solo déjame verte tantito.

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Soledad:

No podía dormir... estaba nerviosa, Pepé tenía una manera de ser difícil, desconfiaba y  no me gustaba eso... si íbamos a casarnos y él tenía esos arranques de locura yo no se cuanto podría aguantar... Le envié un mensaje de buenas noches, en son de paz, para demostrarle que puedo ser comprensiva, que puedo dar mi brazo a torcer.

S: Buenas noches Pepé. Nos vemos mañana.

P: (20 minutos después) descansa. 

Era muy frío, serio, pero eso no me importaba, la verdad aun no me veía casada con él, no asumía lo que me venía, solo dejaba que las cosas pasarán, aunque estaba algo preocupada.

Al día siguiente fue a buscarme, eran las 7.00 a.m. yo había dormido muy mal, mi humor por las mañanas es terrible, subí sin saludar.

-Ya comiste? -preguntó secamente.

-No, la verdad cuando me enviaste fue que desperté, me vestí y ya estabas aquí. 

-Ok. Vamos a comer algo.

Llegamos a un pequeño café, cerca de la oficina y de mi casa, el pidió café negro sin azúcar y un sándwich, yo pedí un café con leche y dos empanadas, ya comenzando a comer mi humor fue mejorando...

-A donde vamos?

-Bueno, vamos a reunirnos con una persona que va a ayudarte a organizar la boda, en realidad va ayudar a tu tía Celeste y a Daniela, tu simplemente vas a decir que te gusta y como lo quieres... el estrés que lo lleven ellas... luego vamos a ir a ver la casa donde viviremos... ya luego te dejaré en tu casa porque yo tengo cosas que hacer. -dijo él mientras comía...

-Pero... no tienes que contratar a nadie, digo...entre nosotras podemos hacerlo y la verdad me da igual como sea todo... no le he hecho cabeza a todo el asunto... 

me miró un tanto decepcionado... -Bueno, queda una semana para organizar esto y créeme... planificar, ir de compras y todo eso, cansa. Claro, allá tu, si quieres vamos al ayuntamiento y listo.

-No... solo decía ya que es menos gasto.

-Y? Acaso eres tu quien va a gastar? ya deja de preocuparte tanto!

Fuimos hasta una oficina, nos atendió una chica muy linda, era la wedding planner que Pepé había contratado; me preguntó de todo, color favorito, como me imaginaba ese día, que sabor de pastel me gustaba, a Pepé también le preguntó cosas, como el estilo del auto en que iríamos, que usaría, era algo exhaustivo para ambos, así que Pepé le dio mi dirección, desde hoy iría a la casa para comenzar con todo... 

-Muy bien, que te parece?

-Que cosa?

-La weding planner Soledad... te gusta? te cae bien o quieres cambiarla?

-No... es muy agradable, pero hace muchas preguntas.

-Porque todo tiene que salir perfecto, como tu lo quieras...

-ah... y tu? No opinas?

-Nah... las bodas son para la novia... yo me visto, me caso, como pasapalos y bailo un ratito...

-ah... Pepé y tu familia? Tu mamá, tu hermano? Los vas a invitar?

Me miró con duda, se puso algo serio hasta que respondió: -ya mi hermano lo sabe, pero no puede venir, esta viajando, creo que ahorita está en Japón... y mamá, pues apenas le dije ayer y estaba sorprendida, pero viene, aunque no le gusta mucho la ciudad, vendrá con mi tía y se marchan de una vez... me preguntó por ti...

-ah si? que le dijiste?

-que no tenemos mucho de conocernos, que eres una profesional, bonita, educada y de buena familia... y le dije que nos amamos...

-que???

-Me pregunto que porque me caso??? que le iba a decir? Mi mamá es una señora Soledad...

-No tranquilo... te entiendo perfectamente.

-Mira... esa es la casa, se ve pequeña pero es muy bonita... bajemos para que la veas.

Bajé rápidamente, Pepé me tomó de la mano y sacó las llaves, era un lindo lugar, todas las casas tenían arboles en el frente, estaban lindamente pintadas; la nuestra era de dos niveles, un pequeño caminito de mosaico rodeado de grama verde y florecitas, puerta de madera, entramos y la sala ya no parecía tan pequeña, tenía dos ventanales y cortinas espesas, un cajón de libros, los colores debo decir eran extravagantes, paredes rojas, azules y amarillas en la cocina  que por cierto era bonita, con sus ventanitas de cristales de colores y una puerta que daba al patio...

-Te gusta? A mi me gustan los patios así, llenos de arboles y muy frescos... -dijo Pepé sonriendo.

-Es muy lindo... fijate que hay todo tipo de flores y mucho espacio -dije yo observándolo todo.

-Pos si, esa fuente de allá no funciona y a decir verdad no me gusta... vamos arriba.

Subimos por una angosta escalera y llegamos a un pasillo, habían 3 habitaciones, a la derecha la nuestra, era grande, con ventanas amplias... aunque el color era algo lúgubre, las de la izquierda, una era de huéspedes y la otra estaba vacía.

-Los colores de la casa están bien raros, pero ya luego si quieres mando a alguien a cambiarlos y la decoramos como tu quieras... 

-No es necesario... -dije yo y bajé rápidamente.

-Soledad! Soledad... que te pasa?

Pepé:

No la entiendo, de un momento a otro, cuando pienso que todo va bien, se cierra... 

-Nada... Pepé tu no tienes que cambiarla, es mas no tienes ni que mostrármela...

-Sol... yo... mírame... Entiendo que esto es demasiado para ti, solo quiero que veas a donde vendrás y que estés a gusto.

-No te preocupes por mi.

-Claro que si! Ya deja de tenerme miedo, esto es solo una casa... Yo casi ni estaré aquí, vivo viajando, trabajando... puedes hacer lo que tu quieras... 

Nos fuimos, no estoy enojado con ella... como podría? Es una niña que jamás ha salido de su casa y ahora yo, un tipo al que conoció hace poco mas de un mes, le mostraba la casa donde me la llevaría... Fuimos ya camino a su casa y llegando recordé que debía darle algo.

-Sol, aquí tienes... esta es mi tarjeta, estos son mis datos, paga TODO con esto, tu vestido, maquillaje, zapatos y los gastos de la boda y no sé, cualquier otra cosa que desees o necesites.

-Pero... Pepé, no creo...

-Shh... úsala y nos vemos en unos días, tengo de verdad mucho trabajo y necesito dejar cosas listas... Me llamas, me escribes si tienes algún problema...

-No... que problema podría tener Pepé?

-Con la tarjeta, Soledad...

-Ah, jeje si claro... -dijo y corrí a abrirle la puerta, la tomé de la mano y me paré frente al portón.

-emmm me dejas pasar?

-Si claro, solo... a ver, solo déjame verte tantito... -me miraba confundida -Es para acordarme que eres tu con quien vengo a casarme!

-Muy gracioso! -caminó y no pude evitarlo, la tomé del brazo y la besé... Sentirla tan cerca, verla soltarse y huir... me divertía, era torpe, era miedosa pero era... era ella.

PXNDX Fanfic - El señor José Madero, un corazón salvajeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora