La mayoría de las personas se habían ido, quedaban pocos de los que asistieron pero no me preocupaba en lo absoluto. Después de mi conversa con Dana, ella se fue a su casa porque su madre la llamaba; y desde ese rato hemos visto a Juan con Janira todo el tiempo.
-¿Soy yo o Juan tiene algo con ella? –Me pregunta Liss.
-No lo sé. –Le respondo mientras me sirvo un poco de cola, estaba harta del alcohol.
-Mmm...
-¿Qué?
-Nada, es sólo que... Honestamente, Janira y Juan se ven bien juntos.
Por un momento sentí que me desmayaría cuando escuché esas palabras de la boca de mi amiga. Se la veía seria, está hablando en serio y casi me cuesta creerlo. Dejo mi vaso en la mesa, cruzo mis brazos y le miro acusadoramente.
-O sea, no me juzgues. –Me dice apenada- Pero no se ve que Dana ame a Juan. Mira a Janira, ella se ve más enamorada de Juan que Dana.
-No es necesario que los vea. Se le nota a kilómetros.
-¡¿Ves?! Dana va a perder a Juan si sigue siendo como es.
-¿Cómo es?
-Ya sabes. –Pone sus ojos en blanco- Tal vez ella no le da lo que él quiere.
-Liss, no creo que una relación solamente sea sexo.
-¡Yo no me refería a sexo! ¡Me refería a atención!
-Ella lo busca.
-Sí, pero... Tú no vives con él.
-¿A qué te refieres?
-Dana... es fría. –Me dice mientras agarra mi vaso- Es como si estuviera con él por despecho. Va a casa cuando yo la invito, pero de ahí no va.
-Mira, sabes, mejor ve con Roberto y mantén tu relación con él.
-¡Okay! –Dice- Oh, ya no tienes cola.
Era obvio que no iba a tener cola, la acaba de botar al suelo mientras se reía ligeramente. Deje eso ahí y fui en busca de Boris. Pasé buscándolo alrededor de toda la casa pero no lo encontré, me frustré y dejé de buscarlo.
De regreso a la sala, en el pasillo me encuentro con Zamira que estaba agarrándole el brazo a Dylan. ¿Qué hace Dylan aquí? Pensé que él no sale a fiestas y esto me sorprende. Llego hasta donde ellos se encuentran y veo que se alegra de verme.
-Julieta, sácame a Zamira de encima. –Dice enojado- ¡Me tiene harto!
-¡Pero tócalas! –Oh, acabo de oler alcohol proveniente de ella- ¡No se sienten reales y me frustra! ¡Es horrible tener operadas los senos! ¡No sé qué pensaba cuando lo hice!
-En ser zorra, eso pensabas. –Le contesta Dylan grosero- ¡Déjame en paz y vámonos!
-¿Vámonos? –Le digo confundida.
-Zamira es mi hermana menor. –Me dice serio.
-¡Pero está en nuestro salón!
-Sí, yo no estudié un año en la escuela por mi problema del corazón. ¿Feliz? –Me dice irritado- Ahora mi castigo es soportar a mi hermana menor.
Viéndolos bien, si se parecen. Ambos son rubios aunque Dylan es ojos azules y su hermana tiene ojos marrones, y tengo que admitir que él es más hermoso que su hermana. Ella se sienta en el piso como niña pequeña y empieza a quejarse.
-Por estas cosas mi madre me obliga a acompañarla. –Bufa molesto- Y también el motivo de su divorcio.
-¿Son divorciados?
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#2 Alas marchitas.
Teen FictionJulieta Gómez es una adolescente problema de diecisiete años, hija de padres adinerados. Ella junto a sus amigos se mete en varios inconvenientes hasta que le sucede lo esperado en cualquier adolescente, se enamora. En su vida llega Kevin, un profe...