Capitulo 61

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— No Justin, es suficiente. Entiendo todo. — susurre.

— ¡No! Maldición, no entiendes nada. Vine hasta aquí porque estaba preocupado por mi familia. 

— ¿Cómo puedes estar preocupado si tienes las cámaras aquí y ves todo lo que hago? ¡Deja de mentirme!

— Puse las malditas cámaras por protección, pero en el instante en que abandonaste nuestra casa, me puse en marcha para llegar aquí, pero sabia que no llegaría a tiempo por lo tanto mande a poner cámaras, joder. Estaba tan malditamente preocupado, pensé que ibas a dejarme, maldición, incluso pensé que ibas a escapar con Drew y no te vería nunca mas… pasaron miles de historias por mi cabeza, nena… — mire a sus ojos y estaban brilloso y se veía realmente que decía la verdad. 

Para mi era tan fácil confiar en el, confiar en su palabras, entonces lo hice. 

Largue un suspiro y me acurruque a su lado, el me dio un corto beso en los labios y me abrazo con fuerza, pero sin lastimarme. 

— Oh Justin… — susurre — odio pelear.

— Lo sé nena, pero nuestra relación siempre fue explosiva ¿he?

— Si — conteste.

— ¿Qué te parece si vamos al cine? ¿Cómo una familia?

Di vuelta mi rostro para darle un corto beso, y asentir.

Luego nos vestimos, Justin llamo a Angelo, que había llevado a Drew a dar un paseo para que lo traiga de vuelta a casa.

— ¡Papi! ¡Volviste! — exclamo Drew y corrió a los brazos de Justin y salto en ellos. 

— ¿Me extrañaste campeón? 

— ¡Si! Mucho, ¿Por qué te fuiste? — Pregunto con la carita llena de curiosidad. 

Note que tenía su ropa machada con helado.

— Tenía que trabajar, pero ahora estoy aquí, y te extrañe mucho.

Drew se sonrojo.

Justin río y Ángelo también. Él hacia siempre eso cuando recibía muestras de cariño o cumplidos, también cuando yo le daba besitos en su mejilla. Se sonrojaba como un tomate, sonreí con ternura. 

— ¿Vas a venir conmigo y mamá a ver una película verdad? 

— ¡Si papi! 

— Entonces vamos…— Justin me dio una mirada y yo negué.

— No, primero tiene que cambiarse. 

— Él esta bien así.

— Justin, tiene sucia su remera. ¡Esta llena de helado! 

— ¡No es cierto mami! Solo tiene una manchita aquí — y señalo con su dedito la marca del helado de chocolate pero era grande, no podía ir a así.

— Tu mamá es muy exagerada ¿verdad campeón?

Mire a Drew y a Justin que se daban mirada cómplices.

— Si, mama es muy eso — dijo ya que no le salía bien la palabra, supongo que tampoco sabía el significado, pero todo para complacer a su padre. 

Los mire desafínate a los dos pero divertida. Y se echaron a reír.

— Mejor has lo que te dice, o se enfadara – susurro Justin bajándolo de sus brazos, y Drew asintió. 

— Yo no quiero que mamá se enfade, yo te quiero mamá— soltó una risa traviesa y le sonreí. 

— Me las pagaran, yo no soy exagerada. 

Cuando iba a alzar en mis brazos a Drew, pude divisar una manchita roja en su codo.

— ¿Qué te paso allí? — le pregunte una vez que lo tenia en brazos.

— Me caí.

— ¡Te caíste! — Susurre casi horrorizada — ¿Te golpeaste en otro lado? Déjame revistarte.

— Mami, estoy bien. Yo soy un chico grande, puedo aguantar. ¿Verdad papá? — ni siquiera me di cuenta de que Justin nos seguía en camino a nuestra habitación.

— Sí, mi hijo es un chico grande – noté el gran orgullo que sentía Justin por Drew, y casi estaba por llorar. Joder ¿Es que era tan sensible?.

•Cσмρℓι¢αтє∂ ℓσνє• [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora