La muerte de los seres queridos

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Primer capítulo: La muerte de los seres queridos

Empecé a caminar como cada noche, Sintiendo el aire correr, era tarde lo sabía pero no me importaba, no tenía miedo, bueno ya no.

Era raro ver a un lugar y tener que ver el espíritu de alguien, sentir la presencia de alguien muerto, para la mayoría podría ser escalofriante pues para mí no.

El largo rato que camine pude ver a aquellas almas que no quieren apartarse de este mundo, puede que por miedo a lo desconocido o porque no quieren alejarse de los suyos.

Llegue al orfanato, trepe por las vallas, ya todos estaban dormidos, no se dieron cuenta que no estaba, nunca se dan cuenta, al llegar a mi cama sentí la respiración de alguien

-luna –susurraba una y otra vez mi nombre pero no logre ver a nadie todos estaban dormidos, pero los susurros no saciaban

 -soy yo no me reconoces - volvían a susurrar me levante camine hacia un pasillo de donde eran provenientes las voces, me acercaba a ellas, empezaron a haber risillas, corrí  hacia ellas y hay estaba ella, mi hermana mayor o la que era mi hermana ya que había pasado tanto tiempo y no sé lo que es ahora

Me acerque a ella, se desvaneció  mire a todas partes no estaba, un susurro detrás mido

-que quieres- dije

-tú fuiste – otro susurro –no lo niegues, tú fuiste la ocasionarte de mi muerte y la de nuestros padres- decía entre risas

-yo no fui, yo no tuve la culpa

-tu sabias que iba a pasar, tu nos viste morir en tus sueños, sabias que moriríamos, y no hiciste nada

-no sabía que podía hacerlo –decía mirando a todos lados buscando los susurros de mi hermana- pensé que solo eran pesadillas, solo era una niña que iba a saberlo

- ¡LUNA QUE HACES DESPIERTA TAN TARDE! –de pronto el grito de la directora del orfanato me asusto

-nada, solo que no podía dormir –dije

-para la próxima no salgas de tu cama – dijo donde una orden y haciendo un ademan para que me fuera

-pues no le prometo nada –dije antes de salir de la habitación

****

Me levante, camine hacia el comedor donde estaban los demás todos huérfano, me senté en una mesa con los de mi edad (15años)

-hola luna -me saludo Johan

-que hubo -dije sentándome relajadamente

-así que te volviste a escapar – dijo maría una amiga que quedó huérfana a los 11 y nadie la había adoptado aún, con frecuencia yo solía ver al espíritu de su madre frente de su cama contemplándola.

-no escape solo salí a caminar, que tiene de malo

-puede pasarte algo –dijo Johan –déjame acompañarte la próxima vez

-no, mis caminatas son para deshacerme de todo lo que me rodea y estar en el mundo exterior yo sola

-pero es peligroso solo déjame acompañarte, prometo no molestarme –dijo a lo que no pude negarme

-echo hoy a las 11 de la noche en las vallas al lado de los dormitorios –dije extendiendo mi mano a lo que él respondió estrechándola

***

Eran aproximadamente las 11 cuando llegue a las vallas me senté a esperarlo…

-ya era hora

-vamos –dijo dándome la mano para ayudar a levantar

Después de escapar salimos en dirección a un viejo parque que solía visitar cada noche, me siente en un columpio al igual que Johan hizo

Veía como su temperamento cambiaba, ya no estaba alegre, lo veía triste, como a punto de llorar, no era buena consolando, a decir verdad era bastante fría con los demás

Puse mi mano sobre su hombro, sentí el impulso de cerrar mis ojos “era de tarde vi a una pareja caminar junto a un niño de aproximadamente 10 años, el niño corrió directo al parque se sentó en los columpios, mientras sus padres cruzaban la calle un conductor ebrio los atropello” saque mi brazo de su hombro y le observe a los ojos estaba llorando, mire a mi alrededor y era el mismo parque que vi segundos atrás

-¿Johan así murieron tus padres? –le dije

-de que hablas –de respondió incrédulo él ni nadie sabía que podía ver la muerte o espíritus-mis padres murieron…

-atropellados- dije afirmando

-¿cómo lo sabes?, nadie lo sabía, no sé lo que contado a nadie  

- lo sé pero es que no creo que puedas creerme si te lo cuento- me miro buscando una explicación dude en decirle pero que perdía si me creía bien y si no pues ya veré que pasa- pues fue hace mucho tiempo, acababa de cumplir 7 años cuando una mañana me desperté teniendo un sueño de la muerte de –me calle un momento y baje la mirada- mis padres, era muy pequeña y no sabía que iba a pasar, pensé que era un simple sueño, una pesadilla, dos días después murieron tal como lo soñé, desde hay veo a los espíritus, puedo hablar con ellos o ver la muerte de los demás

-es algo                 poco creíble, lo siento-dijo el mirándome

-lo sé, nadie me creería si se lo digiera, eres el único que sabe y sé que no me crees pero es la verdad. No puedo controlarlo he visto a tantas personas morir en mis sueños y todo se cumple. Se visto lo que le ha pasado a los padres de muchos de los niños que llegan al orfanato 

-diría que mientes pero te creo –dijo serio cogiendo mi mano –es la única forma de la cual hayas podido saber lo de mis padres, ¿Cómo murieron tus padres?

-los asesinaron, yo volvía de la escuela, cuando entre en la casa había varias ambulancias alrededor me acerque a una de ellas donde iba mi hermana aun consiente pero estaba muy mal, mis padres murieron al instante después de varios disparos  a mi hermana le dispararon una vez, paso en el hospital varios días hasta que falleció –dije recordando aquellos días en la cual solo era una niña

-¿viste como los mataron en tu sueño?

-si – respondí en un suspiro

-debió ser duro- dijo – no te da miedo ver esa clases de cosas

-pues no, al principio si pero pensé que solo eran pesadillas, al entrar al orfanato vi a varias almas de los padres de muchos niños, al principio sentía miedo, pero una noche al pie de mi cama escuche varios susurros que decían que no tema que todo saldrá bien, con el pasar de los años me adaptaba y veía como cada alma desaparecía y como otras no tenían el valor de hacerlo.

-¿porque no se iban? –Me pregunto-¿mis padres estuvieron conmigo algún tiempo desde que estoy en el orfanato?

 -pues algunas almas no se van por miedo a los desconocido, por miedo de ver que hay en el mas allá, otras no quieren dejar a sus seres queridos y se quedan a observarlos en su vida deseando volver a estar con ellos, su agonía es grande la he sentía varias veces en los padres de muchos y tus padres pues lo siento pero ellos no han estado contigo, bueno no las veces que te he visto, parece que ellos encontraron el camino, supieron avanzar  

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