¿Comprometida Con Mi Mejor Amigo? SonAmy (Editando)

Capítulo 10

Narra Tails

Me encontraba en mi habitación tranquilamente haciendo las tareas de la próxima semana en mi laptop.

El maestro de historia nos pidió hacer un escrito de 1000 palabras sobre la historia de Möbius y yo ya lo estaba concluyendo pero me faltaban algunos datos que desconocía o no recordaba con exactitud, como no los encontré en internet decidí ir a la biblioteca de la mansión a investigar un poco.

Cuando los padres de Sonic me "adoptaron", por decirlo de alguna forma, el primer lugar de la casa que me enseñaron fue la biblioteca y me quede impresionado por la cantidad de libros que habían.

Antes de que fuéramos a vivir a Green Hill yo, literalmente, vivía allí ya que siempre me interesó aprender todo sobre todo. Los libros siempre han sido bastante interesantes para mi.

Cuando me voy acercando a la enorme puerta, varios flashbacks de Sonic y yo cuando éramos mas pequeños vienen a mi mente haciendo sonreír.

~Flashback~

Hace 10 años

Estaba sentado en la enorme mesa de estudio de la biblioteca leyendo un libro sobre unas extrañas piedras mágicas muy poderosas, pero a la vez peligrosas. Sonic estaba de cabeza en uno de los sillones de cuero negro colocados estratégicamente en el centro de la gran habitación para quien quisiera leer de forma más cómoda.

Obviamente Sonic no estaba allí para leer. A él le gusta leer pero no lo admite nunca para no parecer un "nerd".

—Agh, estoy aburridooo—se quejó.

—Pues sal a correr—sugiero sin despegar la vista del libro. Esta "leyenda" se esta poniendo interesante.

—No puedo, mamá y papá me castigaron por salir de la mansión el otro día con Ames, hace ya un mes que ocurrió eso y aun estoy castigado—bufa y se sienta correctamente.

Lo miro de reojo.

No entiendo por qué se empeña en molestarme cuando yo si tengo algo para hacer.

—Y yo no entiendo que le ves a todos esos aburridos libros que no dicen mas que tonterías que a nadie le importan y sí, lo dijiste en voz alta—ese Sonic y su enorme orgullo.

Suspiro con pesadez y dejo el libro sobre la mesa.

—Si fueran "tonterías"—hago comillas con las manos—no los escribirían ni los utilizarían en la escuela.

Él rueda los ojos y yo niego con la cabeza, jamás cambiará.

—¿Crees en las Chaos Emeralds?—pregunta de repente. Se recuesta en el sillón y pone sus manos tras su nuca mientras cierra los ojos.

Arqueo una ceja y lo observo interrogante.

—Las piedras de las que habla el libro—esclarece.

Con que su nombre es Chaos Emeralds ¿eh?

Espera un segundo...

Señala con un gesto el libro y lo capto.

—¿Acaso... lo leíste?—pregunto con una clara incredulidad en mi tono.

Se encoge de hombros y abre un ojo.

—Me pareció interesante... ¿te sorprende?

—Para serte sincero, creí que no sabias leer.

—El hecho de que odie la escuela y todo lo relacionado con ella no significa que sea un idiota que no sabe nada ¿vale?

Suelto una risita y él sonríe a medias.