr asía mi.

Matias.

Tobi me dijo que había desaparecido Jorge uno de los nuevos lobos que teníamos y que había una reunión para discutir que haríamos después de clases lo que me fastidio por que quería ver a Alex.

Así que aquí estaba discutiendo las soluciones sobre como solucionar lo de los cazadores mientras por dentro sentía que algo no iba bien quería ir a casa y comprobar que Alex estuviera bien, se escucho como alguien tocaba la puerta o mas bien quería tirar la puerta y Tobi se levanto para ir a ver quien era mientras también yo me ponía en pie para poner de escusa que no me sentía bien y que me iría a casa ,  si yo es una escusa patéticapero no me importa quiero ir a ver a Alex.

-¡Matias!- grito Tobi y eso me puso a alerta y fui q ver que ocurría.

En la puerta ví a Alex pero estaba muy pálida y estaba temblando y eso me alarmó aún mas, ella se tambaleo y supe que se iba a desmayar  así que corrí asía ella y la sujete antes que cayera al suelo, la tome en mis brazos y me dirigí asía dentro de la casa.

-¿Que sucede? Y ¿Quien es ella?- pregunto el papá de Tobi mientras los demás solo observaban y esperaban una repuesta.

-Es Alex y no se que sucede- dije mientas miraba preocupado a una inconsciente Alex.

-lleva la a mi habitación yo iré a buscar a mi mamá ella sabrá que hacer- dijo Tobi y no lo pensé dos veces me dirigí a la habitación y la coloque con cuidado en la cama y en eso entro la mamá de Tobi con su maletín de doctora y me saco de la habitación yo no quería dejarla pero tampoco quería estorbar y ella dijo que le quitaría la ropa que llevaba yo por la angustia de verla así no me fije que estaba toda sucia y sudada como si huyera de algo o de alguien y eso me cabrio, baje las gradas y me dirigí a la sala ahí estaban todos aun.

-Quiero que revisen los arrendadores- dije serio 

-¿crees que haya cazadores por aquí?- pregunto uno de los ancianos.

-No se, por eso quiero que vayan- dije y ellos obedecieron sin decir nada mas.

Escuche voces en el segundo piso de seguro Alex ya había despertado así que subí corriendo las escaleras y abrí la puerta sin tocar.




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