Only Told The Moon [CAMREN]

ᴘʀóʟᴏɢᴏ

ᴄᴏᴊíᴍᴀʀ, ᴄᴜʙᴀ

||ʟᴀᴜʀᴇɴ

La época del año que más me gusta es otoño, pues me fascina ver como las hojas de los árboles se tornan anaranjado y van cayendo de apoco.

Mí nombre es Lauren Michelle Jauregui Morgado, me gusta mucho dibujar, a pesar de que algunos de mis compañeros suelen reírse de mis dibujos.

Físicamente, soy de piel blanca, mí cabello es negro y mis ojos son de color, ¿azules o tal vez verdes?, ni siquiera yo misma lo sé, aunque mí papá suele decirme que tengo una galaxia entera dentro de ellos y que cualquier persona llegaría a enamorarse muy fácil de mí, sin embargo no le creó.

Terminé de detallar el dibujo que estaba entre mis manos y mire mi reloj para comprobar que se me estaba haciendo un poco tarde, tendría que darle una buena explicación a mi madre, guardé el papel y me puse en marcha rumbo a mi hogar.

Estaba tan metida en mis pensamientos tratando de idear una buena mentira por mí retraso, cuando escuche unos sollozos no tan lejos.

Se que no debería entrometerme, pero ese llanto parece ser muy melancólico y esta partiendo mi alma, caminó por donde proviene él sonido y me escondo tras un árbol, si mi madre me viera seguro y me reñiría por hablar con extraños.

-Papá, mamá- escuchó como susurra.

Asomó mí cabeza y me topó con una niña de piel un poco morena con él cabello castaño, vestía un pantalón de mezclilla y un abrigo color amarillo, junto con un gorro del mismo color.

Frotaba con sus pequeñas manos sus ojos, quería ayudarla pero no sabía como, agache mí mirada y me encontré con unas flores hermosas que parecían aún no marchitarse, con sumo cuidado y con la esperanza de no pisarlas, me arrodille para cortarlas.

Cuando las tuve entre mis manos, me levanté y camine hacía la niña -Hola- dije con timidez, ella se sobresalto y me miró, sus ojos eran cafés como él chocolate; me sonroje, porque a pesar de que su mirada era triste, aún tenía esa pequeña luz de felicidad -No llores- le dije luego de un rato calladas.

Me miró y trato de secar sus lágrimas con la manga de su abrigó, pero fue inútil ya que al parecer sus ojos tenían ganas de seguir desahogándose.

-Ten- estiré las flores, se sorprendió.

-Gra...gracias- las tomó haciendo que nuestras manos se rozaran.

-De nada - me acerqué y seque sus lágrimas -Mamá me dice que las flores siempre hacen sentir mejor a una mujer- asentí feliz, pero mi alegría se esfumo cuando la vi volver a llorar, -¡Hey!- pose una mano en su hombro -¿Qué pasa?-

-Es que... es que... mí abuelita...- apenas y podía hablar -Acaba de fallecer, y la extraño muchísimo - su voz se quebró.

-No, no llores- la abracé -A tu abuelita, no le hubiera gustado verte llorar por ella- acaricié su cabello.

-Pero... pero... nunca la volveré a ver- se abrazo a mí.

Mí corazón se detuvo por un instante, sentí ese pequeño cosquilleo en mi barriga que me hizo sentir única -No digas eso...- la tome de los hombros y la hice verme a los ojos -Tu abuelita, sigue viva y claro que algún día la volverás a ver- me sentía con la necesidad de protegerla y eso que a penas la conocía.

-¿A qué te refieres?- preguntó extrañada.

-A que ella sigue viva en tu corazón- sonreí sincera.

Ella me devolvió él gesto, haciendo notar un ligero sonrojo en sus mejillas, mi mente se quedo en blanco y sin tanto preámbulo busque en mi pantalón la hoja que hace unos minutos había ocupado para dibujar el paisaje que tenía ante mis ojos, se la entregue -Muchas...- no le permití continuar pues recorde la prisa que llevaba, me despedí.

-Debo irme, nos vemos- sin más me heche a correr, pero cuando estaba a punto de llegar a casa, caí en cuenta que ni su nombre le pregunté, me detuve y di una mirada hacía atrás -Algún día- susurré mientras ponía la mano en mi pecho -Se que te volveré a ver- jure sin conocerla, y sintiendo que en mí cara se posaba una sonrisa única.

¿A esto le llamaban amor a primera vista?

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Continuará.