Lazos de Sangre

Lazos de Sangre - parte 12-

Vida de Efraím....  

Continuando con los recuerdos...

Una semana después los padres de Efraím e Uriel salieron a visitar a los hermanos de Katy, días después regresaron a casa, apenas llegando el sábado los hermanos se reunieron en la casa de sus padre a comer y claro los niños estaban fascinados pues la promesa de un regalo que sus tíos les mandaban era lo que avivaba esas sonrisitas.

Los niños no tardaron en preguntarle a sus abuelos sobre sus obsequios pues los niños de Uriel ya tenían sus regalos, el más pequeño tenía un peluche con luces y sonidos el cual no soltaba, Gary tenía un carro a control remoto que no dejaba de pasear por todos lado, así que solo faltaban los hijos de Efraím.

· Mateo: abuelito nos trajiste un regalito a nosotros también?

· Julio: claro que sí, sus tíos les mandaron un regalo a los cuatro, este es para ti –le dijo mando una bolsa a Fátima- este para ti –le entrego a Mateo, y repartió los otros dos, cuando los niños abrieron sus regalos quedaron tristes y confundidos, pues en la caja había dos regalos diferentes, un libro y una falda rosa de distintos tamaños.

· Santiago: a mí no me va el rosa.

· Hugo: pero que es esto, papáa.-dijo quejándose-

· Mateo: buaaa no me gusta mi regalo buaaagg.

· Fátima: a mi si me gusta –dijo ella pues era un libro de una princesa-

· Hugo: papá porque a Gary le dieron un carro?

· Efraím: mm ¡¡¡!! –no sabía que decir estaba algo incómodo pues sus hijos reclamaban igualdad y esta vez con sus primos-

· Katy: Tu tía les ha mandado los libros, como sabe que la última ves hicieron su drama porque a Santiago le dieron uno... quieren evitar lo más posible los berrinches en esa casa.

· Efraím: pero una falda!!!!... –veía la cara de decepción de algunos y una cara de "ni loco pienso usar esto" de parte de Santiago-

· Julio: Tú fuiste en que nos dijo que querías que les diéramos las mismas cosas a tus hijos, la nena le ha pedido a tu mamá que si le podía regalar una faldita, así que una falda para los cuatro, no es eso lo que pediste?

· Hugo: yo no quiero un estúpido libro.

· Julio: lo siento jovencito pero es lo que hay.

· Santiago: toma enana para cuando crezcas -le dio la falda-

· Fátima: gracias... ustedes también me las van a dar... la tuya no me va quedar... te la puedes quedar –le dijo a Mateo-

· Mateo: buaaaaa

· Katy: porque lloras amor si es un bonito libro, anda ve a verlo mira tienes juegos muy bonitos o cuentos.

· Mateo: yo quería un carro como el de Gary.

· Katy: amor mío, les trajimos lo mismo a los cuatro para que esos celos enfermizos se terminara así que aguantarse, anda mira tiene un rompecabezas, mira no te gusta.

Mateo aun llorando fue viendo su libro era bonito, era grande y tenia jugos y cuentos, los cuatro tenían un libro la diferencia era que el de Fátima era de princesa, el de Mateo era de cuentos infantiles y de aprendizaje y el de Hugo y Santiago era igual, también tenían algunas historia pero estas eran sobre civilizaciones antiguas, también tenían juegos didácticos pero ya no era un libro infantil.